Análisis de The Incredible Adventures of Van Helsing II (PC)

The Incredible Adventures of Van Helsing llegó a nuestras manos hace escasamente un año. Editado en PC y Xbox 360, y en plena fiebre por Diablo III -el juego de rol y acción de Blizzard-, intentó hacerse un hueco con una serie de parámetros, mecánicas jugables y aspectos gráficos más que decentes. Desgraciadamente, aquello quedó en un simple intento, demostrando que en el atiborrado género en el que ambos competían, había que ejercer de algo más que de simple aspirante. Pese a ello, The Incredible Adventures of Van Helsing -que salió al mercado a precio reducido- consiguió establecer las bases para una prometedora saga -de la que hoy, empezamos a ver sus frutos-, viéndose respaldada así mismo, por las legiones de aficionados del action RPG.

Bajo el título The Incredible Adventures of Van Helsing II, esta secuela llega en el momento oportuno, y con una serie de cambios que la hacen más refinada, completa y notable que su anterior intento.

Cazadores de monstruos en un decadente mundo victoriano

The Incredible Adventures of Van Helsing II funciona como una secuela directa del primer juego. A todos los niveles. De esta manera, tendremos una jugabilidad más avanzada que recoge las bondades y mecánicas anteriores, una historia que continúa la narrada en primera instancia y otra serie de elementos que enarbolan el testigo dejado por el camino del anterior título.

Es aquí donde quizás hallemos uno de los puntos más negativos de cara al jugador más neófito -que quizás se haya perdido el título original, algo probable dado el carácter independiente de la saga-: no hay ningún ápice de ayuda para el que se adentra por primera vez en las aventuras de Van Helsing.

El argumento por su parte, es lo de más original y atractivo. Nos trasladaremos en pleno siglo XIX a Bergovia, un país ficticio, dónde la magia y la tecnología conviven en perfecta armonía. Por sus calles encontraremos algunos elementos victorianos -desde la arquitectura a las vestimentas o ropajes-, pasando por otros mucho más modernos y anacrónicos, dando como resultado una atractiva y embriagadora estética steampunk que sienta fenomenal dado el carácter sobrenatural que propone el título.

Entre callejones, casas decadentes, burdeles y vías de trenes impulsados a vapor, tenemos a Van Helsing Jr., vástago del famoso y carismático doctor Van Helsing -personaje presente en la obra original de Bram Stoker-, que decide tomar como herencia la ajetreada vida de su padre, y se propone luchar contra los vampiros y otras criaturas monstruosas que pueblan los parajes y ciudades de Bergovia -en cuya capital, Borgova, transcurre gran parte del juego-. En The Incredible Adventures of Van Helsing II deberemos servir como línea entre el bien y el mal, y aunque su historia sigue por los derroteros de la primera parte, la verdad es que es mucho más madura y trabajada -sin perder ese toque de humor y referencia que caracterizó al anterior capítulo-, y supone el punto intermedio o nexo de unión a lo que será en un futuro, una hipotética trilogía.

El arte de matar vampiros: estrategias y posibilidades de personalización

The Incredible Adventures of Van Helsing II es un juego, a priori, más dificultoso que el anterior. No mucho más, pero sí puede llegar a suponer un reto verdaderamente complicado, sobre todo si no nos manejamos en el género, o no hemos podido catar sus anteriores correrías como caza-vampiros. Gran parte de las mecánicas son idénticas a las del primer juego, que son las básicas de cualquier action-RPG o juego de acción y rol. Esto es, la consabida mezcla de control con ratón y teclado, utilizando el primero para mover, marcar y atacar con Van Helsing, y el segundo, para los atajos directos que nos ayuden a elegir entre pociones, objetos y elementos de defensa o ataque -como poderes especiales-. Habitualmente en el género, podemos escoger diferentes arquetipos de personajes, que van desde los guerreros a los magos o arqueros. Son una forma de escoger un tipo de juego en función de nuestras habilidades y características, y The Incredible Adventures of Van Helsing II sigue ese patrón, pero a su manera.

Van Helsing Jr. puede marcar su propia senda y dejar su impronta a la hora de machacar monstruos y criaturas, escogiendo hasta tres roles diferente en su cacería: Taumaturgo, Mecánico Arcano y Cazador. El primero, taumaturgo, se equipararía a lo que sería un rol mágico, capaz de potenciar conjuros y otros hechizos. El segundo, el mecánico arcano es lo más parecido a un pícaro -por poner un ejemplo-, capaz de elegir armas de fuego a distancia. Y el tercero, el cazador, es capaz de combatir cuerpo a cuerpo sin demasiados problemas, en distancias cortas. Cada rama tiene sus propias diferencias jugables, y una serie de elementos únicos para cada clase. Por si fuera poco, y como mandan los cánones, iremos evolucionando como personajes, escogiendo qué parámetros -desde resistencia a habilidad, pasando por velocidad o combate cuerpo a cuerpo- y ramas de conjuros o habilidades queremos mejorar.

The Incredible Adventures of Van Helsing II también nos ofrece la ayuda de Katarina -el espíritu de la mujer amada por nuestro protagonista- que irá con nosotros a todos los lados y que también tendrá su propia categoría en cuanto a equipamiento y jugabilidad. ¿Qué utilidad tiene esto? Pues en principio, más de la que creíamos. Katarina puede suplir esa falta de compañeros extra habituales en el género de rol -esta es una aventura, por así decirlo, más en solitario-, ya que puede llegar a ser un apoyo en los combates de la manera que así lo convengamos. Es decir, si nuestro personaje es experto en el combate cuerpo a cuerpo, y basa sus ataques en corta distancia, Katarina puede adoptar un papel más especializado en los hechizos lejanos o el ataque desde lejos, supliendo la carencia que pueda tener el protagonista y haciendo de nuestro tándem una mezcla más potente contras las amenazas sobrenaturales del juego.

