El mes de diciembre es siempre motivo de celebración y eventos, y hace una semana teníamos la gala The Game Awards, que se ha convertido en el referente en lo que a premios de videojuegos se refiere. Y aunque no deja de ser un espectáculo masivo que se detiene poco en los detalles, siempre han puesto interés en los números musicales, algo que si bien al espectador desde casa no le suelen hacer gracia, para los que lo viven allí y quienes solemos hablar de este apartado es un contenido muy interesante.
Sin embargo, me sabe mal decir que este año ha ido en decadencia, y no por los artistas invitados ni mucho menos, sino por la propia organización. Bien es cierto que no todos los años se puede montar algo grande, pero empieza a quedar claro que estos números solo son parte del show para llamar un poco la atención y no para dar crédito a los músicos, algo que saltó a la vista con el orden de premios.
La gala empezaba con media hora previa al evento, sin Geoff Keighley todavía en el escenario, y fue en ese tramo en el que suelen dar los premios de menor relevancia cuando entregaron el galardón a Best Score & Music, que fue para Ludvig Forssell por la banda sonora de Death Stranding. Si bien el premio entra dentro de las opciones que se lo merecían, lo que desde luego no se merecían era aparecer en este momento de la noche, sin que hubiera empezado siquiera la gala propiamente dicha.
WOW! WHAT IS GOING ON? Death Stranding wins for Best Score and Music! #TheGameAwards pic.twitter.com/8ErBzmJax0
— The Game Awards (@thegameawards) December 13, 2019
El sello de videojuegos Music Collective se hizo eco de esta desafortunada decisión —junto con otros como Ghost Ramp— tratando de denunciar el trato a los compositores, algo que sin duda apoyamos.
We are disappointed that @thegameawards pushed Best Score and Music to the preshow, did not credit creators and composers, and did not play representative music. Creators of videogame music deserve better than a passing 44-second mention. #gameaudio #gamemusic #TheGameAwards
— Materia Collective (@MateriaColl) December 13, 2019
Dejando a un lado esto, y teniendo en cuenta que este año The Game Awards Orchestra no contaba con ninguna cara conocida a modo de reclamo, vamos a comentar lo que fue sin duda el plato fuerte, que son las actuaciones musicales que acompañaban a los títulos presentes y futuros del videojuego. Cabe destacar que el tráiler de Ghost of Tsushima también estuvo acompañado por la orquesta.
CHVRCHES
El conjunto CHVRCHES era el que abría la gala con una nueva interpretación de «Death Stranding» —la tocaron ya en The Late Late Show, el programa de James Corden—, la desvelada canción que acompaña a los créditos del juego. En esta ocasión, el trío compuesto por Lauren Mayberry, Martin Doherty e Iain Cook se mostraba acompañado por The Game Awards Orchestra, dando un valor adicional a una composición que de por sí es magnífica y que le va como un guante a la aventura.
El propio Ludvig Forssell mencionaba al grupo cuando recogía el premio, ya que aportaron con esta canción original escrita para la ocasión y lo cierto es que su actuación no podía ser más apropiada por el premio que Death Stranding acababa de recibir. Quizás el mejor momento musical de la noche.
Grimes
La siguiente parada musical la protagonizaba el esperado Cyberpunk 2077. Aunque no hubo nada de material nuevo sobre el juego sí que pudimos conocer algo más sobre su música con el vídeo de Behind the Music. En él aparecen los raperos Run the Jewels, el grupo sueco Refused —responsables de la música de Samurai en el juego—, A$AP Rocky, Gazelle Twin, Ilan Rubin, Richard Devine, Nina Kravitz, Deadly Hunta, Rat Boy o la violonchelista Tina Guo, que se unirán al trabajo original de Marcin Przybyłowicz, P. T. Adamczyk y Paul Leonard-Morgan, compositor de Dredd (2012).
Aprovechando esto salió al escenario Grimes, la cantante y compositora canadiense que ha puesto patas arriba el pop con discos como Visions (2012) o Art Angels (2015), que también formará parte de la música futurista del juego, algo que nos parece todo un acierto. La canción que interpretó lleva por título «4ÆM», y a juzgar por la información que nos da la cuenta oficial ella será quien interprete a Lizzy Wizzy, de la que os hablamos en este reportaje dedicado a su universo.
Green Day y la clausura
El broche de oro lo ponía la actuación de Green Day, aunque salieron sin relación con ningún juego reciente, pero sí que han sido licenciados en muchas entregas de Guitar Hero, Tony Hawk’s o Madden NFL e incluso tienen su propio videojuego, Green Day: Rock Band. El veterano grupo de pop punk, que estará de gira el año que viene y pasarán por festivales como el Rock Am Ring, dejó una actuación con las canciones «Welcome to Paradise» y «Father of All» mientras pasaban imágenes de videojuegos.
Para cerrar la gala, The Game Awards Orchestra hacía el popurrí de rigor con temas de los nominados para juego del año. La partitura empezaba con The Outer Worlds, pasando así por Death Stranding, el tema principal de Super Smash Bros. Ultimate, el «Sankarin Tango» de Control —cantado en finés—, la música tradicional japonesa de Sekiro: Shadows Die Twice y acabando con «Saudade», que es la nueva canción de los créditos finales de Resident Evil 2 Remake, compuesta por Cody Matthew Johnson y cantada por Shim. De este modo terminaba la edición de 2019, más descafeinada de lo que era de esperar por otros años, pero esperemos que tomen nota de ello.