Análisis de Defcon (PC)

Tras el gran éxito cosechado con Darwinia, el grupo de desarrollo británico Introversión sorprende a propios y extraños con un nuevo título multijugador que supone un cambio en su trayectoria gracias a un juego de desarrollo relativamente corto, una temática impropia en los días que corren y cuyo título se aleja de lo común: Defcon: Everybody dies (cuya traducción sería Defcon: Todo el mundo muere).

El juego, que muchos usuarios relacionarán tras probarlo con la mítica película de "Juegos de Guerra" protagonizada por Matthew Broderick, se basa en la idea de conseguir que nuestro territorio salga victorioso de una guerra nuclear. ¿Cómo conseguiremos eso? Pues muy simple, acabando con cualquier signo de vida entre los territorios enemigos al mismo tiempo que protegemos a nuestra población de cualquier peligro exterior. Una idea que puede parecer simple, y de hecho lo es, pero que gracias a su estupenda implementación en el juego proporcionará al juego de una profundidad y longevidad notable.

El juego comienza con un menú en el que podremos configurar las distintas opciones de la partida. En primer lugar podremos elegir el número de jugadores que variará entre dos y seis (pudiendo usar a la computadora para encarnar a algunos de ellos, así como crear todo tipo de alianzas y romperlas). Cada jugador tendrá que elegir que territorio defender (aunque se puede usar elección aleatoria). Los territorios presentes en el juego serán: Asia, Rusia, América del Norte, América del Sur, Europa y África. Como último aspecto configurable sería el tipo de partida, pudiendo elegir entre una amplia gama de modos.

Una vez que hayamos decidido las opciones de la partida se nos mostrará la pantalla de juego, ocupada en un 90% por el mapa del mundo presentado en dos dimensiones con un estilo gráfico similar al del videojuego Tron y con tonalidades azules y negras predominantes. En la parte inferior de la pantalla, y como único añadido al mapa tendremos dos zonas. Una situada en la parte izquierda donde tendremos una cuadro de diálogo para poder conversar con los demás jugadores, y otra en la parte derecha con una serie de botones que nos permitirán personalizar el interfaz de juego en diversos aspectos (por ejemplo nos dará la opción de visualizar o no la trayectoria de los vehículos, poder resaltar por colores las zonas de cada jugador, etc).

El desarrollo de juego se basa en el sistema DEFCON (condición defensiva en sus siglas inglesas), el cual nos mostrará en que nivel estamos en cada momento y una cuenta atrás común para todos los jugadores que nos dejará comprobar lo que queda para el siguiente salto de nivel. En un principio todos los territorios están en DEFCON5, el nivel mínimo de alerta, y progresivamente se sucederán los siguientes niveles hasta el DEFCON1 que supondrá libertad total para crear el caos. Saber el nivel en el que estamos será importante pues cada uno está condicionado por una serie de acciones posibles a realizar. De este modo, durante DEFCON5 y DEFCON4 podremos desplegar todas nuestras unidades a nuestro antojo, punto que será de suma importancia a la hora de decidir una partida. En este momento también podremos hacer los primeros movimientos de tropas si es que el tiempo nos lo permite.

Al alcanzar DEFCON3 ya no podremos situar más tropas aunque las tuviésemos en la reserva. En cambio, se nos abrirán mayores posibilidades de ataque pudiendo realizar las primeras maniobras hostiles. DEFCON1 supondrá la libertad total en materia bélica y será el momento en el que podremos desplegar nuestras bombas nucleares por el globo terráqueo. Al finalizar DEFCON1 se concluye la partida, con la presentación de una tabla de puntuaciones. Dichos puntos se consiguen al realizar ataques certeros sobre el enemigo, primando por encima la cantidad de millones de habitantes muertos. Pero es imprescindible conocer en profundidad las distintas unidades que se nos presentan en el juego para comprender las posibilidades del mismo, así que a continuación pasaremos a explicar este punto.



