Hace una semana, con el reestreno de Titanic en cines, os hablamos sobre la lucha que estaban llevando en recaudación mundial Avatar: El sentido del agua y ese proyecto protagonizado por Leonardo DiCaprio y Kate Winslet. Sendos largometrajes han sido dirigidos por el inigualable James Cameron, cineasta que a estas alturas ha hecho historia y se convertido en uno de los pocos que ha tenido que luchar contra sí mismo para ver qué película termina convirtiéndose en la tercera con mayor recaudación de la historia. Podemos afirmar ya, con total seguridad, que Avatar 2 se queda como la tercera película más taquillera de la historia con 2243 millones de dólares a nivel mundial hasta la fecha. Titanic, por su parte, posee 2242 millones de dólares.
Avatar: El sentido del agua ha vencido a Titanic en recaudación, aunque por muy poco
Con ello, James Cameron ha dirigido tres de las cuatro películas más taquilleras de la historia: Avatar (1), Avatar: El Sentido del Agua (3) y Titanic (4). Además, y para sorpresa de todos, Avatar 2 recibió cuatro nominaciones a los Premios de la Academia, incluido el de mejor película. El fenómeno en el que se ha convertido Avatar es de escándalo, superando incluso a infinidad de películas de superhéroes tanto de Marvel como de DC.
La siguiente película a derrotar para El sentido del agua es Vengadores: Endgame, obra cumbre del UCM que tiene en su haber 2797 millones de dólares. La primera posición la ocupa la primera cinta de Avatar con 2847 millones de dólares. Para poder optar a esas nuevas posiciones, El sentido del agua aun tiene mucho trabajo por delante, y es probable que se quede directamente donde está.
En nuestra crítica de Avatar 2, os contábamos lo siguiente: "Avatar: El sentido del agua no es la obra maestra que muchos esperan, pero tampoco el desastre que otros desean. Es un largometraje digno de la firma del mejor Cameron que se arropa en las tendencias actuales del cine blockbuster, echando mano de ejercicios que significaron un éxito tremendo en su día y que ahora, revisados con una gruesa capa de remake de efectos digitales de lujo, pueden funcionar. El cineasta sabe perfectamente a lo que juega, y El sentido del agua es un exponente gigantesco de lo que estamos viviendo en la industria a día de hoy".