Análisis de Splinter Cell: Pandora Tomorrow (PC, PS2, GameCube, Xbox)
Fue en Noviembre del 2002 cuando los usuarios de Xbox pudieron disfrutar del último trabajo realizado conjuntamente entre Ubisoft y Tom Clancy. Estábamos ante un juego de espionaje al más puro estilo Metal Gear que poseía un apartado técnico de lo más impresionante. Fue un rotundo éxito, tanto de crítica como de público. Ahora, después de poco más de un año y todo un repertorio de cómo desarrollar buenos juegos, Ubi regresa con la continuación de las aventuras de Sam Fisher. Estamos ante un juego que perfecciona la idea iniciada con Splinter Cell, no habrá grandes cambios en el modo offline, pero si que se ha añadido un interesante modo online que no os podéis perder. Pero antes de meternos de lleno en el análisis de aspectos técnicos y jugables, deberías saber quien es nuestro enemigo, que planes tiene y sobre todo, ¿Qué significa Pandora Tomorrow?
Pandora Tomorrow…
Estas son las palabras mágicas que rezará un terrorista con pinta de muy pocos amigos que vigila atentamente un edificio gubernamental de los Estados Unidos. Acto seguido, un furgón cargado con bombas avanza a toda velocidad hacía la embajada americana de Timor Oriental; como podréis imaginar, se arma una buena cuando el furgón bomba se detona ante las puertas de la embajada.
Un amplio grupo de terroristas, encabezados por el misterioso personaje que iniciaba el ataque con las palabras "Pandora Tomorrow", se adentran entre las llamas y comienzan a tomar rehenes. Un caos. Mientras tanto, en Third Echelon, Sam se encuentra practicando un poco para no perder la práctica. Cuando termina sus entrenamientos, Lambert - un viejo conocido- le llama para que vea los videos del atentado en la embajada.
Entre los rehenes se encuentra un agente de la CIA, así que sin pensárselo dos veces, Lambert envía a Sam a Indonesia para que averigüe que hace allí y ante todo, para ver que es lo que buscan los terroristas.
Toda esta introducción se nos muestra con un acabado técnico, y sobre todo artístico, impresionante. Sin duda, este fue uno de los puntos más criticados en la anterior entrega, pero en Pandora Tomorrow queda patente desde el principio que se ha subsanado ese error: las misiones son mucho más entretenidas, la historia cobra mayor importancia, los personajes secundarios tiene una mayor repercusión en las misiones, etc. Pero todo esto es mejor que lo vayamos explicando conforme avanzamos en el análisis, así que seguid leyendo. Empezamos la misión en Timor Oriental, para ser más exactos en medio del agua. Lambert nos da todos los datos acerca de la misión y de paso, nos recuerda como debemos jugar.
Lo principal en esta misión es ser totalmente invisibles, no podremos matar a nadie, por lo menos de momento. Salimos del agua y nos movemos entre las sombras, vemos como el medidor de visibilidad sigue igual; cuanto más nos acerquemos a las fuentes de luz mayores serán las probabilidades de que nos descubran. Por lo tanto deberemos permanecer, siempre que podamos, entre las sombras; si para ello hay que disparar a las luces no os lo penséis dos veces, siempre es mejor alertar a un enemigo por un pequeño ruido que no arriesgarse a que nos descubran por culpa de las luces. Seguimos avanzando, cada vez se hace más patente que estamos ante un tutorial encubierto –muy bien llevado, todo hay que decirlo- ya que esta todo colocado de tal manera que realizamos la mayoría de nuevos movimientos desde el principio: nos descolgamos desde un cable, subimos a un tubo y avanzamos lentamente por encima del agua, estando en los tubos enganchados de pies y manos, podemos descolgarnos y apuntar a los enemigos; también podemos apoyarnos en las paredes con las dos piernas y trepar a lugares que normalmente se encontrarían fuera de nuestro alcance, etc...