En Defcon tendremos 4 grupos de unidades que tendremos que situar de forma inteligente al comienzo de la partida. En primer lugar están los silos, el eje sobre el que se guía el juego y la pieza que más opciones tiene para desequilibrar la balanza de cara a un usuario u otro. Los silos tienen 2 objetivos muy claros. El primero de ellos es defender nuestro territorio de ataques enemigos, lo cual hará automáticamente siempre que esté en modo defensivo. La otra cualidad de los silos será la que tendremos en su modo atacante, y que lo capacitará para enviar misiles nucleares (12 por silo) a cualquier lugar del planeta. La correcta colocación de los silos será, como decimos, fundamental. Habrá que tener en cuenta que deben defender nuestras ciudades más importante de ataques, pero teniendo cuidado de no acercarlos demasiado a las fronteras enemigas pues podrían ser localizados por los radares enemigos (los silos permanecen invisibles al enemigo mientras no los capte un radar o realicen ataques).

Como segundo grupo de unidades tendremos los radares. Su función será única, y como su propio nombre da a entender será la de vigilar una espacio limitado a su alrededor mostrándonos cualquier unidad enemiga presente en el mismo. En este caso podría ser una opción interesante colocar dichos radares cerca de la frontera enemiga para cubrir el máximo territorio posible y así intentar encontrar alguno de sus silos. El tercer grupo de unidades serían las marítimas, en cuyo caso tenemos una serie de vehículos disponibles que citaremos brevemente a continuación.

Por un lado están los submarinos, que permanecerán ocultos bajo la superficie y que podrán lanzar misiles nucleares de medio alcance. Otra unidad serían los carriers que tienen como principal atractivo su sonar anti-submarino que permite localizar submarinos en un pequeño radio alrededor de los mismos. La última unidad marítima serían los barcos de combate, que podrán destruir otros barcos así como lanzar ataques contra ciudad, aunque su corto alcance será su principal pega.

Para concluir con los distintos grupos tendríamos las unidades aéreas, compuestas por cazas y bombarderos. Los cazas podrán mostrarnos territorio no explorado gracias a su radar, así como atacar otras unidades aéreas. Los bombarderos tendrán como mayor utilidad su función de descargar bombas sobre el territorio enemigo causando importantes daños.

Con todo esto ya está resumido el concepto jugable que propone Defcon. Como se puede ver, su planteamiento es sencillo, pero su profundidad es enorme debido a la gran cantidad de tiempo que llevará conseguir un nivel importante gracias a las infinitas posibilidades que se pueden dar en cada partida, haciendo además, que siempre nos encontremos con rivales cuyas estrategias resulten novedosas. En parte recordará bastante al juego de tablero Risk, con el cual comparte más de una característica.

Respecto al apartado gráfico Defcon presenta un motor muy liviano que podrá jugarse sin ningún tipo de problema con cualquier pc actual, lo cual no impide que presente una vistosidad digna de elogio. El buen diseño del mapa con tonalidades azules y negras unidas a los efectos de neón, combinado con el espectáculo visual que supone el lanzamiento de cantidades enormes de cabezas nucleares representadas con tonos verdes, hacen que los momentos más trágicos del juego gocen de una belleza absoluta. Las explosiones también se recrean de una forma muy efectiva, por medio de un pequeño flash blanco acompañado de un texto con los millones de habitantes eliminados, que nos dejará una sensación de euforia y culpabilidad bastante curiosa.

El apartado sonoro no se quedará corto respecto a los demás puntos del juego. La banda sonora nos acompañará durante toda la partida con una intensidad que irá en aumento conforme se acerca el momento decisivo de la partida, además de intercalar momento de tranquilidad con otros de corte apocalíptico con leves agonías de víctimas de por medio realmente inquietantes.

En resumen, Defcon es un sobresaliente título multijugador de estrategia en tiempo real. Una creación arriesgada por su contenido provocador digno de una desarrolladora independiente como Introversion. Su planteamiento simple, unido a su excelente implementación jugable en el título, da como resultado una experiencia única que merece ser probada. El juego puede ser adquirido mediante la plataforma Steam o desde la Página Web Oficial del juego.