Análisis Just Die Already, un zafio Goat Simulator con ancianos (PC, PS4, Xbox One, Switch)
Just Die Already es un alocado videojuego de mundo abierto en el que controlamos a personas mayores, un pequeño título que podría haber pasado desapercibido si no fuera porque viene firmado por los diseñadores de Goat Simulator: aquel exitoso juego de humor físico y gamberro allanó el terreno para la aparición de obras similares, y aquí DoubleMoose, un estudio independiente sueco capitaneado por Armin Ibrisagic, game designer en Goat Simulator, han intentado replicar la fórmula del juego de la cabra cambiándola por ancianos pero manteniendo el resto de características prácticamente idénticas.
Lo que nos encontraremos en este título es un sandbox grotesco en el que podremos controlar a una persona mayor a elegir entre cuatro personajes, aunque sólo se trata de una decisión estética porque jugablemente no se modifica nada: el mapa de Just Die Already está completamente abierto una vez superamos el tutorial inicial y podemos explorarlo como queramos, interactuando con los objetos, vehículos y personas que nos encontremos por las calles de esta peligrosa ciudad. La gracia de este juego reside en que prácticamente todo lo que hay en el escenario puede matarnos, desde minas antipersona hasta peceras de anguilas eléctricas, aunque los abueletes a los que manejamos son bastante resistentes y pueden seguir caminando incluso aunque haya perdido prácticamente todas sus extremidades.
Desmembrar a ancianos: ¿quién iba a imaginar que no era una buena idea?
Comenzamos nuestra aventura en una precaria residencia de la que tenemos que huir, algo que nos servirá como una especie de tutorial para hacernos con los controles y mecánicas del juego: podemos agarrar cosas, golpear con ciertos objetos, convertirnos en muñecos de trapo y rodar… Todas estas acciones se realizan con una ejecución algo tosca, propia de los juegos basados en físicas en los que a veces se dan situaciones un tanto absurdas que, dependiendo del contexto, pueden frustrarnos o hacernos reír. Just Die Already tiene una solución pensada para los momentos de atasco: con sólo pulsar un botón volveremos a un punto de control cercano que reiniciará nuestra forma física permitiéndonos volver al ruedo de una pieza.
Y es que uno de los principales reclamos de este videojuego es que los personajes pueden desmembrarse de maneras surrealistas, de modo que en ocasiones no controlaremos a una persona completa, sino simplemente a un torso o una cabeza. En la mayoría de casos, nuestros ancianos acaban con las piernas o los brazos cercenados, o incluso pueden llegar a perder el tronco completo. No pasa nada; mientras el indicador de vida no se agote, nuestro personaje no estará completamente muerto y la pantalla de game over no aparecerá, por lo que podemos seguir jugando en forma de cogollo de carne sangriento.
La representación de este desmembramiento es bastante grotesca, pero no para bien: Just Die Already se mueve en una estética extraña donde lo simpático y cartoonesco se combina con lo gore, por lo que no hay una verdadera sensación de horror ante lo que vemos (la sangre, las explosiones o las decapitaciones no son realistas), pero sí resulta algo desagradable ver cómo le ocurren todas estas tragedias a lo que a fin de cuentas son personas mayores. Los autores han querido imprimirle a esta obra una suerte de humor gamberro que no termina por cuajar bien y se queda en una zafia comedia adolescente que, quizás, pueda encontrar en plataformas de streaming un público interesado en este humor chabacano completamente desfasado. En este sentido, Goat Simulator entendía mucho mejor la comedia física y absurda, y lo hacía sin necesidad de hacer volar a la cabra por los aires o de mostrar su cabeza rodando por el suelo mientras podemos controlarla.
