La saga Yakuza lleva desde finales de 2005 trayendo nuevas entregas. Entre los juegos de la saga principal, spin-offs en otras líneas temporales o historias paralelas como la que ha protagonizado Majima en su primera aventura en solitario. Y aunque puedes probar su demo en todas las plataformas, hay otra entrega paralela que salió a la venta a finales de 2023 y sirvió para despedir a Kiryu: Like a Dragon Gaiden: The Man Who Erased His Name, que además tienes disponible con una suscripción de PS Plus Extra o superior.
Para los que puedan estar un poco perdidos con los saltos de tiempo, cambios de nombre en occidente y demás, técnicamente es el Yakuza 9 dentro de la saga principal, pero para entenderlo del todo y evitar spoilers, deberías haber jugado como mínimo a Yakuza 6 Like a Dragon (Yakuza 7) para no perderte nada.
Like a Dragon Gaiden: The Man Who Erased His Name es la despedida de uno de los mejores protagonistas del mundo de los videojuegos
Gaiden sigue las mecánicas clásicas de la saga, en el sentido de que no es un juego de combates por turnos como las dos últimas entregas principales. Volvemos a controlar a Kiryu, el Dragón de Dojima en un beat'em up tan salvaje como lo ha sido siempre. No faltan los montones de opciones en combate que incluyen los salvajes movimientos heat característicos de la saga, el uso de objetos, el desbloqueo de habilidades... y en esta ocasión el uso de artilugios de agente secreto, que están relacionados directamente con la trama.
La historia nos sitúa después del final de Yakuza 6. Al final de aquella entrega, Kiryu descubre un secreto gubernamental y se ve obligando a fingir su muerte para poder proteger a Haruka y los demás niños del orfanato. La organización que se dedica a proteger este y otros secretos acaba forzando a nuestro protagonista a trabajar para ellos mientras esconde su identidad tras unas gafas y el nombre de Joryu.
Las cosas por supuesto se complican sobremanera, y a lo largo de la trama podemos ver varios momentos en los que Kiryu rememora acontecimientos del pasado. No son buenos, menos todavía en la situación en la que se encuentra: al final siempre ha luchado por proteger a otros, pero en sus propios términos. Ahora se ve obligado a hacerlo para quienes le han apartado de aquellos a los que protege y habrá algunas situaciones en las que se verá emocionalmente superado.
Por supuesto no faltan montones de minijuegos y misiones secundarias muy por encima del nivel de calidad medio de esta clase de títulos. Hay personajes secundarios interesantes, hay subtramas con mucho trabajo por detrás y todo ello se condensa en una entrega más corta que las demás, con unas 30 o 40 horas de diversión para los amantes de la saga. Algo más que perfecto si todavía no habéis jugado a Infinite Wealth y queréis prepararos debidamente para despediros de Kiryu, que también aparece como personaje controlable y coprotagonista de la octava entrega.












