Análisis de Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010 (PS3, PSP, Wii, Xbox 360)

Sin sorpresas de última hora, como sin duda habrá en la competición el próximo mes de junio, este juego oficial del Mundial de Fútbol cumple completamente las expectativas. Ahora que FIFA es el mejor juego de fútbol, Electronic Arts ha aprovechado inteligentemente la base de FIFA 10 para adelantar algunas de las novedades y mejoras que tendrá la próxima versión de su juego de fútbol y crear, sin ninguna duda, el mejor juego de fútbol basado en competición oficial alguna desde aquel mítico Italia 90, superando al notable Euro 2008 (que anticipó lo que sería FIFA 09) y poniéndolos los dientes largos ante el próximo FIFA, que saldrá como es costumbre a principios del mes de octubre.

Copa Mundial de la FIFA 2010, como juego de fútbol, es algo así como un eslabón de la evolución entre el último FIFA y el siguiente, como si en algún momento del proceso de desarrollo EA Sports hubiese dicho "desde aquí", y completase el excelente motor gráfico y de simulación del deporte rey de FIFA 10/11 con un envoltorio mundialista y modos de juego apropiados (de hecho apostamos a que así ha sido). En este sentido, como es de esperar este juego oficial es el mejor juego de fútbol del momento, ya que mejora a FIFA 2010, y ya que jugablemente es prácticamente igual a éste, EA se ha esforzado especialmente en que la ambientación y los modos de juego le den un toque diferenciador.

En lo que a atmósfera se refiere, EA ha intentado darle al juego ese toque emocional que emanan los partidos del mundial, especialmente las eliminatorias, intentando reflejar con cinemáticas de los jugadores, la afición y los entrenadores ese gusanillo que todos los aficionados del fútbol sienten cuando madrugan para ver el partido de cuartos de final de su selección en un continente lejano y están en tensión hasta que cae finalmente eliminada. Los partidos se intercalan constantemente con animaciones del técnico, enfadándose, dando indicaciones a los jugadores o visiblemente nervioso porque no le gusta lo que está viendo. También se ven las reacciones de los aficionados ante goles, faltas peligrosas u ocasiones falladas y, por supuesto, las cinemáticas entre los jugadores también son abundantes; ya lo eran en FIFA 10, pero aquí tienen "ese" toque, ese lado emocional y apasionado de los mundiales.



EA se ha propuesto reflejarlo constantemente para así diferenciar el juego de los (o sus) otros simuladores de fútbol, y lo ha conseguido con creces. Las secuencias cinemáticas son abundantes pero, sorprendentemente, no resultan cansinas, al producirse con el mismo ritmo y en los mismos momentos que planos similares en las retransmisiones deportivas. Un acierto por parte de EA, ya que aunque el juego queda lejos de los niveles de Heavy Rain, Metal Gear o el estándar de "narración cinemática" que se os ocurra, sí es un aspecto original que queda muy bien y logra su objetivo, pese a que la influencia en la jugabilidad sea, evidentemente, nula. Lo que se echa algo más en falta es más variedad en estas reacciones, especialmente las de los entrenadores o el público. A medida que juguemos los partidos nos cansaremos de ver a Vicente del Bosque reaccionar siempre igual, o el escaso repertorio de reacciones de la hinchada. Pero es un buen comienzo.



Los modos de juego ya son un poco más discutibles. Si como juego de fútbol Mundial FIFA 2010 es el mejor, al ser un FIFA 10 mejorado, como producto en sí no es tan completo ni como éste ni como su competencia. Esto, por otra parte, era de esperar, pero quizás más modos de juego, y más imaginativos, hubiesen paliado en parte la limitación implícita que supone que sea un juego del Mundial y por lo tanto restringido a combinados nacionales y a la competición en sí.



Contamos, por supuesto, con la posibilidad de jugar la fase final con una de las selecciones clasificadas y con todos los partidos y el calendario oficial, o también podemos jugar el Mundial desde el principio, desde la fase clasificatoria, permitiéndonos además ir formando a un equipo de "seleccionables" de entre un repertorio de jugadores de cada país (que para algunos resultará limitado al no incluir a ciertos mitos). Ambos modos comparten la misma interfaz, que nos permite ver las últimas novedades en una especie de pseudo-portal de información, contando con una gran galería de imágenes y recursos para crear titulares y noticias acorde a lo que vaya sucediendo tanto en la fase clasificatoria como en el mundial.

En esta interfaz podremos ir labrando nuestro once tipo, manejar nuestras formaciones para tenerlas listas antes de cada partido, y ver la evolución del estado de forma de los jugadores, así como sus posibles lesiones o sanciones. Es una interfaz muy completo y claro, algo redundante en ocasiones, pero muy útil, especialmente en el modo "completo", si queremos clasificar a alguna selección mediana o pequeña en un nivel de dificultad elevado. Poco a poco iremos viendo qué jugadores funcionan mejor e integrando una lista de futuros seleccionables para el reto final de Sudáfrica.

