Análisis de Mega Man Legacy Collection (PS4, Xbox One, PC)
¿Es Mega Man Legacy Collection una insinuación de Capcom por recuperar a uno de sus personajes más recordados de los 80 y 90? Después de las sonadas cancelaciones de proyectos en marcha con este personaje e incluso la aparición de un hermano bastardo –Mighty No. 9- al menos parece que hay intención de no olvidar a este héroe de las plataformas y la acción.
O puede que sea un espejismo y nada haya cambiado. Oficialmente Capcom ha anunciado que si esta colección tiene éxito, otros compendios podrían llegar en un futuro.
Dependerá de las expectativas comerciales puestas, que no deberían ser muy altas si atendemos al silencioso lanzamiento.
Legacy Collection es un recopilatorio de los seis primeros juegos para varios sistemas, primero para PC, PlayStation 4 y Xbox One, y a principios de 2016 en Nintendo 3DS. Seis clásicos del género para nostálgicos o para descubrir, si no lo has hecho ya, el legado de Mega Man. No reanalizaremos en este artículo los episodios, disponibles anteriormente en otras plataformas –especialmente en la consola virtual de plataformas Nintendo-, sino el valor de esta colección y sus extras.
Una colección ¿demasiado? fiel a los orígenes
Si decimos que Capcom –o mejor dicho, Digital Eclipse Software- ha creado un emulador y unido los archivos bajo un menú inicial probablemente suene a poco, pero es casi lo que tenemos con Legacy Collection. En realidad no es tal cual lo que se ha hecho: corren sobre el motor Eclipse Engine en lugar de emulación para conseguir más perfección y disponibilidad en diversas plataformas, pero a ojos del usuario este dato quizás sea poco relevante.
No obstante la fidelidad es un plus para los puristas, ya que la conversión es muy respetuosa a la experiencia en NES. ¿Cómo de fiel? Incluye el tipo de errores visuales de los 8 bits, parpadeo de sprites y pequeñas ralentizaciones que deben comprenderse como parte de su diversión. Igualmente, de cara a la jugabilidad se mantiene el frame de retardo de NES. En teoría, si lo jugases en una pantalla de tubo y un pad de la consola de 8 bits no podrías saber que se trata de un relanzamiento. Sólo se han corregido algunos fallos relacionados con la limitación de hardware, no del código.
La emulación incluye escasos efectos gráficos que se resumen en líneas horizontales simulando un monitor y una televisión –degrada un poco más la imagen- para dar algo de textura a unas pantallas que, a gran tamaño, quedan demasiado frías por su baja resolución. Hay ajustes para el tamaño y proporción de la ventana: original, que cubre la mayor parte del área central de la televisión en un múltiplo de la resolución, ajustada a la altura –podría quedar un poco más borroso- y a toda pantalla, con distorsión horizontal. Las barras laterales se pueden decorar con arte.
Echamos en falta más opciones, como la típica distorsión de la curvatura en un CRT o más filtros con los que experimentar un poco más. Este tipo de extras son lo que realmente dan valor a rejugar clásicos de hace 25 años, disponibles en muchos sistemas. Y ya que hemos hablado de los defectos técnicos, ¿qué tal la posibilidad de eliminarlos al estilo Mega Man 9? Sobre todo de cara a ese público no menor que se sentirá incómodo al ver sufrir su máquina último modelo por estos gráficos o que simplemente, anteponga calidad a nostalgia.
Añadido al menú de pausa encontramos un guardado manual en cualquier momento del juego. Sin duda hace la partida más fácil, pero tiene la suficiente utilidad como para no quejarse de ello. Abusar o no de esta ventaja queda a la conciencia de cada usuario.
En cuanto a jugabilidad se ha añadido un botón de disparo rápido, visto con anterioridad en otras revisiones -Rockman Complete Works y Mega Man Anniversary Collection- que consiste en disparar una pequeña ráfaga en lugar del disparo único de siempre. Es otro aspecto que suaviza un poco la curva de dificultad porque generalmente aciertas tres balas cuando de la otra manera sólo uno. Por supuesto es opcional, y ayudará a los novatos a adaptarse a esta saga.
Sobre el contenido, cada juego dispone de sus propias galerías de arte promocional e ilustraciones de desarrollo, así como una base de datos con información de los enemigos –textos traducidos al español- y un reproductor de la banda sonora. Son imprescindibles en este tipo de recopilatorios de cara a servir de lección de historia de los videojuegos.
Al margen de los títulos intactos tenemos un modo desafío con más de 50 retos para los más jugones. De dificultad elevada, estas fases ponen a prueba nuestra habilidad con segmentos de los seis juegos remezclados en fases bajo un tiempo límite o enfrentamientos contra los jefes. Hay guardado de repeticiones para ver las jugadas de los campeones y tablas de récords online para comparar nuestra pericia. Es probablemente el extra más interesante de este pack para quienes se conocen de memoria los seis juegos.
¿Cumple Legacy Collection con lo que promete? Sí, es un recopilatorio idéntico –o casi- a los originales. Las dos anteriores colecciones presentaban algunas diferencias jugables o incluso nuevos errores producto de una emulación deficiente, pero también hay que penalizar que en cuanto a extras es el más escaso –y su precio puede resultar un poco elevado para lo que ofrece-. A Legacy Collection le hace daño lanzarse poco después de Rare Replay, un ejemplo de cómo deben ser las colecciones tributo a una saga –desarrolladora en ese caso- en cuento a material retro seleccionado. El mérito de emular bien NES parece que no justifica demasiado su lanzamiento, algo que se podría compensar añadiendo el triple de juegos por el mismo precio.
Rockman Complete Works por ejemplo añadía funciones de vibración, modos, banda sonora remezclada –en Legacy Collection los juegos sólo traen la original-, y Mega Man Anniversary Collection más títulos –del primero al octavo más Mega Man: The Power Battle y su secuela-, un sistema de consejos y rutas para completar cada fase e incluso vídeos con entrevistas. Esto nos deja una sensación agridulce porque Legacy Collection es una oportunidad perdida de ser la colección definitiva de Mega Man, o al menos de gran parte de su origen.
Conclusiones
Es difícil saber a quién va dirigido Mega Man Legacy Collection. ¿Al coleccionista compulsivo? En ese caso se encontrará pocas novedades salvo, naturalmente, la posibilidad de jugar a unas buenas conversiones en sistemas actuales. ¿Al principiante? Descubrirá seis juegos de este clásico, una visión un poco pequeña de lo que ha dado de sí el personaje.
Nada de esto impide que los Mega Man seleccionados merezcan la pena con sus más y sus menos, entendiendo que se trata de una colección conservadora porque ese es su objetivo. Como recopilatorio que debuta a 14,99 euros, que es lo que analizamos, quizás sea demasiado escaso.