Hace unos días, os contábamos el informe que detallaba los encuentros militares de EE. UU. con los llamados Fenómenos aéreos no identificados o UAP, lo que muchos expertos han declarado ser la evidencia más clara sobre objetos aeroespaciales tripulados por extraterrestres pero que la propia inteligencia estadounidense no ha sabido explicar con claridad. En plena oleada OVNI, desde The Debrief se nos confirma que la República Popular de China ha anunciado que ha habido un aumento de aeronaves misteriosas e inexplicables en el espacio aéreo chino, constituyéndose un nuevo equipo encargado de vigilar estos fenómenos y perseguirlos en el caso de que crucen fronteras militares sensibles.
Los avistamentos se han multiplicado en los últimos meses
El South China Morning Post, periódico de tirada nacional, ha informado que los analistas chinos se han visto abrumados en los últimos años por el rápido aumento de informes de avistamientos de una amplia gama de fuentes militares y civiles. Ante esta avalancha de OVNIS, el Ejército Popular de Liberación (EPL) ha admitido que ha formado un grupo de acción rápida encargado de estudiar, controlar y catalogar estos testimonios y pruebas.
Como explican en The Debrief, el gobierno comunista chino estaría usando el mismo tipo de definición que el gobierno de Estados Unidos, eliminando cualquier tipo de referencia extraterrestre en este tipo de elementos y avistamientos, pero sin descartar ninguna posibilidad. Por ejemplo, usan una definición similar a la de fenómenos aéreos no identificados, y estarían abriendo informes y comités multidisciplinares para encontrar una solución a estos fenómenos.
"La frecuente aparición de condiciones aéreas no identificadas en los últimos años... Está ocasionando serios desafíos a la seguridad de la defensa aérea de nuestro país", ha explicado Chen Li, de la Academia de Alerta Temprana de la Fuerza Aérea del EPL, en un informe de 2019 citado por SCMP. China ha tenido una buena cantidad de avistamientos de OVNIS en los últimos meses. Según los medios estatales chinos, en 2010, el aeropuerto Xiaoshan de Hangzhou fue cerrado de imprevisto, y los vuelos se desviaron debido a un extraño objeto que flotaba sobre la pista y que permaneció durante horas. Los funcionarios del aeropuerto reportaron que el objeto volador estuvo inmóvil en una zona crítica de las pistas, y eso obligó a cambiar el flujo de vuelos, tanto de aterrizaje como de despegues. "Hemos recibido órdenes de cerrar el aeropuerto hasta que se despeje el cielo", explicó un representante del aeropuerto. El objeto finalmente desapareció y el aeropuerto reanudó sus operaciones alrededor de las diez de la noche, dos horas y media después de que apareciera. Los lugareños informaron haber visto un objeto redondo brillante que se parecía a un cometa. El gobierno chino intentó que no se hablara más del tema.
Para reforzar la detención de estos objetos, la República Popular de China ha estado trabajando en un sistema de varios niveles. El primer nivel consiste en crear y reforzar las estaciones de radar militares existentes, entrenando a los pilotos de la fuerza aérea, mejorando las estaciones de policía, revisando las estaciones meteorológicas y potenciando los observatorios de la Academia de Ciencias de China, que son los centros que recopilan la mayor cantidad de datos posibles sobre estos eventos OVNI o UAP. Estos datos en bruto serían analizados por los militares, ya en el segundo nivel, que se encargarían de filtrarlos según el nivel de amenaza. Una vez catalogados, se dividirán ls avistamientos en función de los comportamientos observados, las frecuencias de aparición, el diseño aerodinámico del objeto detectado, la radiactividad emitida, la posible marca y los materiales empleados -en el caso de que sean objetos humanos- y la información previa registrada.