Análisis de NBA 08 (PS3, PSP, PS2)

Si el fútbol es considerado el Rey de los deportes, y anualmente nos brinda una entrega de cada una de las sagas por excelencia –Pro Evolution Soccer, FIFA, y los puntuales juegos dedicados a los grandes torneos estivales como el Mundial y la Eurocopa-, el baloncesto está sólo un peldaño por debajo. Por ello, cada año contamos con nuevos títulos de las franquicias más conocidas por los aficionados a la canasta, como la serie de EA, NBA Live, y la serie NBA 2K, ambos títulos multiplataforma. Actualmente, estas franquicias realizan la liga más dura de todas, ver qué juego es el mejor y más exitoso entre los jugadores, donde el nuevo juego de baloncesto de Sony para su PlayStation 3 luchará por un hueco. Este juego es NBA 08, un buen trabajo en el que se muestra el esfuerzo realizado por la desarrolladora por dar un nuevo aire al género, pero que acaba siendo perjudicado por su defectos jugables y técnicos. Como todo título deportivo, los objetivos son claros, así como su jugabilidad. El baloncesto se ve premiado por tener un gran nivel de sencillez y por ser muy directo en cuanto a la jugabilidad se refiere. Es por ello que podemos pensar que lo único que debemos hacer es seleccionar un equipo y dedicarnos a ganar partidos anotando el mayor número de puntos posible. Si pensamos eso, Sony nos demostrará que estamos bastante equivocados, pues lo primero que deberemos hacer en NBA 08 es crear a nuestro jugador particular. Para ello contaremos con un amplio abanico de posibilidades que nos permitirán decidir su aspecto físico –cara, estatura, cuerpo, estilo-, y también su nombre, apodo, número de camiseta, universidad y lugar de nacimiento. Una vez hayamos creado a nuestro avatar, este sistema no tendrá más misterio que el de hacer que sea traspasado a un equipo de la liga, no importa cuál, por lo que podremos ver cómo nuestro hijo particular es fichado y pasa a jugar de titular en equipos del nivel de los Lakers, Spurs, o Miami Heat, por citar algunos de los más famosos. He aquí donde entra todo lo interesante de esta posibilidad, pues cuando juguemos, nuestro jugador irá ganando una serie de experiencia por medio de un sistema llamado Upside Progression System, y con la que podremos mejorar la habilidad y modificar los atributos de nuestro jugador, mejorando de esta manera su precisión de tiro, su capacidad defensiva, y todo lo que podamos imaginar. Estos puntos se ganarán cada vez que logremos alcanzar una meta, es decir, si realizamos un doble doble, si conseguimos anotar tantos triples, si realizamos tantos puntos, si conseguimos dar tantas asistencias, etcétera, se nos abonarán los puntos de experiencia y podremos realizar todo lo comentado anteriormente, además de poder conseguir una serie de extras, como comprar nuevas equipaciones, nuevas canchas, etcétera. Dejando de lado la satisfacción de ver cómo nuestro jugador alcanza el Olimpo de la NBA, pasaremos a comentar el sistema de juego. Éste no tiene ningún misterio, como ya hemos dicho, pues nuestra meta será ganar los partidos y, sobre todo, pasar un buen rato. Para ello, contaremos con los modos de juego típicos de todo juego deportivo, como son el Partido Rápido, en el que seleccionaremos el equipo que deseemos dirigir, así como también el equipo contrario al que deberemos vencer con todo nuestro esfuerzo, pudiendo elegir entre todos los equipos de la liga nacional americana de baloncesto, todos ellos licenciados en equipajes y jugadores.

