Análisis de PlanetSide 2 (PC)

A pesar de que ya lo veníamos avisando tras haber jugado a su beta, sigue sin dejar de sorprendernos que un título con los valores de producción de Planetside 2 sea totalmente gratuito. No recordamos un juego (ya sea gratuito o de pago) que ofrezca unos conflictos que se acerquen siquiera a la magnitud de los que presenta el título que nos ocupa en este análisis, algo que de por sí hace que sea doblemente sorprendente su apuesta por este modelo de negocio tan de moda últimamente. Auraxis está en guerra y por fin ha llegado la hora de que volvamos a tomar partido en ella.

MMOFPS en su máximo esplendor

Lo primero que tendremos que hacer cuando empecemos a jugar por primera vez será crearnos un personaje, escoger facción y seleccionar un servidor. Una vez hecho esto, comenzaremos en una de las bases principales de nuestro bando. Os avisamos que la falta de un tutorial o algo parecido puede provocar que las primeras horas se hagan bastante duras, ya que no tendremos nada claro qué es lo que tenemos que hacer y para qué sirven todos los menús que tenemos disponibles en la interfaz.

El objetivo del juego es tan sencillo como el de conquistar bases para ampliar los territorios de nuestra facción mientras defendemos las que están en nuestro poder. Existen tres continentes distintos en los que batallar y todos ellos nos ofrecen escenarios muy diversos (bosques, montañas, desiertos, páramos helados, etc.), tanto a nivel visual como jugable. También hay que tener en cuenta que en Auraxis existe el ciclo de día y noche, algo que tendrá su impacto en la jugabilidad, ya que no es lo mismo atacar una base a plena luz del día que realizando una incursión nocturna a oscuras para que nuestros rivales no nos puedan detectar tan fácilmente.

Antes de continuar tenemos que dejar bien clara una cosa: esto es un juego de equipo. Las individualidades suelen pagarse caras y la única forma de alzarnos con la victoria es coordinando bien nuestras acciones con el resto de miembros de nuestra facción y desarrollando buenas estrategias conjuntas. Esto se debe principalmente a dos factores: el tamaño y diseño de las bases y la enorme cantidad de jugadores que pueden participar en los conflictos.

Las bases de este juego son fortalezas gigantescas que cuentan con múltiples defensas para poner las cosas difíciles a los invasores, por lo que para acceder a ellas deberemos desactivar sus escudos defensivos, conquistar los puntos de resurrección para que nuestros rivales tarden más en llegar a los lugares de batalla, deshabilitar las terminales de su base, etcétera. Todo esto conlleva un trabajo en equipo que resulta muy satisfactorio cuando da sus frutos. Por suerte, el título nos permitirá crear y unirnos a pequeños escuadrones, de forma que tengamos un grupo con el que organizarnos para cumplir diversos objetivos que ayuden a la victoria global.

Respecto al número de jugadores, decir que en el asedio a una fortaleza pueden participar literalmente cientos de personas, por lo que si vamos por libre probablemente acabaremos con una bala en la cabeza más veces de lo recomendable. Además, en todos los conflictos los vehículos jugarán un papel importantísimo y para sacarles el máximo partido a muchos de ellos será necesario que los manejemos entre varios jugadores (uno conduce, otros tantos disparan, etcétera). Hay una buena variedad de estos y no solo se limitan a los terrestres, ya que también existen varias naves con las que tener intensos duelos aéreos, las cuales os avisamos que son algo difíciles de pilotar, por lo que probablemente necesitaréis más de un intento para haceros con sus controles.

Si a todo esto le sumamos que hay tres facciones en vez de dos, podéis haceros una idea de la gigantesca escala que alcanzan las batallas en Auraxis, con cientos de jugadores y vehículos en pantalla desde todos los frentes luchando por hacerse con el control de una base, todo un espectáculo digno de ser experimentado y que a pesar de mantener una ambientación de ciencia ficción recrea mucho mejor que ningún otro juego la sensación de estar en medio de un conflicto armado.

Por todo esto, también os recomendamos que intentéis jugarlo con conocidos o con grupos más o menos organizados (también podéis crear clanes), ya que el título desata todo su potencial y diversión precisamente cuando se juega en compañía. En cambio, si decidís ir sin un escuadrón y simplemente siguiendo al resto de jugadores, probablemente os aburriréis pronto.

