La opinión de jugón Vandal

La Opinión del Jugón

Cada semana, nuestro usuarios opinan sobre un tema o juego candente del mundo de los videojuegos.

Spectrum / Amstrad / MSX / Atari / Amiga / Commodore

Nuestros lectores nos hablan de sus experiencias con los microordenadores domésticos de los años 80.
Spectrum / Amstrad / MSX / Atari / Amiga / Commodore
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Actualizado: 21:31 17/8/2020

La Opinión del Jugón es una sección de carácter semanal en la que Vandal publica las opiniones vertidas en el foro sobre un tema propuesto. Cada viernes se presenta una nueva cuestión, noticia o texto para que los lectores ofrezcan sus puntos de vista. Destacamos los textos más representativos de la semana en este apartado, aunque todos los comentarios están disponibles en el hilo a tal efecto.

Esta semana preguntamos a nuestros lectores por su experiencia con los ordenadores en los años 80, Spectrum, Amstrad, MSX, Atari, Amiga o Commodore. ¿Qué recuerdan de estas plataformas y sus juegos?

Pregunta de la próxima semana: 25 años de Wolfenstein 3D.

● "Aaahhhh, aquí sí que me podría explayar largo y tendido...

Yo tuve (y aún lo tengo en alguna caja en el trastero) un MSX-2, que en su día fue una auténtica revelación, con un montón de juegos, tanto en cartucho como en cassette.

Los cartuchos eran de lo mejor, porque simplemente los insertabas y ya hacían autoarranque. Los cassettes, en cambio, necesitaban su reproductor, que era un periférico de venta por separado y que, dependiendo también de la duración del juego en cuestión, pues tardaba más o menos en cargar. Atención, porque estamos hablando de tiempos de carga de entre 15-30 minutos eh.

Y no sólo eso, sino que tenías que teclear en el famoso menú principal de pantalla azul de MSX-2 los comandos exactos para ejecutar el juego.

Los juegos podían llegar a ser muy divertidos a veces, y otras veces tediosos también, pero lo que es seguro es que fue una revolución gráfica y de entretenimiento casero.

Por otra parte, si lo que querías era utilizar el MSX-2 como herramienta de trabajo o como gestor de datos, siempre había programas de venta por separado que te permitían trabajar en casa o escribir lo que quisieras. BASIC era el lenguaje de programación más común por aquella época. Pero demos gracias a dios porque la tecnología haya avanzado tanto hasta nuestros días...". - Gatro

● "Solo probé 2 ellas:

- ATARI 2600. Me la compraron en un "moro" las tiendas chinas de aquellos tiempos, tenía creo unos 100 juegos en memoria. Infumable para un jugador, divertido para 2 jugadores, hermano, primo, vecino o con niño que acababas de conocer en la calle jajajaja!

- SPECTRUM. Comprar juego entre 2 en una papelería, copiarlo en una cinta de casette con un equipo de música para tu amigo. Ponerlo a cargar, jugar a la pelota, al volver no había cargado bien, rebobinar y ponerlo a cargar otra vez, jugar a la pelota. Listo para jugar, al empezar comprobabas que los gráficos no se parecían en nada a las imágenes de la caja y entender que el programador hacia los juegos difíciles a mala leche XD". - Robecop

● "La verdad, nunca me han interesado los microordenadores. No viví esa época y apenas me he acercado a ellos, no como a Atari 2600 o NES, que si las he dado su caña a pesar de ser de su quinta o incluso antes. Lo más cercano que he estado de este tema, ha sido con un viejo PC Inves del 89' con MS-DOS y 40 Mb de Disco Duro. Compartía varios juegos con el catálogo de Amiga, y los disfruté muchísimo desde mis cinco añitos hasta los once aproximadamente. La BSO de Prehistorik 2, Dark Ages y Mystic Towers siguen grabadas en mi mente a fuego. Ah bueno, y tengo para Spectrum el Arkanoid y el OutRun sólo por coleccionismo". - Francisco_Frankfurt

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● "Mi padre me dijo que en su juventud tuvo Comoddore 64 y no tengo mucho recuerdos y en MS_DOS jugué mucho al Pang". - daninudo

● "Cuando era pequeño no tenía ninguna máquina para jugar videojuegos. Me entusiasmaban de jugar ocasionalmente en un 286 de mi tío, del spectrum 48kb de mi tía, y de ser un fan de la película Tron.

Mis padres me sorprendieron comprando un Zx Spectrum 128 +2, del que no conocía nada salvo que debía ser mejor que el de 48 que había probado. Era un pack que traía joystick, pistola y algunos juegos. Obviamente lo eligieron porque era el más asequible y vieron en la tienda que tenía software para aburrir y barato. Fue todo algo tardío, porque ya estaba a la venta el modelo que tenía disquetera.

