Cuando se estrenó en 1998, Armageddon no solo atrajo a millones de espectadores al cine con su espectacularidad, sino que también despertó el interés por la exploración espacial, aunque con un toque de humor para la comunidad científica y la NASA. Dirigida por Michael Bay y protagonizada por Bruce Willis, la película presenta un escenario apocalíptico en el que un grupo de perforadores de petróleo se convierte en la última esperanza de la Tierra frente a un asteroide del tamaño de Texas. La trama, aunque entretenida, está llena de improbabilidades, y la NASA ha encontrado en ella una inesperada herramienta educativa: enseñar lo que no se debe hacer en el espacio.
Inexactitudes científicas en pro del espectáculo
A pesar de la colaboración de la NASA en la producción, la precisión científica de Armageddon quedó sacrificada en favor del espectáculo visual. El astrónomo Phil Plait, conocido por desmentir mitos científicos en su blog Bad Astronomy, describe la película como un festival de inexactitudes que desafían cualquier conocimiento real sobre el espacio y los asteroides.
En una conferencia en HawaiiCon, Plait destacó que Armageddon contiene más errores en un solo clip que fotogramas tiene, siendo uno de los más evidentes la destrucción del asteroide con una bomba nuclear, lo cual requeriría una energía equiparable a la del sol, convirtiendo la solución propuesta en algo más peligroso que el propio asteroide.
Plait subraya además que la idea de perforar y colocar manualmente una bomba nuclear en el espacio es impensable para la NASA, donde la seguridad y la precisión son fundamentales. Este tipo de procedimientos hollywoodenses, aunque emocionantes para el público, son científicamente absurdos. Sin embargo, Hollywood tiene sus propias reglas y el objetivo principal es entretener, no necesariamente educar. No obstante, esta falta de rigurosidad científica ha proporcionado a la NASA un valioso recurso educativo para demostrar los errores que deben evitarse en misiones espaciales.
Entrenamiento de lo que NO tienen que hacer
De hecho, la NASA ha aprovechado Armageddon para el entrenamiento de astronautas, utilizándola como una herramienta didáctica para enseñar a los novatos lo que no deben hacer en situaciones de crisis espaciales. Según informes, la NASA ha identificado hasta 168 errores técnicos y científicos significativos en la película, desde problemas de física básica hasta representaciones inexactas de la gravedad y el funcionamiento de los asteroides. Esto ha permitido a la agencia ilustrar de manera efectiva las fallas comunes en la percepción pública de la exploración espacial.
'Deep impact' es más realista
A pesar de sus inexactitudes científicas, Armageddon sigue siendo una de las películas más populares del género de ciencia ficción. Sin embargo, para quienes buscan una representación más realista del impacto de asteroides en la Tierra, el astrónomo Phil Plait sugiere Deep Impact, estrenada el mismo año que Armageddon pero eclipsada por su contraparte más espectacular. A diferencia de Armageddon, Deep Impact se esfuerza por retratar un escenario más cercano a la ciencia real, explorando las consecuencias de un impacto astronómico de manera más verosímil.