Análisis de The Golf Club (PC, PS4, Xbox One)
Cuando hablamos de The Golf Club en nuestras impresiones ya comentamos que nos había sorprendido cómo un juego que apenas había hecho ruido ofrecía un producto tan sólido e interesante para los amantes de este deporte. Ahora, The Golf Club ya está entre nosotros, y si bien todavía queda margen de mejora, este título se convierte en una gran opción para los que busquen un juego de golf en consolas de nueva generación o PC.
Haciendo honor a su nombre
The Golf Club como todos sospecharéis, un juego de golf, pero además, es "un club". Este título combina la simulación con el contenido generado por la comunidad, creando una propuesta que hasta el momento no se había popularizado en el género. Así, si los jugadores responden, este título estará en actualización casi constante con nuevas pistas creadas por nosotros mismos, que podemos compartir fácilmente a través de internet.
Lejos de arcades o simuladores que casi necesitan una ingeniería, The Golf Club es un título muy sencillo y directo, con una interfaz clarísima . Si queremos, podemos jugar prácticamente sin utilizar nada más que los dos sticks –uno para apuntar y el otro para realizar el golpe–, pero si necesitamos mayor profundidad, podremos cambiar de palos, utilizar diferentes cámaras y "pedir" al juego más información, por supuesto.
Creemos que quienes nunca antes hayan jugado a un simulador de golf y estén interesados en hacerlo pueden encontrarse aquí con una buena opción, ya que nos permite dar los primeros pasos de manera bastante accesible, mientras que será necesario comprender cómo funcionan los diferentes aspectos del deporte para poder empezar a quedar bajo par en los recorridos.
El club
Desde el primer momento que vemos el menú nos damos cuenta que la interactividad con otros jugadores va a ser el elemento diferenciador. Tenemos en la esquina inferior izquierda un pequeño menú personal que recogerá todos los avisos sociales, y la interfaz ya se integra con las creaciones y marcas tanto de nuestros amigos como de todos los jugadores. Para que os hagáis una idea, el juego cuenta incluso con "fantasmas" de otros usuarios, que nos sirven para mejorar nuestros golpes y para introducir nuevos desafíos en tiempo real.
Consecuentemente, el aspecto que aleja a The Golf Club de la –ahora mismo, escasa– competencia es el editor de niveles. Tenemos a mano prácticamente todo lo que necesitamos para dar forma a nuestros campos, con diferentes entornos y con herramientas bastante accesibles y completas que nos permiten decorarlo, ajustar la orografía del hoyo, colocar el green y demás elementos imprescindibles de nuestra creación. Además, está perfectamente adaptado para el mando, y si no queremos empezar desde cero, o si necesitamos una ayuda para ello, podemos permitir que el juego nos genere una base aleatoria sobre la que trabajar.
Luego, todas las pistas pueden probarse y votarse, organizando así un sistema a lo LittleBigPlanet –salvando las muchísimas diferencias– en el que podemos ver qué puntuación ha dado la comunidad a un campo y decidir si probarlo o no. Aparte, tenemos todo tipo de estadísticas y varios modos para quienes busquen una experiencia más completa.
Aspectos audiovisuales
The Golf Club apuesta por el motor gráfico Unity, y la verdad es que es un título que, aun siendo exclusivo de la nueva generación y de PC, se queda entre las dos generaciones. Hay algunos aspectos bastante mejorables –como la generación de las sombras–, y prácticamente no cuida los detalles. Podemos lanzar una pelota contra los árboles y ver cómo se frena "artificialmente", ya que no hay ningún atisbo de interacción entre ambos.
Para los que se lleven bien con el inglés, el juego está narrado por una voz masculina que nos parece de lo más destacable, ya que siempre tiene una frase bastante acertada para acompañarnos durante el juego. Comentarios generalmente acertados y siempre del lado del jugador para darnos ánimos o felicitarnos son su carta de presentación, y nosotros lo agradecemos. La música es bastante relajante, aunque no hace demasiado acto de presencia fuera de los menús. Los textos, eso sí, están en castellano.
Bienvenidos al club
Los amantes de la simulación y el golf no es que vayan sobrados de exponentes del género, por lo que cuando llega un producto de calidad es sin duda más que recomendable. The Golf Club todavía cojea por varios frentes –su contenido propio es escaso, las opciones de personalización para los golfistas son mínimas, su interfaz es bastante lenta, no tenemos modo campaña…–, pero cuando saltamos al campo, la verdad es que entretiene mucho.
Accesible pero exigente, The Golf Club puede convertirse en un referente si la comunidad se pone las pilas y comienza a sorprendernos con sus creaciones. Por el momento –sobre todo en PC– ya contamos con multitud de exponentes de gran calidad, por lo que quienes puedan elegir entre plataformas, lo mismo les conviene apostar por la versión de compatibles. De un modo u otro, The Golf Club es una muy buena opción para los que busquen un juego de golf, y sólo esperamos que una posible secuela nos llegue todavía con más ambición.