Disney no quiere contentarse únicamente con conquistar el mercado cinematográfico mediante la explotación de franquicias como Marvel y Star Wars, también quiere ofrecer un amplio conjunto de casas lujosas para ofrecer, a los más ricos, una serie de privilegios y lujos relacionados con su universo de magia y fantasía. Según recogen desde 3DJuegos, la compañía del Ratón tiene en marcha un el desarrollo de una pequeña ciudad repleta de casas de lujo, zonas verdes con jardín y hasta lagos artificiales. Eso sí, es una oferta únicamente para los que dispongan de una verdadera fortuna.
Disney quiere su propia ciudad y pone su ambicioso plan en marcha: la compañía del Ratón creará una urbanización de lujo entre Los Angeles y San Diego
La idea que tiene la Casa del Ratón es dar forma a una urbanización para millonarios de hasta 250 hectáreas de Rancho Mirage, entre Los Angeles y San Diego, ofreciendo cerca de 2000 viviendas rodeadas de zonas verdes y todo tipo de lujos, aunque hay truco; desde playas artificiales hasta lagos falsos para crear un ambiente idílico que esté bañado por la esencia de las películas de Disney, con todo tipo de beneficios para los parques temáticos y una serie de extras para mejorar la salud de aquellos que opten por adquirir alguna de las propiedades del lugar.
Los propietarios podrán realizar excursiones especiales y actividades saludables en relación a la nutrición y el bienestar. La idea es entregar el primero de estos lotes de casas en 2025, aunque puede que haya cambios en el calendario teniendo en cuenta lo ambicioso que resulta este plan.
Todavía faltan por conocer muchísimos detalles sobre este proyecto, como el precio concreto de las casas y cómo serán las zonas verdes y urbanísticas del lugar, pero por lo que parece todo ello apuntará a la clase más alta de Estados Unidos. El complejo, conocido como Cotino Bay, puede ser una absoluta revolución en Hollywood si la cosa marcha bien, pero también un fracaso tremendo si se siguen los pasos del Galactic Starcruiser, el hotel de lujo de Star Wars que cerró sus puertas por falta de audiencia.