Los analistas habían señalado las bajas ventas de superproducciones en iOS, una iniciativa que Apple anunció para demostrar la potencia del chip A17 Pro que permite unos gráficos y rendimiento similar a las consolas de la pasada generación. Tras Resident Evil 4 Remake, Resident Evil 8: Village, Death Stranding Director's Cut y Assassin's Creed Mirage, el último lanzamiento ha sido Resident Evil 7, y de nuevo las estimaciones apuntan al escaso interés por este tipo de juegos en móvil.
Resident Evil 7 se estrenó en iOS el 2 de julio. Similar a otros juegos, la descarga es gratuita -tipo demo- y en este caso ha logrado 83.000 descargas según Appmagic, pero para desbloquear el juego completo se necesita pagar 19,99 €, y 20,00 € por el DLC. Esta fuente sugiere que Capcom habría ingresado unos 28.000 dólares y sus cálculos -teniendo en cuenta las regalías de Apple- son que menos de 2000 usuarios habrían pagado por el juego.
La cifra es similar a las estimaciones de otros AAA en iOS. Assassin's Creed Mirage habría alcanzado las 3000 copias, Resident Evil 4 Remake las 7000, Resident Evil 8 Village las 5750, y Death Stranding las 10.600, todos estos datos en un plazo mayor que el de Resident Evil 7.
¿El usuario de móvil no busca estas experiencias?
Adaptar juegos de consola y PC a móvil no será barato, pero se cree que Apple pagaría por estas versiones que fueron promocionadas por todo lo alto en sus eventos. Sin embargo, no está confirmado y no parece probable que Capcom u otras editoras se animen a adaptar más títulos sin una compensación económica. Hay que tener en cuenta que estos juegos requieren un iPhone 15 Pro o Pro Max, y tabletas iPads con chips M1 o superiores.
De nuevo, los analistas creen que no hay mercado para este tipo de juegos en móviles, donde triunfan experiencias más breves y de control sencillo. No ayuda tampoco que, además de los limitados modelos capaces de ejecutar estas versiones, hablamos de títulos que muchos ya han jugado en pantalla grande; Resident Evil 7 por ejemplo debutó en 2017.