Simon Pegg, estrella y co-escritor de la icónica comedia de Zombies Party, que recientemente ha hecho del padre de Hughie en The Boys, ha dejado claro que no tiene intenciones de permitir una secuela de la película. Durante una entrevista con The Hollywood Reporter, Pegg expresó su firme oposición a la idea de retomar la historia de Shaun. Para el director, la película es demasiado personal, y rehacerla o continuarla sería un acto cínico y explotador que no haría justicia a la originalidad y el esfuerzo puestos en su creación. Este enfatizó que algunas historias, al igual que la de Shaun, tienen un inicio, un desarrollo y un final, y deberían permanecer intactas. “Quiero decir, Universal [Pictures] es la dueña. Si deciden reiniciarla, entonces pueden hacerlo si quieren, supongo. Aunque Edgar y yo estaríamos indignados”, añadió.
Una historia demasiado personal...con zombis
Pegg mencionó que este filme contiene muchas experiencias y sentimientos personales tanto suyos como de sus colaboradores. Por ejemplo, la dinámica entre los personajes de Ed y Shaun refleja su propia amistad con Nick Frost y su tendencia a pasar tiempo en un pub en el norte de Londres en lugar de socializar en otros lugares más concurridos de la ciudad.
Asimismo, la relación de Shaun con su madre y su padrastro está inspirada en la complicada relación de Pegg con su propio padrastro, lo que añade una capa de autenticidad y emoción a la película que sería difícil de replicar en una nueva versión.
Critica a Snyder
El debate sobre los remakes y los reboots en la industria del cine es uno que genera opiniones encontradas. Pegg, de hecho, ha sido especialmente crítico con el remake de Amanecer de los muertos de Zack Snyder, aunque reconoce que es una película emocionante y bien hecha. Sin embargo, su problema radica en el uso del título original de George A. Romero. Para Pegg, utilizar el título simplemente porque es reconocible es una falta de respeto a la obra original y a su legado. En su opinión, el remake podría haber sido igualmente efectivo con un título diferente, como Deadish (medio muertos), sin recurrir al nombre que hizo famosa a la película original.
La resistencia de Pegg a una secuela de Zombies Party también se basa en su creencia de que el cine debería desafiar a los espectadores y ofrecerles nuevas experiencias en lugar de reciclar historias antiguas. Según él, aunque es un gran fan de las secuelas cuando están bien hechas, en el caso de esta película no hay una nueva historia que contar sin deshacer el desarrollo de los personajes logrado en la película original.