Cuando ya hemos avanzado bastante y nos encontramos cerca de la embajada, Lambert y un colaborador de la CIA nos informan de que los terroristas estás acabando con los rehenes. Rápidamente saltamos el muro de la embajada y comenzamos la verdadera misión. La dificultad aumenta considerablemente y lo que antes era un bonito paseo se convierte en toda una pesadilla: los enemigos están colocados estratégicamente para causarnos verdaderos quebraderos de cabeza, los rehenes se encuentran fuertemente protegidos, las condiciones de la embajada –después del atentado- no son las mejores y eso nos complicará, todavía más, el desarrollo de la misión, etc. Como ya sucedía en la primera parte, deberemos movernos entre las sombras, evitar siempre el contacto con los enemigos. Hay veces que será inevitable el noquear o matar a algún guardia, pero por norma general, siempre tendremos una alternativa. Hay un momento que vivimos en el juego que nos gustaría comentar con vosotros: estamos en un pasillo muy oscuro, vemos como un soldado de Sadono se acerca a nosotros lentamente, ¿qué podemos hacer? Bien, nosotros optamos por saltar y mantener nuestro cuerpo en el aire con la fuerza de las piernas. El soldado enemigo continuó su camino sin haberse fijado en nosotros. Eso sí, también podríamos haberle matado, pero a nosotros no nos gusta utilizar la fuerza.
Tendremos que utilizar todo nuestro ingenio para sortear a los enemigos y salir con vida de este infierno. Y bueno, esta es la primera misión, ya veréis como se complica la cosa en las siguientes misiones; será un verdadero reto completarlas sin morir ni una sola vez.
A todo esto, cabria resaltar el excelente desarrollo de las misiones. Como ya hemos comentado al principio del análisis, es mucho mejor que el del primer Splinter Cell; ahora todo se desarrolla como una gran película, es mucho más divertido. Esto se nota sobre todo a la hora de afrontar las situaciones que se nos presentan a lo largo de la aventura, por ejemplo: estamos en las calles de Jerusalén, las farolas iluminan las calles y los guardias vigilan atentamente todas las esquinas. ¿Cómo podríamos pasar sin ser detectados? Pues bien, aquí entra ya la imaginación del jugador: podemos silbar para atraer a las sombras a los guardias y noquearlos; también podemos disparar a las luces para envolver las calles de sombras, o pasar sigilosamente entre los guardias sin que ellos nos vean. Es cierto que no es una libertad absoluta, Pandora Tomorrow sigue siendo un juego muy lineal, pero ahora esta linealidad no se nota tanto como en Splinter Cell. Pero las mejoras en el desarrollo de las misiones no acaban aquí: ahora podremos colaborar con diferentes personajes secundarios para conseguir nuestros objetivos, estos objetivos podrán cambiar repentinamente en medio de la misión aumentando de ese modo la tensión, –avisos de bombas, por ejemplo- etc. Todo está pensado para que nos sumerjamos de lleno en el mundo que nos ofrece Pandora Tomorrow, un mundo bastante creíble ya que se desarrolla en el 2006 y por mucho que nos pese, relata muchas situaciones que actualmente vivimos.
Nuestros avances se irán guardando mediante el sistema de guardado por checkpoints vuelve a aparecer, para algunos es una virtud, para otros una pesadilla. ¿Con cual de estas dos opciones os quedáis?
La I.A. de los enemigos sigue igual: son personajes que en asomarte un poquito te ven desde lo lejos, pero cuando estas escondido entre las sombras y los tienes a dos metros no son capaces de verte. No es una mala I.A., nuestros enemigos nos pondrán las cosas muy difíciles, pero hay veces que resultan ser muy torpes. Por tanto, este es un aspecto que no ha evolucionado casi nada.
Todas estas mejoras perfeccionan el concepto de juego ya iniciado con el primer Splinter Cell, ahora todo resulta más entretenido, la historia es más interesante y no pararemos hasta saber como acaba la batalla entre Sadono –el malo- y Sam Fisher. Después de todo esto solo nos queda decir que a lo largo de ocho largas misiones deberéis: disparar, desactivar bombas, hackear sistemas informáticos, noquear a soldados enemigos, rescatar rehenes, buscar información en ordenadores, forzar cerraduras, descender grandes alturas haciendo rápel, intimidar y un largo etcétera. Un modo offline muy completo con una historia muy interesante que nos irá transportando por diferentes lugares del mundo; todo esto para evitar que un terrorista loco cumpla con sus planes de acabar con todo el mundo.
