Análisis de Los Sims (PC, PS2, Xbox, GameCube)
Introducción y Argumento
Los Sims es, posiblemente, uno de los juegos más originales y divertidos que han salido últimamente para PC. El planteamiento inicial es simple: Creas o eliges un personaje, le compras una casa y se la amueblas y le mandas “vivir”, es decir, comer, dormir, lavarse, hacer sus necesidades, divertirse, trabajar y hacer vida social. Tras estas múltiples premisas se encuentra un juego que es un mundo, en el que tus Sims (pues el juego no se reduce únicamente a uno, sino a varios que crearás tú) interactuarán unos con otros, obteniendo resultados que van desde excelentes a catastróficos.
Cada Sim es diferente. Además de llamarse y pertenecer a una familia (el apellido, nada de mafia) diferente, tendrá una personalidad diferente que puedes elegir como si de un juego de rol se tratara. La personalidad de tu Sim condiciona su modo de actuar, su forma de relacionarse y sus necesidades más inmediatas.
Entre los aspectos de la personalidad de nuestros Sims están la cordialidad, el ánimo lúdico, la limpieza, la extroversión... Según las carácterísticas cada Sim será de un signo zodiacal que será muy compatible con algunos y muy incompatible con otros.
Tus Sims tendrán en todo momento unas barras de “necesidades”, que cuanto más llenas estén mayor será la felicidad de tus Sims. Éstas son: Energía (que se rellena, generalmente, durmiendo), Hambre (comiendo), Vejiga (Yendo al W.C.), Higiene (Duchándote), Diversión (Viendo la tele, jugando con el ordenador, hablando con otros Sims...), Comodidad (Sentándote en sitios cómodos), Sociedad (Haciendo vida social) y Habitación (depende del lugar en que te encuentres, si le agrada o no a tu Sim).
En el tiempo de juego habrá 3 modos fundamentales: El modo Vivir, en el que podrás dirigir a tu Sim y ver sus necesidades, su personalidad, etc... El modo comprar, en el que comprarás objetos para tu hogar que van desde lavabos hasta sofás, pasando por mesas, silllas, televisiones, ordenadores y máquinas de hacer ejercicio. Por último está el modo construir, con el que construirás puertas, ventanas, habitaciones, escaleras... etc.
Tu Sim gastará dinero en comer, en mejorar su casa y en pagar facturas. El dinero tiene que venir de alguna parte, y ahí es donde entra el trabajo. En los trabajos podrás seguir diferentes carreras, en el que habrá un aspecto más importante que otro en cada una. Entre ellas está la de militar, la del mundo del espectáculo, la del mundo del atletismo... Personalmente mi preferida es la de militar, en la que pasarás de un simple recluta a un soldado de élite, luego instructor, luego oficial... Hasta llegar a ser astronauta (y quién sabe que más). El trabajo te “comerá” horas del día en las que podrías comer, dormir o relacionarte, pero es un elemento fundamental en la vida de tus Sims.
Los otros vecinos de la urbanización (tus otros Sims) se relacionarán contigo, te harán visitas, te llamarán por teléfono, podrás hablar con ellos, bromear, elogiar... Y más adelante, cuando seáis amigos, abrazos, hacer cosquillas, regalos... Hasta que la relación pueda llegar a ser sentimental (y puede ser con varias personas, lo cual creará conflictos entre tus Sims). Cabe destacar el hecho de que las relaciones pueden ser tanto hetero como homo, incluso de las dos maneras (uno de mis Sims es tan crápula que tiene novio y novia, y lo lleva bien jejejeje)...
En definitiva, por si alguién no se hubiese dado cuenta, Los Sims es un simulador de vida, con sus limitaciones, eso sí, pero el único del mercado, y sin duda un juego muy original.
Gráficos:
Los personajes están en 3D, son modelos polígonales bien realizados. Los otros elementos del juego están en 3D, como las casas, los objetos... Puedes rotar y alejar la cámara (4 ángulos y 3 zooms). El aspecto gráfico no es una cosa del otro mundo, pero todo se distingue a la perfección y no es ni mucho menos lo más importante en un juego de estas características.
Sonido:
La música es buena, cambia constantemente, en los modos de comprar y construir es muy bonita y melódica. Los sonidos parecen casi reales, pero lo mejor son las voces de los Sims, los silbidos, los gruñidos, las conversaciones (no se reproducen, por supuesto, pero hay unas voces y unos bocadillos que te dejan ver por donde va).
Jugabilidad:
El juego, además de ser prácticamente infinito y muy adictivo, es muy facil de controlar. Posee un tutorial muy fácil de entender que te hará dominar el juego en muy poco tiempo. Todos los elementos de la casa se pueden cambiar de sitio según tus necesidades, los puedes vender para cambiar por otros, rotar... En el modo construir también podrás modificar tu casa a tu gusto, con un intuitivo interfaz.
Diversión:
Definitivamente el aspecto en el que el juego triunfa. Este juego es realmente adictivo, no podrás parar de jugar con él hasta que tus Sims sean más felices que la tribu de los Brady. Es un juego que, por su infinitud de posibilidades y situaciones, te enganchará y te hará pasar unos ratos inolvidables frente a tu PC.
Veredicto:
Los Sims es sin duda el título más original y más adictivo y divertido que ha salido últimamente para PC. Esta vez los chicos de Maxis se han pasado. Si a eso añadimos la posibilidad de bajarse skins para el juego desde internet y algunos supermercados on-line que hay, la diversión aumenta aún más. Una compla obligada para todos los jugones de PC, pues tal vez este sea el primero de una nueva generación de juegos “reales”.