Juegaterapia, la fundación que busca ayudar a niños enfermos de cáncer a sobrellevar mejor su enfermedad y tratamiento por medio de terapias basadas en videojuegos, acaba de publicar un documental titulado "La quimio jugando se pasa volando" basado en un estudio publicado en la revista "Journal of Medical Internet Research" en el que se demuestra que jugar ayuda a los más pequeños a curarse.
Jugar a videojuegos alivia el dolor y favorece la recuperación
Este estudio científico se ha llevado a cabo por la Fundación Juegaterapia en el Hospital La Paz de Madrid y en él se ha confirmado que los pacientes pediátricos oncológicos con mucositis postquimioterapia, una de las consecuencias más duras del tratamiento, sienten menos dolor jugando a videojuegos.
De hecho, gracias al ocio electrónico se disminuyeron las dosis de morfina en un 20% y se aumentó en un 14% el tono parasimpático, el principal responsable de la recuperación del organismo, lo que acabó favoreciendo la curación de los pequeños.
Con estos datos, desde Juegaterapia quieren proponer que se incluyan los videojuegos como analgésicos no farmacológicos en esta fase del tratamiento para que así forme parte del protocolo de atención sanitaria de estos pacientes.
El documental puede verse ya en Amazon Prime Video y Filmin y cuenta con la colaboración de Alejandro Sanz, quien pone su voz como narrador.
Por supuesto, no faltan testimonios reales de niños que explican cómo los videojuegos les ayudaron a superar la enfermedad ni las declaraciones del equipo médico de La Paz que participó en este estudio.
Por ejemplo, el Dr. Alonso Puig declara en él que "cuando un niño está absorto en un juego que le gusta, esta absorción plena paraliza esa generación de pensamientos perturbadores que producen ansiedad, generan dolor y activan el sistema nervioso simpático, dada la estrecha interacción que existe entre mente y cuerpo. Gracias a la absorción plena en el juego, el niño enfermo activa su sistema nervioso parasimpático. Esta otra división del sistema nervioso vegetativo tiene dos funciones. Por una parte favorece la interacción social y por otra, ayuda a mantener la homeostasis o equilibrio interno del organismo, reduciendo también el deterioro de los distintos órganos del cuerpo".
Desde Juegaterapia también han querido comentar que el estudio ha sido posible gracias a la cesión desinteresada por parte de Sony Interactive Entertainment España de las consolas y videojuegos que se utilizaron para la terapia.