Aunque Bethesda todavía no ha publicado un parche para solucionar los problemas de latencia de The Elder Scrolls V: Skyrim en su versión para PlayStation 3, y no está previsto que se arreglen en la actualización 1.3, que acaba de publicarse en PC y pronto lo hará también en consolas, al menos han ofrecido unos consejos a los usuarios para intentar aliviar los problemas de rendimiento del juego.
La primera recomendación es que el usuario desactive la opción de salvado automático de la partida, ya que al hacerlo en segundo plano puede afectar al rendimiento del juego. La segunda recomendación es liberar espacio en el disco duro de la consola y dejar libres al menos 2GB de memoria en el mismo.
La tercera recomendación es posiblemente la menos aceptable por los aficionados: no "jugar" durante 30 días (virtuales, dentro del juego: el paso del tiempo es mucho más acelerado que en la realidad), ya que eso reiniciará los datos de localización de todos los objetos, acciones y elementos con los que haya interactuado el jugador. Por tanto, el usuario debería dejar abierto el juego y no realizar ninguna acción hasta que haya pasado ese tiempo dentro de la línea temporal del título.
Por último, sugieren restaurar el sistema de archivos de la consola, una opción disponible dentro del menú de la consola que puede borrar datos corruptos en el disco duro de PlayStation 3. También aconsejan utilizar la opción de reconstruir la base de datos. Sin embargo, Sony no recomienda emplear ninguna de estas opciones ya que pueden implicar la pérdida de datos.