Análisis de Guilty Gear X2 (PS2)

Desde su primera entrega en Ps One, Guilty Gear despuntó sobre el resto de juegos de lucha en 2D por ofrecer una personalidad propia, una jugabilidad tremendamente técnica y dinámica. Tras el excelente Guilty Gear X nos llega ahora su segunda parte, pero ¿es tan revolucionario como sus pre-cuelas? Veámoslo.

Este no es un juego de lucha donde sus integrantes se líen a mamporros con afanes monetarios o por simples venganzas. Guilty Gear X2 se sostiene por los pilares de una gran historia a narrar, una que nos cuenta como la raza humana crea los Gears a modo de experimento para mejorar la raza con nuevas tecnologías.

Experimentos que no tardan en irse de las manos de sus creadores y siendo mal utilizados por los demás países dando como resultado ejércitos de estos avanzados expertos en destrucción y una lucha que por centenares de años relegará a la especie humana a ser perseguida como objetivo a eliminar por los Gears.

Tras estos eternos enfrentamientos, los combates que se suceden en el juego nos vendrán a contar la historia de cada uno de ellos y como todos de una forma u otra tienen su porque y sus objetivos. De ahí lo variopinto y variados de los luchadores. Desde Sol, el primer de los Gears, 150 años encubriendo su pasado, apellidado "Badguy" y demostrando que sus cualidades en el combate superan con creces su aún latente parte humana. Ky su eterno rival, de la orden sagrada de caballeros santos y vigía de la humanidad, Slayer nacido en Transylvania y con poderes vampiricos aplicados a su ideología, Zappa el desafortunado de por vida –al pesar sobre el una lamentable historia de amor-, Bridget que a pesar de su nombre y apariencias es un chico obcecado en demostrar a sus padres que puede sobrevivir sin la supesta maldición que les llevo a criarlos como a una chica, e I- No, una mujer cuyos orígenes y motivos se arropan en el misterio y solo serán desvelados al final del juego -ella será la pieza del puzzle que dará sentido a buena parte del enigma-.

Tras los personajes principales y los nuevos en esta entrega nos quedan un gran elenco de luchadores con sus historias y sus culturas, lo que resulta en unas remarcadas personalidades esculpidas en viajes temporales, terribles experimentos que buscan explicaciones, o simplemente defender los clanes a los que algunos pertenecen.

Cierto es que las 3D han sido un paso evolutivo en los videojuegos, y que las producciones en dos dimensiones a día de hoy suelen ser vistas como un paso atrás en la tecnología. Craso error, por esto mismo GGX2 es una clara exposición de la evolución de las 2D, pues tomando lo mejor de las 3D y unas dos dimensiones tremendamente exquisitas, forman uno de los juegos mas vistosos a nivel visual.

Todos y cada uno de los escenarios están construidos con un enfermizo cuidado por el detalle. Paisajes repletos de calles con imponentes castillos, caóticos lugares con arquitecturas imposibles, bosques por los que perderse entre su espesura y profundidad, una ciudad acostumbrada a construir sus cimientos bajo el agua o ese escenario en mitad de ningún sitio donde luchamos enfrente de una temible bestia retenida por diminutas cadenas, estos y bastantes mas son lugares natales de nuestros personajes a la vez que una gran muestra de la imaginación de los dibujantes.

Por supuesto que no nos vamos sin mencionar que el juego y todos sus sprites están en alta resolución, lo que hace a los personajes mucho mas nítidos de lo que estamos acostumbrados a ver en otros tipos de juegos de lucha 2D. También es verdad que no es nada nuevo no visto en GGX, pero todo esto, unido a todos los efectos en 3D al hacer magias, algún especial, o simplemente contrarrestar un ataque, convierten al juego en un poema visual. Amén de los 60 hzs.

La música del juego es otro gran alarde de buen gusto. Cada uno de los personajes tendrá una música con un instrumento musical diferente, lo que va a significar que una melodía empiece con unos compases de piano, hasta que las guitarras eléctricas inunden con fuerza la canción y sean la nota predominante. Dado que el juego es tremendamente rápido, las guitarras le impregnan un frenetismo por la acción que le viene como anillo al dedo, y en muchas de ellas una calidad de composición bastante altas, mencion especial para Write in pain, Suck a Sage, y No mercy, aunque las demás melodías son dignas del gran éxito que tienen en Japón y de su original sound track.

Los efectos sonoros rayan a un nivel excelente, pues cada personaje tendrá sus propios gritos y frases, un escalofriante efectos para los choques de metales y gritos inhumanos que demuestran buen gusto por regalar al juego con unos efectos sonoros realmente potentes.

Y decimos con experiencia por el encabezamiento de algunos de los componentes que "emigraron" de SNK y aquí demuestran su buen hacer con una gran cantidad de combos y demás sucedáneos prestados de muchos juegos, desde las barras de Burst hasta las de tensión que miden la energía de los Pows y el frenetismo de golpes para hacer combos. También como viene siendo costumbre los combos aéreos y el doble (y en alguno triple) salto harán buen uso de los reflejos y estrategia por todo el escenario.

Los modos de juegos han sido ampliados en numero con respecto a GGX, aunque no en demasía, pero podremos disfrutar con el modo de misiones en el que iremos desbloqueando una escueta galería de ilustraciones, un rápido survival, y todo para descubrir los versiones SP y EX, ademas de tres luchadores olcultos.

Y he aquí el dilema, ¿vale el dinero que cuesta teniendo su anterior entrega? Pues está bastante claro, si eres un acérrimo seguidor de la saga, lánzate a por el, pues aunque las novedades no son pocas, quizás para otros sean irrelevantes.

Nuevos temas, nuevos personajes, nuevos modos de juego, y el mismo reto hacia nuestra destreza. A la espera de sus nuevas vueltas de tuerca arguméntales y jugables, GGX2 alcanza a ser uno de los mejores juegos de lucha de por meritos propios. ¿Quizás en GGX3 rocen el techo de la perfección?