Análisis Kingdoms of Amalur: Re-Reckoning, vuelve el RPG de acción remasterizado (PS4, Switch, Xbox One, PC)
THQ Nordic está consiguiendo multitud de licencias y estudios –ya superan ampliamente los 30- y es obvio que uno de los objetivos de la compañía pasa por editar secuelas de los títulos más exitosos, pero hasta entonces, está aprovechando muchos de los clásicos para lanzar remasterizaciones que mantengan el interés o lleguen a un nuevo público. Kingdoms of Amalur: Re-Reckoning es el último ejemplo de esta política, una revisión del RPG de acción que debutó en 2012 para PC y consolas de la pasada generación; en aquel momento el desarrollo de Big Huge Games y 38 Studios fue publicado por Electronic Arts, pero ahora se encarga la propia THQ Nordic, que adquirió sus derechos en 2018.
Detrás de Kingdoms of Amalur: Reckoning se encontraban algunos nombres muy conocidos, y lo cierto es que no defraudó. Ken Rolston (The Elder Scrolls) era el diseñador ejecutivo, R. A. Salvatore (The DemonWars Saga, primera novela de Star Wars: The New Jedi Order) el creador de su universo y trasfondo, el ilustrador Todd McFarlane (Spawn, Spider-Man) en el arte y Grant Kirkhope (multitud de juegos clásicos de Rare) en la banda sonora. Un equipo de garantía, pese a que la historia resultaba un poco más confusa y sin la garra de las grandes épicas, que resolvía con bastante acierto el desarrollo de este nuevo mundo.
Un divertido RPG de acción
Hoy día si hablamos de ARPG o rol de acción la mente nos llevará irremediablemente a pensar en un Souls-like porque sencillamente los juegos de FromSoftware han marcado tendencias, y la mayoría de lanzamientos siguen unas reglas típicas de combate preciso, dificultad que tira a alta y manejo similar en cuanto a acciones. Pero Kingdoms of Amalur: Reckoning no estaba tan influenciado por Demon’s Souls o Dark Souls, en parte porque su desarrollo comenzó antes de la auténtica explosión de los Soul, y nos ofreció una aventura arcade y accesible donde sí, la evasión o defensa era importante, pero no tan vital como en un Souls-like.
En el análisis del original describimos este combate como un sistema accesible y sencillo, con un buen control, y eso es exactamente lo que encontramos en Re-Reckoning, una diversión directa que no llega hasta el frenesí de un hack’n slash tipo Devil May Cry pero desde luego ofrece una curva de aprendizaje muy cómoda. Te resultará fácil lanzar ataques físicos con las diferentes armas blancas, báculos, arcos y demás, aprovechar un poco el sigilo para eliminar enemigos o lanzar magias. Sí, se pierde un poco de estrategia si lo comparamos con otros RPG, pero la verdad es que si un juego es divertido poco más se le puede reprochar, y más en una época en la que todos buscan clonar la fórmula Souls -generalmente sin éxito-. Podemos elegir entre diferentes razas, multitud de armas y armaduras, y disfrutar de una historia principal de unas 25 horas, pero con mucho más por hacer en las misiones opcionales.
En definitiva, Kingdoms of Amalur: Reckoning nos presentaba un enorme mundo, abierto con matices –en realidad el planteamiento era bastante lineal, sobre todo en las mazmorras-, con una base sólida en la jugabilidad pero algunos problemas en la parte de narrativa, con misiones secundarias poco inspiradas.
En líneas generales, un título bastante competente que sabía aprovechar sus puntos fuertes, recogiendo muchas influencias del género y tópicos de la fantasía que no buscaba reinventar la fórmula, suficiente para ser una buena alternativa a los RPG más profundos y jugadores que simplemente buscaban una aventura de acción en tercera persona.
Re-Reckoning
El trabajo de la remasterización gráfica es simplemente justito, pero entra dentro de lo esperable porque en ningún momento se ha promocionado como un remake. Por una parte hay que destacar que trae todo el contenido descargable del original, incluyendo The Legend of Dead Kel y Teeth of Naros, que ampliaban las localizaciones, misiones, enemigos, mazmorras, armas y armaduras. En aspectos jugables se han hecho varios ajustes y equilibrios, como una nueva dificultad para los más jugones, nuevas formas de calcular el nivel de cada zona, botín más orientado a las habilidades de tu personaje, etc. Nada especialmente rompedor o que pueda justificar una nueva vuelta, pero cualquier mejora que lo convierta en la versión definitiva siempre es bienvenida.
En los aspectos gráficos y sonoros apenas hay cambios salvo compatibilidad con resoluciones 4K y una fluidez superior a la experiencia en las consolas originales. Mantiene esa apariencia ligeramente cartoon en diseños de personajes y escenarios, que ya comparamos en su momento con World of Warcraft o Fable, pero en nuestra opinión hay zonas donde la dirección de arte falla más de la cuenta, con unos colores excesivamente saturados y las limitaciones propias de un juego de hace una década. La iluminación no parece que se haya revisado –se reconoce inmediatamente su origen de la pasada generación por ese desenfoque y efecto de "cámara con vaselina"-, dando lugar a zonas de oscuridad poco atractivas, modelados bastante simples en personajes y entornos, y escasa expresividad en los personajes –lo que no ayuda nada a aportar carisma-. Sumar a esto que no se han corregidos defectos en aparición súbita de vegetación en los escenarios más grandes y el visible cambio de modelado en objetos a medida que nos acercamos a ellos.
El resultado, por tanto, es el de un juego que no oculta el paso del tiempo aunque se puede jugar sin grandes problemas. Acostumbrados a reediciones con el nombre Remastered que profundizan mucho en la renovación gráfica, hasta el punto de ser juegos rehechos por completo –caso de las colecciones de Crash Bandicoot o Spyro-, Re-Reckoning puede saber a poco. Aun así, la tasa de imágenes pulida y la resolución para televisiones o monitores modernos siempre lo hará una experiencia más agradable que en su momento si lo comparamos con PS3 y Xbox 360; si estás a punto de entrar en Amalur por primera vez, no hay mejor oportunidad.
Conclusiones
Es imposible no sentir cariño por Kingdoms of Amalur: Re-Reckoning, la revisión de un RPG que quizás no fue tremendamente conocido, pero que sin duda dejó buenos recuerdos entre aquellos que se interesaron por este universo repleto de acción y hechizos. Casi una década después lo mejor del original se mantiene, comenzando por un combate sólido que es, de hecho, superior al de otros RPG de más renombre; lamentablemente los puntos débiles también son más prominentes, desde una gran cantidad de relleno y misiones secundarias poco atractivas a una alarmante falta de personalidad dentro de un género en el que hay muchas propuestas similares. La remasterización es mínima, sin más retoque aparente que la resolución y la fluidez, así que tenemos un buen juego de rol que fácilmente sorprenderá a quienes no lo hayan disfrutado anteriormente, pero con poco que aportar en su regreso.
Hemos realizado este análisis en PS4 Pro con un código que nos ha proporcionado Dead Good.