Resident Evil: The Darkside Chronicles llega esta semana a las tiendas, pero ya está recibiendo algunas críticas por su contenido, como está ocurriendo con algunos juegos populares de esta temporada navideña. En el caso del juego de disparos de Capcom para Wii, han sido varios miembros de la Iglesia Anglicana los que han criticado su juego, acusándolo de promover el ocultismo entre la juventud británica.
El obispo Bryant de Jarrow, el archidiácono Brian Smith y el reverendo John Goddard han emitido críticas contra el juego, a las que Capcom ha respondido rápidamente, a través de su portavoz en el Reino Unido, Leo Tan, comentando que "esto es alarmismo y típica histeria religiosa. No se le puede echar la culpa de los males de la sociedad a los videojuegos. Simplemente es absurdo".
El portavoz añade que "la mayoría de los juegos y películas como Resident Evil muestran a los personajes luchando contra el mal, no apoyándolo. Por desgracia el clero está mostrando falta de entendimiento hacia la industria del videojuego y son muy rápidos salpicando agua bendita y agrupan a los jugadores de videojuegos en un estereotipo".
"Los videojuegos son entretenimiento como las películas de terror y otras películas de miedo, y están cubiertos por un sistema de calificaciones. Resident Evil por ejemplo es para mayores de quince y no es apropiado para nadie bajo esa edad. Debe confiarse en que los padres se guíen por estas restricciones de edad y usen el sentido común".