O si así lo queremos darle órdenes para que nos sirva de soporte vital lanzándonos conjuros de recuperación. Podemos darle órdenes básicas, como la de utilizar, vender o intercambiar nuestro inventario, la de defender posiciones… Y no será nuestro único acompañante de aventuras. Llegados a cierto punto del juego, aparece una criatura enorme, llamada Quimera, que nos servirá de mascota y bestia de ataque, contando también a su vez con sus propias habilidades, objetos y características jugables. Lady Katarina -y en cierto modo, la Quimera- es muy útil en la mecánica de juego, y se nos antoja complicado pensar en The Incredible Adventures of Van Helsing II sin su presencia.

En términos generales, y como os decíamos al comienzo del análisis, The Incredible Adventures of Van Helsing II es un juego difícil, sobre todo si escogemos el camino complicado. El juego permite empezar desde cero, escogiendo clase y tipo de combate en el minuto uno, o continuar con algún personaje importado del juego anterior y arrancando directamente con él, con la subida de dificultad que implica tener los enemigos más resabiados que de costumbre. La I.A no es muy allá, pero nos hará sudar tinta si nos despistamos un poco, o no llegamos a controlar y enfocar con cabeza la evolución de nuestro personaje.

Las criaturas a las que nos enfrentaremos, ya sean demonios, vampiros, diablos o monstruos cibernéticos -hay un poco de todo, y la excusa del steampunk nos permite ver verdaderos engendros en pantalla- pueden ponernos en jaque si no llegamos a dominar nuestra forma de juego -repetimos, escoger bien, es esencial en The Incredible Adventures of Van Helsing II-. Cada recompensa arrojada por cada enemigo puede llegar a ser un verdadero tesoro -tanto por inventario, como por oro con el que comprar objetos-, con lo cual siempre existirá una motivación extra para continuar o emprender una nueva partida. Además, dadas las enormes posibilidades de configuración y mejora, la verdad es que siempre encontraremos excusas para probar nuevos caminos, armas o estrategias.

The Incredible Adventures of Van Helsing II es un juego tremendamente variado, que intenta sorprender cada cierto tiempo con un nuevo resquicio de jugabilidad. No solo hablamos de añadir nuevas ramas, habilidades y posibilidades a la entrega original, también encontramos la incorporación de la estrategia más propia del género "tower defense" o defensa de torres a la fórmula, algo que suena extraño al principio pero que funciona como válvula de escape al "point and click". Estos niveles o momentos -que van ganando en protagonismo conforme avanzamos en el juego-, ayudan a componer un retrato más estratégico, donde debemos impedir que criaturas, monstruos y otros seres, tomen y defiendan nuestra posición en las calles de Borgova o que ataquen los sitios donde residen los vampiros a los que necesitamos cazar.

Estos equipos de ataque y recolección pueden ser perfectamente autómatas a nuestra dirección, cumpliendo órdenes y recogiéndonos objetos de manera pasiva e independiente de la historia principal. Por si fuera poco, nuestra enorme criatura, la Quimera, también puede aportar su granito de arena. Así mismo, The Incredible Adventures of Van Helsing II atesora un modo multijugador, cooperativo y competitivo, muy corriente y artesanal -no hay servidores dedicados, y dependemos de la búsqueda intensiva de partidas o de la posibilidad de ser nosotros mismos el anfitrión-, pero que ayuda a que la vida útil y la duración del título sean mayores de lo que esperábamos en un principio.

Técnicamente, The Incredible Adventures of Van Helsing II no es ninguna maravilla pero sí es un juego muy resultón en lo visual, y habría que destacar que goza de un más que agradable apartado artístico y de un diseño muy trabajado en varias de sus facetas. Tanto las calles de las victorianas ciudades que visitaremos, como las mazmorras, catacumbas o parajes naturales sobrios por los que deberemos pasear a lo largo del juego, despiden cierto gusto y mimo por el detalle.

Los enemigos son también muy variados, y las animaciones, así como la iluminación y los efectos visuales colindantes -muy habituales dado el aspecto mágico del juego-, rayan a un gran nivel. Además, nos hemos encontrado que no hay tantos fallos ni problemas técnicos o gráficos como sí había en su entrega original, puliéndose así uno de los defectos que más achacaron y señalaron los jugadores en su primera parte. El sonido y la música, tampoco están nada mal, aunque echamos en falta mayor impacto en las melodías compuestas para la ocasión. Es curioso, pero no termina de aportar ese ingrediente sonoro que tan bien le hubiese sentado a la opresiva atmósfera del juego. Las voces del juego están en perfecto inglés, aunque el título cuenta con una más que correcta traducción al castellano.

Conclusiones finales

The Incredible Adventures of Van Helsing II es una muy buena segunda parte, que aporta más chicha a la formula jugable original y que corrige algunos de los más notables errores del anterior juego. ¿Suficientes para justificar su compra? Su historia es un poco más interesante, y establece ciertos parámetros a seguir para el punto final de esta trilogía, que presumiblemente, llegará el año que viene. NeoCore ha tomado buena nota de los problemas que aquejaban a sus títulos, y parece haber enderezado su saga a tiempo.

Esperemos que su tercera y última entrega, suponga el broche de oro a unas más que buenas y efusivas intenciones de su desarrolladora a marcar con firma propia en el género de rol. Quizás no sea el mejor videojuego del género, pero sí creemos que dado su atractivo precio y su enorme cantidad de contenidos -a día de hoy pocos juegos de rol ofrecen tantos niveles de personalización y evolución en un personaje-, puede llegar a merecer una oportunidad por el aficionado al género o al que disfrutó de la primera entrega.