Además, el apartado gráfico de este juego deja mucho que desear. Para este análisis hemos probado la versión de Nintendo Switch y, como podéis apreciar en las imágenes, es un port muy mal llevado: hay dientes de sierra por todos lados, la distancia de dibujado es muy escasa, se juega a muy baja resolución y con un aspecto demasiado borroso… Todos estos problemas se intensifican en el modo portátil, por lo que la forma recomendable de jugarlo en esta plataforma es conectada a la televisión. Aun así, hay más problemas gráficos además de la baja calidad: también nos hemos encontrado con una buena cantidad de bugs que llegan incluso a dificultar una experiencia fluida.
Cuando jubilarse no supone descansar
Aunque podemos explorar la ciudad de Just Die Already con total libertad, el juego nos propone una serie de objetivos marcados en un diario que sirve de ayuda y de hilo conductor para no acabar perdidos en mitad del escenario sin saber qué hacer. Tal y como ocurría en Goat Simulator, aquí hay una enorme cantidad de secretos que quedan ocultos en los rincones más insospechados de la ciudad: sólo dejándonos llevar por la locura podremos descubrir nuevas formas de movimiento que nos permitirán acceder a estos sitios secretos, algo que le da un toque de interés al juego. Por ejemplo, hay lugares estrechos a los que sólo podemos llegar siendo un torso, por lo que antes de acceder a ellos tendremos que perder las extremidades y la cabeza, por ejemplo.
Lo mejor de este juego es la forma en la que nos va dejando descubrir nuevos rincones del escenario gracias a su diseño de niveles que no inventa nada, pero que da alguna que otra situación interesante que mantiene más o menos viva la llama de la curiosidad. Poder interactuar con prácticamente todo también es algo digno de mencionar de Just Die Already, sobre todo por esa faceta sandbox llevada al extremo que nos permite ponernos creativos con los objetos que vamos encontrando por ahí. La lástima es que no todos funcionan tan bien como deberían, y las físicas no están tan bien simuladas como podría requerir un juego de este estilo: hay libertad para que hagamos lo que queramos, aunque en más de una ocasión las limitaciones técnicas del juego sirvan como tope para llevar a cabo las locuras que se nos prometieron en un principio.
La balanza de las virtudes y defectos de Just Die Already se decanta en general hacia el lado de lo negativo, pero lo hace todavía más cuando nos decidimos por el modo multijugador cooperativo del que dispone el título: a día de hoy es prácticamente imposible encontrar una partida en la que probar este formato de juego en línea para hasta cuatro jugadores, o al menos es muy difícil si no tienes otros amigos que también dispongan del juego para poder crear una sala conjunta. En las veces que hemos intentado crear una partida pública, que no han sido pocas, tampoco hemos recibido muchas visitas a nuestro servidor, aunque siempre han estado conducidas por un caos que prácticamente ha imposibilitado la coordinación con los otros jugadores. Además, el rendimiento del juego se ve altamente comprometido en su modo online, incluso aunque no haya ningún jugador en la partida. Que no disponga de modo cooperativo local es todo un fallo, a nuestro parecer, ya que admitimos que puede ser divertido hacer locuras en compañía, pero es tedioso y poco factible jugar con desconocidos.
Conclusiones
Just Die Already se inspira en Goat Simulator tomando algunos de sus mejores aspectos, como la exploración libre plagada de secretos y el humor físico absurdo, pero sin llegar a comprender las virtudes de aquel singular y exitoso videojuego. La comedia de este título es mucho más vulgar que la del juego de la cabra, en parte porque cambia al animal por personas mayores a las que, además, no duda en mutilar; de hecho hace de esa acción una mecánica principal que nos sirve para acceder a zonas secretas, obligándonos a dañar a nuestro personaje incluso aunque no queramos. Si ya de por sí el humor zafio no bastase para no poder recomendar este título, su baja calidad gráfica, la incomodidad de los controles y los múltiples bugs de los que hace gala consiguen restar puntos a una propuesta que, llevada de otra manera, podría haber llegado a ser divertida. Poco recomendable, ni siquiera por su modo cooperativo online de difícil acceso, aunque seguramente dé buenos momentos a streamers y youtubers.
Hemos realizado este análisis en Nintendo Switch con un código proporcionado por PressEngine Team.