Como os contamos, hace un par de meses cerró Darkside Game Studios, el estudio que trabajaba en un remake para Xbox One de Phantom Dust.
Ahora, supuestos desarrolladores –fuentes creíbles que ya han filtrado un vídeo de su jugabilidad– aseguran que la culpa del cierre es de Microsoft, que no fueron razonables a la hora de pedirles objetivos durante la creación de este título.
Los cambios de planes
Según cuentan, se acordó un presupuesto de 5 millones de dólares para crear únicamente un modo multijugador, pero luego Microsoft habría pedido que también se hiciera un modo historia dentro del mismo presupuesto y de la misma fecha límite.
Las fuentes de Darkside Games afirman que sus 50 empleados trabajaron constantemente en el juego para conseguir cumplir los objetivos mensuales que les pedía Microsoft, sin que se les permitiese contratar a nadie más.
Los problemas económicos
En enero, el estudio habría mostrado un prototipo a Microsoft, que quedó muy satisfecha con éste, y en febrero, Darkside Games habría volado a Redmond para pedir que se aumentara el presupuesto a entre 7 y 8 millones de dólares. El final de esa discusión, sería la razón de que estemos escribiendo esta noticia.
El juego sigue previsto para la consola, aunque se desconoce en manos de quién está ahora.
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