Pero la diversión no acabará aquí, por fin podemos disfrutar del tan ansiado modo online. Es difícil de explicar, pero intentaremos hacerlo de la forma más clara posible.
El juego online de Pandora Tomorrow admite solamente a cuatro jugadores, da igual que juegues con el PC que con Xbox, el número es el mismo para las dos plataformas.
Bien, se forman dos grupos, los espías –que son personajes como Sam- y los mercenarios. Cada equipo tiene un objetivo muy claro, por un lado tenemos a los espias que intentarán robar, desactivar o sabotear diferentes objetos de los escenarios; y por el otro lado tenemos a los mercenarios que tendrán que evitar a toda costa que los espías cumplan con su cometido.
Cada bando tiene una manera totalmente diferente de jugar: los espías juegan con una vista en tercera persona –como ya hemos dicho, igual que en el modo offline- y con un bonito repertorio de artilugios para evitar ser detectados, en cambio, los mercenarios jugarán con una vista en primera persona y su mejor aliado será la fuerza bruta. Al principio seremos muy torpes, los mapas son muy grandes y andaremos un poco perdidos, pero en cuestión de minutos seremos capaces de evitar las alarmas –siendo espías- y de abatir a cualquier enemigo que se nos cruce por delante –siendo mercenarios-.
La gran virtud de este modo online es la capacidad de transmitir una sensación de agobio que pocas veces habíamos visto antes, da igual que seas espía o mercenario, siempre estarás alerta, mirando por todas partes para ver si encuentras a tu enemigo. Es algo realmente impresionante, pero no hay nada mejor que poner un ejemplo para que entendáis lo que os queremos decir: Somos un espía, hackeamos una puerta para poder entrar en el recinto donde se encuentra nuestro objetivo. No vemos a nadie por ningún lado, utilizamos la visión térmica para ver si hay alguna mina oculta o ver si hay detectores de movimiento; tampoco vemos nada. Seguimos andando y llegamos a la sala donde se encuentra nuestro objetivo, allí, en el centro de la habitación se encuentra el tubo que tenemos que robar. ¡¡¡Maldita sea!!! ¡Nos han detectado! Había un detector de movimiento justo detrás de nosotros y no lo habíamos visto. Ahora no podemos cumplir la misión, deberemos esperar a que la alarma deje de sonar para poder proseguir, pero hay un problema, los mercenarios saben que estamos aquí y lo único que podemos hacer es escondernos y rezar para que no nos vean. Pasado un rato vemos un haz de luz, se trata de la linterna de uno de los mercenarios; está inspeccionando la zona. Da igual que utilice su sensor de movimiento, nosotros no nos movemos por lo que no nos puede detectar. Bueno, parece que se ha ido, ha mirado por todas partes menos por debajo de las escaleras. Ahora podemos coger el tubo y salir corriendo del edificio.
Bien, más o menos esto es lo que nos espera en el modo online de Pandora Tomorrow. Un tipo de juego donde la cooperación con nuestros compañeros será primordial, aquí no podemos ir a saco ni tampoco podemos descuidar las defensas.
Y por último, pero no por ello menos importante… Las partidas se desarrollarán con total fluidez, el lag no hará acto de aparición en casi ningún momento. Eso si, también depende de la conexión de cada uno, pero por lo general, el modo online de Pandora funciona a la perfección.
Los controles, tanto en el modo online como en el modo offline, son exactamente iguales a los del primer Splinter Cell. En Xbox, el manejo de Sam es de lo más intuitivo. Con el Stick izquierdo nos movemos por el decorado y con el derecho manejamos la cámara a nuestro antojo; cámara que no nos molestará en ningún momento. Los botones del mando se destinan a las diferentes acciones que realiza Sam –desenfundar, recoger objetos, etc.-. En PC pasa exactamente lo mismo, el control es idéntico al del primer juego. Con el teclado movemos a Sam y con pocas teclas utilizamos todas sus habilidades. El ratón servirá para girar la cámara y para disparar. En este caso se recomienda un ratón con rueda, con ella podremos graduar la velocidad a la que se moverá Sam de una manera rápida y sencilla.
