Análisis Layers of Fear 2, el terror de un nuevo artista (PC, Switch, Xbox One, PS4)
Han pasado más de tres años desde el lanzamiento de Layers of Fear, un juego que nos encantó. Sin ser perfecto, sabía medir muy bien sus diferentes elementos para crear una excelente combinación de historia, ambientación y tensión constante que funcionaba genial. Esta segunda parte intenta repetir la fórmula, cambiando algunos elementos e introduciendo otros nuevos, pero la verdad es que el resultado nos ha convencido bastante menos…
Videoanálisis
El barco de la bruja
Layers of Fear 2 es un juego de terror en primera persona bastante lineal, ambientado en un barco, cuyos pilares jugables se centran en tres mecánicas: la exploración, la resolución de puzles y, en algunos momentos puntuales, escapar de una criatura. La exploración tiene dos niveles, la principal –que necesitamos para encontrar el camino y avanzar– y la secundaria –para encontrar caminos alternativos que nos lleven a los coleccionables–.
Los puzles, por su parte, son bastante sencillitos, y ninguno nos ha parecido particularmente memorable. Son entretenidos y varios, eso sí, pero esperábamos algo más. La huida de la criatura nos ha parecido una de las ideas peores ejecutadas del juego. Es un enemigo que te mata si se acerca demasiado a ti, y no tienes absolutamente nada para defenderte de él.
Seguramente estéis pensando que esto no tiene que ser algo negativo, pero os intentamos explicar la diferencia. Por ejemplo, en el remake de Resident Evil 2, Mr. X te persigue y es indestructible, pero tenemos libertad para huir y herramientas para detenerlo. En Layers of Fear 2, los desarrolladores han implementado una solución única que vamos a acabar descubriendo a base de ensayo y error.
No puedes reaccionar con «naturalidad» (dispararle, meterte por la primera puerta que veas…), sino que tienes encontrar el camino o el escondite que los desarrolladores eligieron. Hay algunos momentos en los que implementan la situación con mucho acierto, pero también hay otros muchos en los que no. Por suerte, no hay demasiados encuentros con esta criatura.
En el resto de la experiencia tenemos un poco de todo, desde flashbacks a decisiones con los que vamos descubriendo y escribiendo la historia, aunque de manera muy implícita. Hay algunos momentos geniales, en los que nos sorprenden con escenarios impresionantes, o momentos en los que todo cambia constantemente a nuestras espaldas, haciendo imposible prever qué nos aguarda cuando giremos la cámara. Otros momentos nos han parecido menos inspirados, haciendo el desarrollo un tanto irregular.
Dejándonos llevar
La idea de Layers of Fear 2 es dejarse llevar. Es abrazar su narrativa y su propuesta audiovisual que, como la primera parte, no necesita de demasiadas mecánicas jugables. Esta secuela no tiene ninguna conexión real con la primera parte más allá de un par de referencias, y nos cuenta la historia de un actor o actriz que acepta un papel en un crucero con un único objetivo: representar un personaje para dejar de ser uno mismo.
La premisa es interesante, pero, sinceramente, la historia –un pilar fundamental en un título así– tampoco nos ha terminado de convencer. Nos ha parecido bastante predecible y, aparte, tarda bastante en arrancar. Cumple perfectamente su cometido como hilo para unir las diferentes partes del juego, pero esperábamos más de una de las partes que más nos gustó de la entrega original y que, al fin y al cabo, es tremendamente importante en una aventura narrativa.
Al menos, audiovisualmente nos ha parecido fantástico. No siempre sobresale, pero la segunda parte del juego es genial. A lo largo de la aventura vamos a encontrar muchas referencias al cine y al teatro clásico, pero también vamos a encontrar tramos que nos han parecidos claramente inspirados por Silent Hill 4: The Room.
En lo sonoro también está muy bien, sobre todo si jugamos con cascos para aprovechar el diseño de sonido 3D. Hay una gran cantidad de sonidos para ponernos en tensión, que van desde algunos de extraña procedencia a otros más reconocibles como el crujir de la madera del barco. Nos llega en inglés con subtítulos en castellano, algo que muchos van a agradecer para poder seguir la historia.
Como nota, en lo técnico está muy, muy bien. En Xbox One X, donde lo hemos analizado, nos ofrece la posibilidad de jugar a 30 imágenes por segundo con gráficos ligeramente mejores) o a 60, e incluso activar o desactivar la sincronización vertical. Nosotros hemos apostado por las 60 imágenes y el v-sync activado, y la verdad es que nos parece que se ve genial en todo momento.
Terror a la deriva
Layers of Fear 2 es un juego repleto de altibajos. Tiene momentos sobresalientes, pero también tiene muchos aspectos simplemente correctos y otros que lo lastran. La implementación tan mejorable de la criatura que te persigue y una historia bastante flojita que tarda mucho en arrancar son, probablemente, sus dos principales problemas, y la simplicidad de la mayoría de sus puzles junto a algunos escenarios poco inspirados tampoco ayuda.
Y es una pena, porque el segundo tercio del juego –el cuarto y el quinto capítulo– nos ha gustado mucho. Es cuando Layers of Fear 2 se desata artísticamente, abraza la locura, y nos deja momentos memorables. Si os gustó la primera parte, aquí vais a encontrar muchas de sus ideas implementadas en un nueva historia, aunque su ejecución nos parece peor y, en general, una experiencia mucho más irregular.
Hemos realizado este análisis en Xbox One X con un código de descarga proporcionado por Premier Comms.