El cine de terror ha vivido un verano de auténtico esplendor con estrenos como Destino final: Lazos de sangre, Expediente Warren: El último rito y, sobre todo, Weapons, la última película de Zach Cregger. El director de Barbarian ha conseguido un nuevo éxito con una propuesta original que ha entusiasmado tanto a la crítica como al público, con un 94 % de aprobación en Rotten Tomatoes y una recaudación global de 263,5 millones de dólares frente a un presupuesto de apenas 38 millones.
Con semejantes cifras, la pregunta no era si habría expansión del universo de Weapons, sino cuándo y de qué manera. Y ahora es el propio Cregger quien confirma que ya trabaja en una precuela, un proyecto que, según ha explicado en una entrevista con Fangoria, tiene en mente desde mucho antes del estreno: “Es real y he estado hablando con Warner Bros. al respecto”, declaró.
El protagonismo de la tía Gladys
El realizador adelantó además que la precuela, si recibe luz verde, pondrá el foco en la tía Gladys, interpretada en la película por Amy Madigan. Su personaje, secundario pero impactante, se convirtió en una de las revelaciones del filme y su interpretación fue aplaudida por la crítica especializada. Cregger considera que este rol guarda potencial suficiente para sostener una historia completa que ahonde en los orígenes de las inquietantes dinámicas familiares que tanto han intrigado al público.
Pese al entusiasmo, conviene matizar que el proyecto se encuentra todavía en fase de conversaciones y no ha recibido luz verde definitiva. Warner Bros. estudia sus posibilidades comerciales en un momento en que el género de terror vuelve a ocupar un lugar central en la taquilla mundial, y Cregger tiene además otros compromisos inmediatos: entre ellos, la nueva adaptación de Resident Evil, con la que espera romper la “maldición” que durante años ha perseguido a las adaptaciones cinematográficas de la saga de Capcom.
Cregger, nueva figura del terror contemporáneo
El director se ha consolidado como uno de los nombres más prometedores del cine de terror contemporáneo. Tras sorprender con Barbarian (2022), que se convirtió en un sleeper hit gracias al boca a boca, y reafirmarse con Weapons, Cregger ha demostrado que su sello combina atmósfera inquietante, personajes ambiguos y un manejo del suspense que conecta con las audiencias actuales. La posibilidad de un nuevo spin-off amplía el horizonte de un universo que apenas comienza a mostrar sus posibilidades.
Si finalmente se confirma, la precuela de Weapons podría sumarse a la lista de proyectos más esperados del género en los próximos años. Y aunque la sombra de las franquicias pesa, Cregger insiste en que no quiere limitarse a exprimir una fórmula, sino explorar nuevas narrativas dentro de los códigos del terror. Por ahora, los fans tendrán que esperar a que Warner Bros. dé el visto bueno definitivo, pero lo cierto es que el futuro de Weapons ya empieza a perfilarse más allá de su sorprendente éxito en salas.