Llegados a este punto solo nos queda hablar de los aspectos técnicos de Pandora Tomorrow, un tema que esta generando bastantes discusiones entre los usuarios que han tenido la oportunidad de probar el juego. Bien, nosotros pensamos que el aspecto gráfico del juego ha mejorado respecto a Splinter Cell. Eso si, se trata de una mejoría leve: mejores animaciones para Sam y mejores efectos de luz. Estos dos aspectos continúan poseyendo un grado de realísimo impresionante. En un juego de estas características, los efectos de luz son algo realmente importantes; al tomar un papel tan importante en la jugabilidad, la iluminación es extremadamente realista, con todo tipo de matices dependiendo del tipo de luz que sea, y perfectamente reflejada en todos los objetos del escenario.
Lo demás sigue siendo prácticamente igual: un modelado correcto para los enemigos y unos escenarios bastante buenos. Lo que también se ha mejorado es el tamaño de los niveles, ahora son bastante más grandes y en la gran mayoría nos encontraremos en escenarios al aire libre; aumentando de ese modo la espectacularidad de las misiones –ese amanecer en Timor Oriental…-. También tenemos unos efectos de agua realmente impresionantes, ya sea el agua de los ríos y lagos que cruzaremos –con sus reflejos- o el agua de la lluvia que caerá torrencialmente sobre nuestras cabezas en las calles de Yakarta. La versión PC se ha optimizado todavía más permitiendo que la mayoría de usuarios –con un buen PC- puedan jugar con los detalles al máximo sin ningún tipo de problema. Lo que pasa es que Pandora Tomorrow sigue con los mismos fallos que estaban presentes en Splinter Cell: el clipping sigue estando presente, un fallo que resta realismo al acabado general del juego.
Como ya hemos dicho al principio del análisis, las secuencias cinemáticas son mucho mejor que las ofrecidas por Splinter Cell. Ya con la introducción nos podemos hacer una idea de lo que nos espera, pero luego tenemos videos de muy buena calidad entre las diferentes misiones. Las secuencias en forma de noticiario siguen estando presentes, para deleite de los seguidores del juego.
El sonido, como ya pasaba en el anterior capítulo, es sobresaliente. Ya hemos comentado que el juego ha ganado muchos enteros en el aspecto cinematográfico, ahora las misiones son más peliculeras, pues bien; Ubi no ha querido dejar el sonido en mal lugar y ha contratado al argentino Lalo Schifrin, compositor de la música en Mision Imposible para que se encargue de las melodías del juego. Es la primera vez que un compositor de su nivel se mete de lleno en la creación de la música para un videojuego y creednos cuando decimos que la cosa ha funcionado muy bien. Las melodías varían según las acciones que realiza Sam y es tal la capacidad de inmersión que adquirimos con ellas que, solamente, escuchando el tipo de melodías, podemos saber si nos han visto, si nos persiguen o si la misión se va al garete.
Los sonidos FX rayan al mismo nivel, tenemos sonidos para todo: desde los diferentes tipos de suelo, hasta el sonido de las armas, pasando por los sonidos ambientales tales como pájaros o trenes que pasan por el metro. Todo esto, y más si poseemos un sistema 5.1, eleva las cotas de realismo hasta cotas insospechadas. Por último, cabría resaltar el excelente doblaje de Pandora Tomorrow. Un gran trabajo por parte de Ubi ya que han buscado a dobladores que de verdad se meten en sus respectivos papeles; las peleas entre Sam y Lambert no tienen precio.
En definitiva, estamos ante un grandísimo juego, uno de los mejores en lo que llevamos de año: su increíble jugabilidad, su duración y su adictivo modo online lo elevan a la categoría de obra maestra. Es un juego pensado para la gente que disfruta con el sigilo, esta es su principal baza, aquí no habrá tiros a diestro y siniestro –aunque viviremos momentos de acción- así que la gente que espere un juego de acción ya se puede ir despidiendo. Los que disfrutaron con el original no deben perderse Pandora Tomorrow ya que se ha perfeccionado la idea iniciada con Splinter Cell, y los que se aburrieron, deberían darle una oportunidad ya que ahora, las misiones son mucho más entretenidas, tienen un aire a película de espías que lo hace irresistible.