¡Cuidado, spoilers! En este artículo hablamos libremente sobre el primer episodio de 'The Ones Who Live', la nueva serie de The Walking Dead.
The Walking Dead: The Ones Who Live, el nuevo spinoff de AMC tras 'Dead City' y 'Daryl Dixon', tiene ventaja con respecto a los otros proyectos que expanden la historia apocalíptica de Robert Kirkman, puesto que trae de vuelta al querido Rick Grimes de Andrew Lincoln, el que fue protagonista principal de la exitosa serie de televisión durante nueve temporadas y que desapareció, de la noche a la mañana, sin dejar rastro alguno. La despedida de Lincoln se llevó a cabo en 2019 a través de un trágico accidente en un puente que no dejaba nada claro el futuro del personaje en The Walking Dead. El nuevo spinoff, con Danai Gurira como Michonne, por fin resuelve todas las dudas con Rick y desvela todos sus misterios: ¿Qué ocurrió con el líder más querido de los supervivientes?
Rick Grimes está más vivo y feroz que nunca: el padre y líder que conocimos en The Walking Dead ahora es un superviviente despiadado con un solo objetivo
'The Ones Who Live' va directa al grano y no se anda con rodeos. La nueva serie de The Walking Dead no pierde el tiempo con introducciones y salta directamente a la acción mostrando a Rick, cinco años después del accidente del puente, tras haber sido capturado por Jadis y vendido a la República Cívica Militar (CRM) para convertirse en consignatario es una civilización inmensa de supervivientes en Filadelfia. En esos primeros compases de la ficción se muestra cómo Rick, trabajando bajo las órdenes de la CRM cargándose a caminantes y limpiando campos, intenta escapar cortándose la mano en busca de la libertad para así reencontrarse con Michonne y su querida hija, Judith. Dentro del contexto de la serie, este es el cuarto intento de fuga de Rick, que por supuesto acaba en fracaso dejándole manco de por vida. Aunque eso no es obstáculo para que Grimes siga decapitando a caminantes demostrando su valía.
Rick, acostumbrado a ser un líder, es ahora un consignatario que debe obedecer y agachar la cabeza, quedando su sueño de reencuentro con Michonne frustrado por las altas esferas. Sin embargo, sus capacidades le impulsan a lograr ascensos y ser valorado dentro de la organización militar como un "A", es decir una persona con fortalezas y habilidades que puede recibir instrucción y formación para ejecutar tareas de riesgo. Rick pasa así la consignación a abrazar al ejército y convertirse en un soldado, aumentado sus posibilidades de encontrar a sus seres queridos. Pero su ascenso no es casual, porque lo que se busca es que Grimes se convierta en una especie de salvador de la CRM, una organización que con el tiempo se ha vuelto corrupta y tiránica.
Todo este tiempo, Rick ha estado ascendiendo en la CRM y recibiendo instrucción militar. Aunque haya perdido una mano, sigue siendo uno de los supervivientes más letales que se pueden encontrar en The Walking Dead. La tarea del personaje de Lincoln es suprema, puesto que debe cambiar para siempre la organización de supervivientes más grande del planeta mientras que, al mismo tiempo, lucha por querer volver al lado de Michonne, su familia y el resto de personajes principales que han sido repartidos por el mundo.