El modo del Mundial funciona a la perfección, que no es poco, pero los otros modos de juego no son lo suficientemente numerosos en comparación con otros juegos de fútbol. Contamos con "Capitanea tu equipo", un modo análogo al Se un Profesional de FIFA 10, en el que nos permiten controlar a un solo jugador en los partidos, ganándonos con trabajo y esfuerzo nuestro puesto en el once de gala que nuestra selección luzca en el Mundial. Muy prometedor resulta, o resultaba, el modo Historia de la Clasificación, en el que nos muestran situaciones de la fase de clasificación y del pasado Mundial de Alemania (incluyendo vivir los últimos momentos de la final tanto siendo Italia como Francia), comenzando un partido en un minuto concreto con la misión de ganarlo o de darle la vuelta. EA lanzará durante el Mundial escenarios basados en los partidos de este mundial como contenido descargable, pero se echa de menos que EA haya "escarbado" algo más en la historia de los mundiales y hubiese ofrecido partidos y situaciones de campeonatos más antiguos, para revivir la épica y la gloria de selecciones y jugadores de leyenda, la Francia de Zidane, Brasil del 94, la Argentina de Maradona, la Naranja Mecánica, etc...

Aparte de estos modos, y considerando que podría haberse aprovechado más el de escenarios, se incluye el multijugador online, la posibilidad de jugar la Copa Mundial Online, y modos de entrenamiento varios, incluyendo uno dedicado a la renovada tanda de penaltis de la que hablaremos más tarde. Resulta difícil imaginarse nuevos modos de juego, pero el contenido es, en definitiva, limitado, y el modo de escenarios podría haberse aprovechado más, por lo que pese a que como juego de fútbol no tiene rival actualmente, en modos de juego resulta inferior tanto a su hermano FIFA como a su rival de Konami.



Los cambios jugables son sutiles y no se notan a la primera si has jugado a FIFA 10, pero a medida que juguemos iremos viendo cómo se han mejorado un poco los tiros, hay más fluidez a la hora de luchar por la pelota o cortar un pase, sobre todo al detectar choques o impactos entre jugadores o entre estos y el balón. Aparte de mejorar en general a nivel jugable, y seguir siendo un simulador excelente, quizás el cambio más llamativo esté en el sistema de tirar penaltis, una característica de los juegos de fútbol que se ha mantenido prudentemente conservadora a través de los últimos años.



En el juego del Mundial hay una barra de concentración que hay que parar en el momento justo para que el tiro nos salga bien, y varias opciones, como hacer la paradinha, o varias formas de manejar el portero cuando nos toque parar. El resultado es interesante, como si fuese un globo sonda para integrarlo en futuras versiones de FIFA, y la verdad es que funciona bien. Los penaltis siempre han sido un minijuego en sí, en el que hay que adivinar hacia donde tirará el rival, y éste último tiene que tener cuidado de no tirar el balón fuera, y EA lo que ha hecho ha sido hacer más variado el minijuego, lo que a dos jugadores es especialmente divertido (y, con la paradinha, potencialmente humillante).


Finalmente, una curiosidad que ha llamado la atención: el modo control con dos botones, orientado a los padres que quieran jugar con sus hijos -en palabras de la propia EA-. Es un añadido que pasará un tanto desapercibido, si no completamente, para los jugadores, pero resulta un avance a la hora de intentar acercar los videojuegos a la gente menos familiarizada. Aunque de dos botones, nada, porque se usan también los cuatro de arriba.

A nivel gráfico se nota ya una evolución consistente respecto a FIFA 10. Hay más movimientos para los jugadores, nuevos efectos de iluminación y se nota un mejor modelado de las caras de los jugadores, especialmente en las grandes estrellas. Más importante, se corrige una de las críticas que lanzamos hacia FIFA 09 y FIFA 10, las diferencias entre la corpulencia de los jugadores tanto en el modelado como en la animación. Ahora los cuerpos son más parecidos a cómo son en realidad, y las animaciones lo reflejan. Messi o Agüero se mueven ágilmente y a toda velocidad, mientras que otros futbolistas más torpes y grandotes cuentan con animaciones más adecuadas. La ambientación de los estadios es fantástica, exagerada incluso, y las escenas cinemáticas, como ya hemos dicho, aportan un toque emocional acertado y no molestan en absoluto.

El apartado sonoro del juego vuelve a ser soberbio, incluyendo una amplia selección de temas procedentes de numerosos países, aunque ninguno de España, y destaca especialmente el porcentaje de canciones africanas, mucho más elevado de lo habitual por ser el primer mundial que se celebra en el continente. Los efectos de sonido tienen la misma calidad de siempre, aunque no hay tantos cánticos de las aficiones como en FIFA, mientras que los comentarios, de Pepe Domingo Castaño y Javier Lalaguna, vuelven a reflejar con precisión -más de la acostumbrada, hemos notado- lo que sucede en el terreno de juego, con el adecuado toque de humor en ocasiones.


En resumen, Copa Mundial de la FIFA 2010 es una gran compra para un aficionado a los juegos de fútbol, siempre y cuando no tenga FIFA 10. Es demasiado parecido a éste y, aunque lo mejora, las novedades no son tantas y la compra del juego solo está justificada si el usuario es un verdadero forofo de los juegos de fútbol y la inminencia del Mundial hace que se "caliente" y se haga con él. Pero precisamente por esto, FIFA 11 está a la vuelta de la esquina y eso puede jugar en contra de que eso ocurra. En cambio, los jugadores más generales, aquellos que juegan de vez en cuando a un juego de fútbol, o los fans de Pro Evolution Soccer, tienen una compra muy interesante en este juego del Mundial, un gran simulador de fútbol que refleja muy bien la competición, pese a no incluir mucho más que ésta. En cualquier caso, da gusto ver, por fin, un juego del Mundial que sea el mejor juego de fútbol del momento. Y un gran aperitivo para el futuro FIFA 11.