En toda gran compañía acaban perdiendo a alguno de sus desarrolladores estrella, es algo que ocurre ahora pero que ocurría también en el pasado. Unas veces es para emprender un camino como freelance y otras simplemente para fundar su propia compañía, que es lo que ocurrió con los compositores de los que venimos a hablar hoy, leyendas en su primera etapa y también en la que vendría tras su marcha.
Esta semana en VGM hablaremos de Treasure Co., la gloriosa compañía de juegos de acción que hizo historia en 16 bits tras ser fundada con exmiembros de Konami, entre los que estaban los músicos. En este caso nos centraremos en los juegos compuestos por ellos, aunque mencionaremos los otros casos en los que no se ocuparon ellos de la banda sonora, una práctica que llegaría más adelante.
La fuga de Konami
1993 fue un año crítico para Konami. A pesar de que lanzaron toda su artillería de clásicos sufrieron una pérdida irreparable que nos daría numerosas alegrías tras su concepción. De las cenizas de parte de su equipo nacía Treasure, y con ella llegaron tres miembros de Konami Kukeiha Club que serían los músicos centrales: Norio Hanzawa, Aki Hata y Katsuhiko Suzuki. Aunque no siempre es fácil saber qué juegos hicieron, sabemos que colaboraron en arcades como The Simpsons o joyas como el Lagrange Point de Famicom, que llevaba música de la señorita Hata junto al grupo REBECCA.
Gunstar Heroes fue el título inolvidable con el que se estrenaron, Norio Hanzawa firmando como NON compondría en 1993 la música de aquel clásico instantáneo que estrenaba el uso de los sound drivers personalizados de Treasure para Mega Drive. La banda sonora fue publicada por Pioneer ese mismo año en CD, un disco de arreglos que también estrenaba la relación discográfica de Treasure. También ese año dejaron el divertido McDonald's Treasure Land Adventure, compuesto de la mano de ‘Nazo²’ Suzuki, el apodo que utilizaría durante su carrera en la compañía Katsuhiko Suzuki.
En 1994, la trinidad Hanzawa–Hata–Suzuki firmaría Dynamite Headdy, otro clasicazo de Treasure que esconde referencias a Tchaikovsky y Bizet entre sus temas. Fue publicado también en CD por el sello Futureland / Toshiba EMI. Ese año saldría además el impresionante Yu Yu Hakusho, uno de los juegos de lucha más rompedores de Mega Drive por sus combates a cuatro jugadores. La música del Yu Yu Hakusho: Makyou Touitsusen ~MEGA DRIVE MUSIC~ contó con el equipo de músicos más ambicioso de esta etapa, una formación a la que llamaron T.K.O. (Treasure Kamidanomi Ongakutai) y que juntaba a Hanzawa, Hata y Suzuki con el sound designer de la compañía, Satoshi Murata. Además, Koichi Namiki grabaría las guitarras en las versiones arrange del disco, como es la soberbia «Unmeltable Flame». Incluyeron dos canciones de la serie anime en versión instrumental, el opening «Smile Bomb» y el ending «Unbalance na Kiss wo Shite».
NON Hanzawa volvería de nuevo a deslumbrar con la banda sonora de Alien Soldier en 1995. El frenético run and gun, considerado de los mejores juegos de Mega Drive, despega con la potencia de «Runner/AD2025» y temas de jefes como «7th Force» o «Alone’Z’». El álbum lanzado por Futureland / Toshiba EMI incluía todas las pistas de la versión de consola junto con algunas versiones arregladas que son espectaculares por el virtuosismo que muestran Hanzawa y Suzuki con la instrumentación real.
De manera paralela, Aki Hata y Suzuki-san escribían las piezas del título de rol Light Crusader en 1995, que a pesar de su gran banda sonora no recibió álbum dedicado. 1996 sería el año de Guardian Heroes, que supuso el salto a los 32 bits y del que se encargaron Suzuki y Hanzawa. Nazo2 Suzuki repetiría con la Silhouette Mirage Original Sound Track —a la par que Hanzawa hacía Mischief Makers—para el título de acción lateral Silhouette Mirage. Ambas bandas sonoras fueron lanzadas por Futureland / Toshiba EMI, la segunda de ellas entrado ya 1997.
A partir de Radiant Silvergun las cosas empezarían a cambiar. Aquel, al igual que más tarde Gradius V, se externalizaría contratando al siempre infalible Hitoshi Sakimoto, dejando dos de las bandas sonoras clave de Treasure. Por otro lado, Toshiya Yamanaka, que aparecería primero en Bangai-O junto a los demás músicos de la empresa, sería el encargado de hacer la BSO de Sin and Punishment para Nintendo 64. Sorprende también que la música de un insigne como Ikaruga no la compusiera ningún miembro del sound team, sino el propio director Hiroshi Iuchi. Finalmente, el veterano rol de Hanzawa pasaría a ser el que acapararía los desarrollos posteriores, entre los que dejaron Bleach: The Blade of Fate, la secuela Bangai O-Spirits o el gran Sin & Punishment: Star Successor.
Además de los CD de bandas sonoras publicados por Futureland y Toshiba EMI en aquella época, hemos recibido recientemente la publicación de algunas de ellas en vinilo a través de Data Discs. Es el caso de la de Gunstar Heroes y la de Alien Soldier, así como las posteriores de Radiant Silvergun e Ikaruga. Es muy posible que acaben saliendo otras como puede ser la de Dynamite Headdy, así que habrá que estar atentos a sus próximos lanzamientos.
