Letitia Wright que criticó la vacuna del coronavirus hace unos días y que puso en duda la eficacia de las mismas al largo plazo, pronto se vio envuelta en una campaña de acoso y derribo por parte de usuarios, compañeros de profesión y científicos que pensaron que sus comentarios estaban haciendo más daño del pensado al crear dudas, alimentar la conspiración e impedir el avance de la cura a la pandemia. No es la primera actriz de Marvel Studios que duda del coronavirus o las medidas, pero Wright, tras pedir disculpas ha borrado todas sus redes sociales.
Una mala gestión de redes sociales en plena campaña promocional de su nuevo trabajo
La actriz que da vida a Shuri, la hermana de T'Challa en Black Panther, no ha estado muy fina en su gestión de redes sociales. El vídeo que publicó en Twitter, en el que criticaba las vacunas contra la COVID-19 e incluso se hacían alusiones a una suerte de conspiración con el mismísimo mal encarnado por Lucifer, generó mucha confusión, críticas y enfados entre sus seguidores, acusándola de negacionista y otras lindezas.
En pleno debate sobre los bulos, la gestión de la información y las socorridas fake news, Letitia Wright intentó pedir disculpas. "Mi intención no era hacer daño a nadie, mi única intención publicando el video era que plantease mis preocupaciones sobre lo que contiene la vacuna y lo que estamos poniendo en nuestros cuerpos. Nada más", afirmaba. Pero era demasiado tarde.
Sus excusas y disculpas no fueron convincentes, y mientras polémica se hacía más grande, con actores y compañeros suyos entrando al trapo y criticando la difusión de un vídeo de estas características, Wright ha querido tomar una decisión tan drástica como poco acertada: borrar absolutamente todas sus redes sociales. Si bien se han eliminado sus comentarios y el vídeo que publicó en su momento y generó toda este cruce de declaraciones, también ha dañado de forma evidente la promoción de su último trabajo, Small Axe: Mangrove, una ambiciosa antología de cinco películas dirigidas por Steve McQueen. Se desconoce qué pasará en los próximos días, pero está claro que un desafortunado tuit puede complicarte y mucho la carrera profesional en los tiempos de la cultura de la cancelación en internet.
