La semana pasada llegó a las tiendas 2Dark, el nuevo juego de Frédérick Raynal, creador de Alone in the Dark. Como los amantes del terror recordarán, la saga no ha levantado cabeza casi desde sus orígenes, pero si estuvo cerca de hacerlo no fue precisamente con su última entrega, el más que olvidable Alone in the Dark: Illumination, sino con la anterior, una especie de reinicio llamado simplemente Alone in the Dark.
Este Alone in the Dark, lanzado en 2008, estaba lejos de ser un juego perfecto, y aunque su revisión para PlayStation 3 solventó muchos de sus problemas, seguía sin ser un imprescindible. En cualquier caso, era un juego muy interesante, con ideas prometedoras no muy bien ejecutadas. Lo más importante es que, durante los cuatro años que tardaron en desarrollarlo, Eden Games pudo conocer la saga en profundidad y crear sus herramientas propias.
Para quienes no lo conozcan, Eden Games era el estudio responsable de la saga V-Rally, así como Test Drive Unlimited, aunque cambiaron totalmente de género con la saga que nos ocupa. Alone in the Dark (el de 2008) no vendió particularmente bien, pero tampoco vendió particularmente mal (llegó a superar el millón de copias, aunque quizás es menos de lo que Atari esperaba), por lo que la secuela seguro que estuvo sobre la mesa. De hecho, el productor de este título afirmó que "hay un logro al final del juego que tendrá un gran impacto en el próximo… no puedo decir nada más".
No sabemos exactamente qué iba a ser ese "próximo", pero quizás tenemos una idea. Después de Test Drive Unlimited 2, el estudio sufrió una serie de despidos que afectaron notablemente a la plantilla, y tuvieron que pasar a trabajar en proyectos menores. "Menores" no significa menos interesante, y de hecho lo que tenían entre manos era algo que a muchos jugadores les habría gustado ver: un remake del Alone in the Dark original.
Este título tenía un presupuesto muy ajustado, y un pequeño equipo de tan sólo cinco personas detrás: un programador, un animador, un artista gráfico y dos diseñadores. Todos habían trabajado en el Alone in the Dark, y uno de los diseñadores, Guillaume Colomb, también tenía experiencia en otros juegos de terror, como Obscure y Obscure 2.
Sobra decir que la idea era adaptar la aventura original a los tiempos que corren (estamos hablando de 2012), pero ofreciendo un toque mucho más oscuro y centrado en la narrativa. Si recordáis el original de 1992, recordaréis que tenía una paleta de colores demasiado viva, y con este remake íbamos a pasar a tonos mucho más apagados, a la vez que el equipo potenciaba mucho más la narrativa y le daba un estilo más cinematográfico.
A pesar de basarse en un juego muy conocido, había que hacer prácticamente todo desde cero, sobre todo para ajustarse a las nuevas mecánicas jugables. La esencia para el jugador sería muy parecida, pero a nivel de programación y diseño había que cambiar muchas cosas. El objetivo: "encontrar inspiración en el original pero dándole un giro moderno", en palabras de Colomb.
Este pequeño equipo estuvo trabajando durante más de un año en definir la jugabilidad, diseñar y construir los niveles, definir la dirección artística y, por supuesto, juntar todas las piezas y desarrollar el juego. Como decíamos, era un proyecto sin grandes valores de producción, y sólo se iba a lanzar en formato digital para Xbox 360, PlayStation 3 y PC.
El pequeño equipo hizo grandes progresos, y tanto el Eden Games como Atari estaban bastante contentos con el resultado. De hecho, incluso Sony (que vio el proyecto) alabó los resultados. El problema no era el juego así, sino que a Atari se le juntaron muchos problemas económicos en esta época, y la editora tuvo que tomar diferentes medidas drásticas; entre ellas, cerrar el estudio.
Eden Games desaparecía en 2013, y con su cierre llegaba la cancelación del remake de Alone in the Dark. Guillaume Colomb aseguraba que era "una gran experiencia, pero en el momento equivocado para la compañía". En 2014 Eden Games reabría sus puertas como un estudio independiente, por lo que ya no tienen acceso a las licencias de Atari. Por el momento se están centrando en juegos de conducción para dispositivos móviles, así que no parece que vayamos a ver pronto, al menos por su parte, el retorno de este proyecto perdido.
Apéndice:
Jugabilidad de una versión en desarrollo, con mucho todavía por hacer: