Análisis de Street Fighter x Mega Man (PC)
Para descargar el juego gratuitamente, podéis visitar su página web.
Muchos personajes y sagas clásicas están celebrando últimamente importantes aniversarios, como Mario, Sonic, Street Fighter, Metal Gear, Castlevania, etcétera. Por desgracia, no todos reciben el mismo trato, algo que ha propiciado que nos hayamos encontrado con celebraciones a bombo y platillo como la que vivimos el año pasado con The Legend of Zelda, mientras que otros juegos tan míticos como Metroid no han recibido tales honores. Pero si hay un personaje que no merecía haber caído en este segundo grupo, ese es Mega Man.
No solo es uno de los iconos más reconocibles del mundo de los videojuegos, sino que también ha sido una de las marcas más representativas de Capcom. Tras haber vivido una época dorada en sus comienzos y de haber inundado el mercado con multitud de juegos durante varias generaciones, está claro que el azulado robot no está viviendo su mejor momento. Sin ir más lejos, desde que Keiji Inafune (su creador) abandonó la compañía, nos hemos encontrado con varios juegos cancelados, algo que nos lleva a mirar con temor el futuro de la saga.
Esto resulta especialmente preocupante cuando nos damos cuenta de que el único juego conmemorativo por los 25 años de Rockman (el nombre por el que se le conoce en Japón) ha tenido que ser desarrollado por fans y no por la propia Capcom, quien solo se ha preocupado de poner el logo del aniversario al producto, lo que también explica que se trate de un título gratuito.
Pero dejemos todo esto a un lado y centrémonos en el juego que hoy nos ocupa. Street Fighter X Mega Man es un título que recupera la jugabilidad clásica de la saga principal. Si jugasteis algunas de sus aventuras de NES o los recientes Mega Man 9 o 10 os sentiréis como en casa volviendo a enfrentaros a un juego de plataformas y acción en 2D donde ir avanzando por niveles más o menos lineales hasta llegar al jefe final de turno.
Pero como su propio nombre indica, este no se trata de un título de Mega Man al uso, ya que aquí también se homenajea a Street Fighter. Por lo tanto, en vez de enfrentarnos a los siempre temibles robots del Dr. Wily, los encargados de ponernos las cosas difíciles haciendo las veces de jefes finales en esta ocasión serán los míticos personajes de esta popular saga de lucha.
Sin embargo, y a pesar de lo original de la idea, Street Fighter X Mega Man se queda muy lejos de lo que son las entregas oficiales de la serie, algo que se debe principalmente a su pobre diseño de niveles. Una de las señas de identidad de Mega Man radica en su enorme dificultad. Sin llegar a ser imposibles, sí que eran muy exigentes y requerían de mucha concentración y habilidad gracias a sus elaborados niveles, repletos de desafíos, saltos medidos al milímetro y enemigos estratégicamente situados. Eso aquí no existe y no tardaremos en comprobar cómo nos pasamos los niveles uno detrás de otro a toda velocidad. Tampoco es que sea un paseo, pero cualquiera con un poco de experiencia en el género no debería tener mayores problemas.
Al igual que en los títulos clásicos, seremos libres de escoger el orden en el que queremos superar los niveles, aunque tendremos que completarlos todos para desbloquear el último. La diferencia es que aquí no hay un orden que sea más recomendable que otro, ya que las armas que obtendremos al derrotar jefes (aquí son técnicas especiales) no nos darán ventajas determinantes frente al resto, por lo que se pierde ese proceso de ir probando niveles y descubriendo armas para averiguar el orden ideal, algo que también es consecuencia de su baja dificultad.
Hablando de los jefes finales, comentar que nos ha gustado mucho el detalle de que cuenten con su propia barra de Ultra. A medida que reciban daño esta se irá recargando y les permitirá realizar sus ataques especiales definitivos, al igual que en la cuarta entrega de Street Fighter. Lo malo es que el diseño de estos enfrentamientos tampoco está demasiado inspirado y no siguen un patrón de ataque que tengamos que estudiar detenidamente para acabar con ellos, ya que se dedican a realizar sus cuatro o cinco movimientos de forma totalmente aleatoria.
Actualmente no existe un sistema de guardado de partidas, aunque es perfectamente posible completarlo en poco menos de una hora, por lo que si no tenéis ningún cuelgue inesperado esto no debería ser un problema. Respecto a los controles señalar que es muy recomendable usar un mando, ya que con teclado puede hacerse algo incómodo, especialmente por la falta de controles direccionales.
Gráficamente, tal y como estaréis viendo ya en las imágenes que acompañan a este texto, emula el aspecto de las entregas de 8 bits de forma muy acertada. Destaca especialmente el diseño de los personajes de Street Fighter, quienes son totalmente reconocibles y gozan de unas animaciones muy buenas. Los niveles por su parte son visualmente variados y representan los escenarios de cada uno de los luchadores.
Finalmente, en lo que respecta al sonido decir que se mantienen todos los sonidos clásicos de la saga y algunos nuevos que nos han gustado bastante, como los extraños gritos en midi que realizan los jefes finales al hacer sus técnicas. No es que Ryu diga Hadoken cuando nos lance uno, pero sí que hará un ruido muy similar que a más de uno seguro que os saca una sonrisa. Por otro lado, la banda sonora (la cual está también disponible para descargar gratis) está formada por unas versiones midis de los temas principales de cada personaje, que sin llegar a deslumbrar cumplen sobradamente su función, con alguna que otra canción destacable como la de Ryu o la de los enfrentamientos contra los jefes.
Conclusiones
Street Fighter X Mega Man es un juego entretenido y que calmará muy levemente las ganas que muchos tenemos de volver a disfrutar de nuevas aventuras protagonizadas por Rockman. Tiene ciertos problemas que le impiden ponerse a la altura de las entregas clásicas de la serie, como su baja dificultad y lo pobre de su diseño de niveles, pero que acaba resultando muy recomendable especialmente cuando consideramos que es gratis y que cada vez tenemos menos oportunidades de disfrutar de nuevos juegos de uno de nuestros robots favoritos.