Bill Gates, cofundador de Microsoft, y una de las voces más activas y críticas con respecto a la actual pandemia de coronavirus, tiene un plan. Gates ha asegurado que, con preparación, se podrá dar respuesta a la próxima e hipotética pandemia con apenas 1000 millones de presupuesto anual. El filántropo quiere colaborar con la Organización Mundial de la Salud (OMS) por una ínfima cantidad del presupuesto de cada gobierno. "Es una cantidad ridícula si la comparamos con los que se gasta en defensa o cambio climático", afirma. ¿Cuál es su plan? Así lo ha explicado a la CNN.
Un equipo de respuesta rápida que busca detectar, curar y destruir posibles virus
Gates ya ha explicado en otras ocasiones cuál es su plan. El antiguo empresario quiere que el equipo de Respuesta y Movilización Epidémica Global (GERM por sus siglas en inglés) sea un grupo de acción rápida, dependiente de la OMS, y que busque detectar las nuevas amenazas biológicas con gran rapidez. "Estaría compuesto por expertos de todo el mundo, capaces de hacer gala de una amplia gama de conocimientos como epidemiología, genética, sistemas de datos, diplomacia, respuesta rápida, logística, modelado informático, comunicaciones y más", comentaba en su web y en la citada entrevista.
El sistema centinela del GERM, monitorizaría todos y cada uno de los brotes de las enfermedades que aparezcan por todo el mundo, siempre en plena colaboración con los servicios de salud pública de los diferentes países, evaluando amenazas y calculando los riesgos de transmisión a nivel internacional. Pero hay problema: el coste.
Sin embargo, Bill Gates piensa que merece la pena, y que el GERM no costaría demasiado dinero. Para él, el verdadero terror son los 14.000 millones de dólares de pérdidas que ha generado el coronavirus. "Es una de las políticas de salud más baratas", ha remarcado Gates, que explicará estas y otras ideas en su próximo libro.
Según él, si se diseñan mejores herramientas, y se controlan mejor los virus, al fortalecer los sistemas de salud y detención se podrán contener los brotes en menos de 100 días, cortando su distribución a nivel internacional y permitiendo a los laboratorios encontrar vacunas o mejores tratamientos. Bill Gates cree que el nuevo coronavirus o la nueva enfermedad que sea capaz de ponernos en jaque, se originará de nuevo en el sudeste asiático, zona clave. Asimismo, desde el GERM prometen rastrear los brotes que se originen en estos lugares, como Asia o África.
"Es lógico, porque la proximidad entre los animales y humanos se está haciendo cada vez más estrecha. África es un riesgo y Asia es un riesgo", concluía, afirmando que el cambio climático ha hecho que muchos animales abandonen sus hábitats y acaben entrando en los lugares en los que vivimos los seres humanos. Gates, que cree que los murciélagos son un riesgo contante, piensa que generarán el siguiente desafío biológico. Y no tardará demasiado en llegar.
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