Además de este modo, contaremos con un modo llamado Liga, en el que podremos escoger un equipo y realizar partidos de exhibición, realizar una temporada completa, o jugar los playoffs por el título, algo realmente interesante. Por otro lado, hay un hueco para el sistema multijugador a través de su modo online, en el que podremos realizar partidos rápidos, contemplar otros partidos, la clasificación de jugadores, así como ver un historial con todo lo que hayamos realizado y conseguido, a modo de estadísticas. También habrá lugar para los minijuegos, que nos propondrán pasar un buen rato con el mero hecho de realizar una serie de juegos que no serán nada complejos, pero a los que no recurriremos una vez nos adentremos en el modo NBA Replay. Este modo tiene todas las características de un modo desafío, y en él se nos propone conseguir lo que un jugador logró la temporada pasada, y a medida que consigamos afrontar estos desafíos con total éxito, se irán desbloqueando nuevos desafíos. Estos pueden ir desde anotar más de 20 puntos con un jugador, realizar 10 asistencias y una sola pérdida, no dejar que un jugador del equipo contrario anote canastas, anotar 5 triples en el último tramo del partido, y una serie de objetivos que darán mucha variedad al juego, y que lograrán picar a más de un jugador, por su dificultad. En todos los modos de juego –y también lo habría si existiera un modo Carrera, que realmente se echa en falta-, podremos realizar todos los ajustes que deseemos, como plantear la alineación que partirá de inicio, ver las estadísticas durante el partido, así como realizar los cambios que resulten pertinentes y nos permitan dar la vuelta al partido si lo vemos en contra. Además, a la hora de jugar, podremos realizar una serie de acciones que serán de lo más interesantes, pero que al mismo tiempo no supondrán ninguna novedad jugable que no haya aparecido con anterioridad en los otros juegos de baloncesto que podemos encontrar en el mercado.

Así, podremos realizar acciones como mates, dribblings, alley-up o bandejas, robos –pitan excesivas faltas en nuestra contra, pues el sistema de robo de balón está algo mal implementado-. Pero lo que sí que destacará sobre el resto del apartado jugable será la posibilidad de realizar jugadas ensayadas y el sistema de lanzamiento. Con este sistema, se nos mostrará las posibilidades de acierto que tenemos a realizar un tiro, triples incluidos, permitiéndonos realizar el tiro en el momento oportuno para acertar de pleno en la canasta. Este sistema nos indicará si vamos a fallar el tiro con un color rojo en la barra indicadora, amarillo si es posible que lo encestemos, y verde si es seguro que vayamos a anotar el disparo, por lo que sabremos de antemano si vamos a tener que defender el rebote, pudiendo hacer las pertinentes indicaciones para que otro jugador de nuestro equipo se dirija a la canasta para luchar por ese necesario rebote. El sistema de control será sencillo, pues las acciones básicas serán muy fáciles de realizar. Con el botón X de nuestro Sixaxis o DualShock 3 realizaremos los pases en el modo de ataque, pero también nos servirá para realizar los robos de balón a la hora de defender los ataques del equipo contrario. Con el botón O realizaremos los disparos, pudiendo realizar dejadas o bandejas si los combinamos bien, o también quedarnos plantados para ser un escollo para el jugador rival. También habrá lugar para la estrategia, si combinamos el botón L2, que nos asignará un nuevo botón para los jugadores, pudiendo decidir a quién pasárselo desde la distancia. Con el botón triángulo podremos realizar un pase rápido sin mirar, que nos permitirá actuar con velocidad para noquear a nuestro contrario, o saltar a la hora de defender para realizar un tapón. Los jugadores serán dirigidos por el stick izquierdo, y cuando nos apropiemos de un balón, podremos realizar dribblings si al mismo tiempo movemos el stick derecho.