En cuanto a nuestro personaje, comentar que podremos escoger entre varias clases distintas, todas ellas con sus propias características, amas y habilidades únicas, por lo que el estilo de juego varía mucho de una a otra. Si en algún momento queremos cambiar de clase, podremos hacerlo cuando muramos o en una terminal destinada a tal propósito. Pero la cosa no acaba aquí. A medida que vayamos matemos enemigos y cumplamos objetivos, ya sea de defensa o ataque, obtendremos puntos de experiencia y certificaciones.

Los primeros nos permitirán subir de nivel a nuestro personaje, lo que nos dará acceso a muchas más certificaciones para desbloquear con los puntos correspondientes. Estas nos permitirán usar nuevas armas, conseguir más habilidades, mejorar algunas estadísticas de nuestro soldado como su resistencia, potenciar una clase concreta, etcétera. Cada una tiene un coste distinto y en total existe una enorme cantidad de certificaciones distintas, por lo que desbloquearlas todas nos puede llevar cientos de horas de juego. Gracias a esto, las posibilidades que tendremos a la hora de personalizar a nuestro avatar son abrumadoras y se consigue que cada jugador se diferencie bastante del resto, a pesar usar la misma clase. Finalmente, también existen los puntos de recurso, los cuales nos permitirán "alquilar" vehículos, comprar granadas, recargar munición, etcétera.

Al ser un juego gratuito, probablemente muchos os preguntaréis si nos encontramos ante uno de esos casos de "pagar para ganar". Por lo que hemos podido comprobar eso no es así y la mayor diferencia que podremos encontrar entre un jugador de pago y otro gratuito será la velocidad a la que consiguen experiencia, certificaciones y recursos. Si decidís por pagar también podréis haceros con elementos puramente estéticos para vuestros personajes y con armas exclusivas, las cuales parecen estar equilibradas, aunque esto es algo que se comprobará con el tiempo.

El espectáculo de la guerra

A nivel gráfico, Planetside 2 es un título muy sólido y robusto, con momentos realmente espectaculares y que cuenta con unos buenos efectos de iluminación y unos escenarios enormes que se pierden en el horizonte. Además, es digno de admiración que el título se mueva tan fluido incluso en los momentos de más acción, donde veremos numerosos personajes moviéndose simultáneamente por la pantalla y todo tipo de efectos gráficos de explosiones y disparos que os podáis imaginar, aunque no vamos a negar que echamos de menos la posibilidad de poder destruir estructuras con nuestros cañonazos.

Como puntos negativos, comentar que las animaciones no son nada del otro mundo, los modelados de los personajes son bastante simples (realmente solo nos importarán sus colores para saber a quién disparar y a quién no), las texturas tienen una resolución algo baja, existe cierto popping en elementos como la hierba y los árboles, y en general los servidores todavía dan problemas de vez en cuando, con algunos picos de lag indeseables, algo que se está corrigiendo poco a poco (los primeros días fueron injugables directamente). También hay que señalar que existe una buena cantidad de bugs, tanto de los visualmente divertidos como de los realmente molestos.

En lo que respecta a su rendimiento, decir que el juego está bien optimizado (especialmente si somos usuarios de tarjetas NVIDIA) y que permite realizar un buen número de modificaciones para adaptarlo a las necesidades de una amplia gama de equipos. Eso sí, si queréis jugarlo en su máximo esplendor y con todas las opciones de configuración al máximo necesitaréis un PC bastante potente, ya que no es precisamente poca cosa lo que tiene que mover el motor gráfico.

Finalmente, el apartado sonoro del juego cumple sin más su función, con unos FX para las armas que no destacan especialmente y una banda sonora prácticamente inexistente. Por otro lado, agradecer el hecho de que se haya incluido chat de voz y que las pocas voces que escucharemos se encuentren dobladas al español.

Conclusiones

Planetside 2 es un juego que nos ha sorprendido con su calidad y con todo el espectáculo que ofrece, convirtiéndose en una apuesta segura si lo que buscáis es un juego gratuito con el que pasar horas y horas. La enorme escala de sus conflictos, las amplias posibilidades estratégicas que ofrece y las inagotables opciones para personalizar a nuestro personaje nos han convencido, a pesar de algunos errores técnicos que están afeando la experiencia estos días más de lo deseable. Como siempre, su éxito o no dentro del competido mercado de los juegos gratuitos dependerá del apoyo que reciba tanto de la propia compañía como de los propios jugadores, pero de momento su futuro no puede pintar más prometedor.