Dying Light 2 fue uno de los primeros juegos en confirmar versiones para la nueva generación de consolas, PlayStation 5 y Xbox Series X. Aunque la información de las novedades para estas plataformas es escasa, ya sabemos que hará uso de la tecnología ray-tracing, que promete dar un nuevo impulso a la iluminación de los próximos lanzamientos.
En una entrevista a Official PlayStation Magazine, Tomasz Szałkowski de Techland explica que Dying Light 2 utiliza su motor C-engine, y quieren alcanzar sus "ambiciones en términos gráficos, y es por eso que será la primera producción de Techland que soporte ray-tracing. Lo hemos estado implementando en cooperación con Nvidia -en PC-".
"Gracias a esta tecnología, nuestras sombras en el clima soleado serán como realmente deberían", dice el director de renderizado. "Los efectos de oclusión ambiental han ganado estabilidad espacial y ya no sufre compromisos vinculados a las características específicas de los efectos que afectan el espacio de la pantalla".
Ayudará a aumentar el terror
Dying Light 2 se beneficiará de esta iluminación en las zonas oscuras. Szałkowski explica que están experimentando con fuentes de luz secundarias -reflejos en superficies- de luces artificiales -por ejemplo la linterna del jugador-, lo que da una sensación de exploración todavía más realista e intensa.
El videojuego de acción en mundo abierto con zombis con mecánicas como el parkour ha retrasando su lanzamiento, y ya no llegará esta primavera. No tiene ninguna fecha aproximada para su salida, y todo apunta a que se pondrá a la venta cuando estén disponibles las nuevas consolas. La secuela nos lleva ahora a un futuro un poco más distante, en el que la humanidad ha tenido que adaptarse a las plagas de zombis que han asolado la civilización. Nos encontraremos una ciudad europea ficticia, que será hasta cuatro veces más grande que el mapa original del primer juego.