Sin embargo, gracias al afán de Sony porque el sistema de sensor de movimiento de su mando tenga más protagonismo, existe la posibilidad de realizar regates con el movimiento de nuestro mando. Por otro lado, los dribblings son bastante ineficientes en el sentido de que los jugadores contrarios defienden la posición como si de auténticos portentos físicos se tratara, detalle que quita bastante del realismo que se podría plasmar en el juego, pues no hay jugador que se les resista si no es paciente. Si le sumamos que en muchas ocasiones el control no responde como debería, sólo lo podemos catalogar de sencillo. Si hablamos con total sinceridad, el título que tenemos entre manos destaca, sobre todo, en el apartado técnico, tema a debatir. El esfuerzo realizado por la desarrolladora ha sido muy grande, por lo que nos ha dado la posibilidad de jugar en alta definición de 1080p, siempre que nuestra televisión –y nuestros bolsillos- lo permitan. Este hecho nos permitirá disfrutar al máximo de las bien recreadas canchas, que destacarán por ser muy fieles a la realidad, y en las que veremos moverse de manera muy fluida a todos los jugadores de nuestro equipo, así como los contrarios, que correrán sin ralentizaciones y a ritmo constante. Correrán, o se deslizarán, pues la pista es excesivamente rápida, dando lugar a un efecto algo artificial. Además de ello, el modelado de los jugadores será excelente, y destacará por ser fotorrealista, pues podremos reconocer a todos los más famosos jugadores llenos de detalles, como los músculos, los tatuajes, los pendientes, el movimiento de las camisetas, y el sudor, que se podrá ver con una mayor precisión en las escenas, siempre llenas de espectacularidad. Estas últimas se mostrarán justo en el momento en el que vayamos a realizar un movimiento especial, como puede ser la bandeja, un alley-up, o un mate. En ese momento, la cámara cambiará radicalmente, y se nos mostrará una secuencia a la que deberemos estar atentos, pues tendremos que apretar el botón para realizar el movimiento, dando como resultado un fragmento cargado de espectacularidad que no corta en exceso el ritmo de juego. Pero no todo serán virtudes, que ciertamente son escasas, sino que siempre hay lugar para pequeños fallos que no se pueden permitir a estas alturas de la generación, y que no hacen más que empañar por completo el notable resultado.

Estos pequeños fallos no hacen más que justificar que no basta con esforzarse por mostrar un conjunto en la mayor definición posible, sino que hay que pulir todos los posibles errores, de entre los que destaca que los jugadores junten sus piernas con las de otro al chocar con él, o que desaparezca un brazo cuando intente robar el balón. Son fallos que demuestran que no se ha realizado el esfuerzo realmente necesario, pues son defectos que tienen solución, como el hecho de contar con impedimentos a la hora de intentar regatear a otros jugadores que defienden, bastante irreal, pues en ocasiones existe una especie de tope que nos lo impide. En cuanto al apartado sonoro, cabe destacar que la banda sonora con la que cuenta este nuevo título, está repleta de pistas que quedan ligadas a la perfección con el estilo de juego con el que nos encontramos, pues consiguen lo que se pretende: crear un ambiente lo más ameno posible, y presenta unos efectos de sonido bastante reales que ven incrementada su calidad por el soporte THX, como si de un cine se tratara. Sin embargo, este apartado también se ve perjudicado por un elemento esencial en los juegos de deporte, el doblaje. Los comentarios del juego están en perfecto … inglés, no han sido doblados a nuestro idioma, un defecto que no tiene casi ningún juego deportivo en la actualidad y que, en definitiva, acaba perjudicando a un título que cuenta con bastantes detalles que dejan bastante que desear si pensamos en qué generación nos encontramos, pues con un poco más de esfuerzo –y quizá de tiempo-, se podría haber presentado un apartado técnico muy superior al que realmente presenta, en el que existiera una mejor localización territorial, pues no es suficiente que los menús se encuentren traducidos.

Sony ha intentado lanzar al mercado un título que rivalice con los grandes estandartes del género, pero podemos decir que no han conseguido implantar todo lo que les permitiría ganar la batalla por el trono del baloncesto, pues a los poseedores de PlayStation 3 no les bastará con que el juego presente la posibilidad de configurarlo en alta definición. NBA 08 cuenta con escasas virtudes frente a los defectos jugables y gráficos que no hacen otra cosa que empañar el resultado final, pese al sistema de lanzamiento, y el modo desafío, altamente recomendables. En definitiva, es un juego que pasará desapercibido, pues hay alternativas que superan con creces a esta nueva entrega.