Las restricciones sociales que están afectando a cada vez más países para intentar frenar la rápida expansión del Covid-19, también conocido como coronavirus de Wuhan, están haciendo que la gente recurra a entretenimiento doméstico. Y está claro que los videojuegos son una opción destacada. Steam ha establecido un nuevo récord de usuarios simultáneos con casi 20 millones de jugadores conectados a sus servidores.
Según los datos ofrecidos por el propio servicio, ayer, sábado 14 de marzo, en la tarde europea y mañana americana (aproximadamente a las 16h, en horario peninsular español) se batió ese récord alcanzando un total de 19.728.027 personas.
CS:GO saca músculo: más de 1 millón de jugadores simultáneos
Esto ha tenido otras consecuencias en modo de récords para juegos: Counter-Strike: Global Offensive ha sido lo más popular y ha logrado superar el millón de jugadores simultáneos con un pico de 1.007.062 usuarios.
En segunda posición ha estado Dota 2 con 694.829 jugadores. El podio de juegos en Steam por usuarios simultáneos lo ha cerrado PUBG, que registró un pico de 525.462 jugadores.
Ciudadanos en cuarentena en cada vez más países
Todos los servicios de juego en línea, vídeo bajo demanda y demás formas de entretenimiento electrónico están registrando altos niveles de uso y es de esperar que sus datos sigan creciendo mientras se acentúan las medidas de aislamiento social que están imponiendo más países europeos y que se espera que pronto lleguen a América. De hecho, son varios ya los países que han anunciado la suspensión de actividades académicas en universidades y se espera que estas medidas sean solo el principio.
Son muchos los países que están optando por cerrar fronteras e imponer limitaciones a la libertad de movimientos de los ciudadanos para contrarrestar la irresponsabilidad de quienes no han seguido las recomendaciones sanitarias con el objetivo de frentar la expansión de la enfermedad e intentar prevenir el colapso de los sistemas sanitarios, lo que dejaría en una peligrosa situación a las personas más débiles ante la enfermedad, otros pacientes crónicos, personas inmunodeprimidas o inmunosuprimidas y, cómo no, todos aquellos que sufran accidentes o requieran asistencia sanitaria urgente.
Pese a todo ello, os recordamos que no deben darse situaciones de pánico: los servicios fundamentales, la distribución y venta de alimentos, farmacias, etc., seguirán funcionando con normalidad.
