Motion Twin, el equipo de Dead Cells, no preveía el éxito y buena acogida que tendría el título y sus previsiones de ventas eran mucho más modestas que las que consiguió el título, que ha superado el millón de copias vendidas.
Steve Filby, el responsable de mercadotecnia del estudio, ha desvelado en una reciente entrevista que el equipo esperaba conseguir unas ventas mucho más bajas: soñaban con llegar a 20.000 unidades en el primer trimestre para tener la opción de dar continuidad a su carrera y optar a crear otro videojuego.
"Como el tipo de marketing, estaba mirando mi bola de cristal intentando dilucidar cuánto podíamos vender y cuánto dinero necesitábamos para poder hacer otro juego", ha explicado Filby.
"Concluimos que teníamos que vender 20.000 copias en los primeros tres meses y que eso nos daría suficiente tiempo como para poder hacer otro juego.
Cuando llegó el momento de lanzar el juego confiábamos en situarnos entre las 10.000 y las 20.000 copias. No podíamos ni imaginar que eso lo que íbamos a vender el primer día".