Durante unos cuantos años fue mi principal plataforma de juego (luego complementé con la Game Boy... y el pobre Spectrum tuvo que decir adiós cuando apareció la Super Nintendo). Mi padre compraba la Micro Hobby por las demos y los juegos completos que daban. Y luego yo por mi cuenta, como eran baratos, solía comprar algunos de saldo en grandes superficies.

Fue responsable de mi afición a las aventuras (La aventura original, Jabato, Abracadabra... o con algo de acción ocasional como La gran evasión), a los juegos de plataformas y exploración (Sir Fred, Phantomas 2, Dynamite Dan 2, Livingstone Supongo, El misterio del Nilo, Indiana Jones...) o juegos francamente abstractos (The sentinel, Plexar). También fue donde conocí a Mario (con una conversión del arcade Mario Bros.), a la posterior Rare (sabrewulf, jetpak) y disfruté mis primeros matamarcianos con Galaxian, Space Invaders y R-type.

Algo que se suele decir menos... es que era una máquina sensacional para los niños que querían hacer sus pinitos programando. Yo estudié programación muchos años después, porque hacía mis pequeñas aventuras de texto en Basic de peque y me gustaba probar cosillas de libros de programación con el sistema". - tonk

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● "El Amstrad CPC 6128 fue mi primer contacto con los videojuegos, lo compraron mis padres "para estudiar" Smilie Smilie Smilie

Gráficos coloridos, scroll brusco, un joystick que era muy poco fiable, músicas deliciosas... La verdad es que jugaba, pero no me apasionaba, era entretenido pero no te dejaba pegado al mando, y no me enganché de verdad al mundillo hasta que conocí el primer Mario en una NES clónica de unos amigos, el control con la cruceta era impresionante, así como la rapidez y suavidad del scroll. Ahí empezó mi historia de amor con los videojuegos.

Así que, aun reconociendo las enormes virtudes y el mérito de estas máquinas, nunca me han interesado demasiado ni he hecho retroarqueología en ellas. Prefiero quedarme con el recuerdo que tengo de Bomb Jack, Commando, Turbo Out Run, Abadía del Crimen, Navy Moves, Saboteur II, y demás clásicos que acompañaron mi primera infancia". - The Namec

● "El MSX, el Amiga y el Commodore 64 tienen juegos maravillosos, como el Metal Gear (MSX), los de Cinemaware (Amiga) o las primeras aventuras de Lucas (Commodore), pero los que me marcaron de verdad fueron el Amstrad y el Spectrum.

En 1986, mi padre, que no era aficionado a los videojuegos, me puso mi primer videojuego en un Spectrum que usaba para trabajar. El juego era el Cookie, de un cocinero que tenía que meter en un cazo la comida que iba saliendo de un armario.

En 1989, mi padre hizo otra maniobra inesperada que cambiaría mi vida para siempre: tras usar durante 3 años un Amstrad CPC 6128 de disco y monitor en color para trabajar, decidió comprarse un PC y ponerme el Amstrad en mi habitación. En los siguientes tres años, tuve más de 80 juegos, la mayoría seleccionados con muy buen criterio por el hijo de un amigo de mi padre. Entre ellos destacaría el Matchday 2, un juego de fútbol con elementos de juego de plataformas que incluso hoy en día aporta cosas originales, el Gryzor, una gran conversión del Contra, el Saboteur 2, un plataformas de ninjas con un mapa gigante en el que los cadáveres de los enemigos permanecían y la barra de energía se regeneraba, el Megacorp, una excelente aventura conversacional de ciencia ficción, el Rambo 3, un Metal Gear, y el Head Over Heels, un plataformas isométrico con una solidez y originalidad que siguen impresionando en 2017.

Pero eso no es todo: entre los 80 juegos estaba el Bruce Lee, un plataformas sencillo que integra un par de llaves de kárate, con la dificultad justa y que se puede jugar a dobles, el Cauldron 2, en el que manejas a una calabaza que bota por el suelo y debe explorar un castillo, La guerra de las vajillas, un conversacional que parodia La guerra de las galaxias, el Batman "the Movie", posilemente uno de los mejores juegos basados en una película de la historia, o el Yie Ar Kung Fu, un juegazo de lucha que se anticipa en varios años al Street Fighter 2.

En 1997, habían pasado 5 años desde que mi Amstrad dejó de funcionar. La única parte rota era la disquetera, pero eso no evitó que mi padre lo malvendiera en una tienda de antigüedades. Entonces, el Spectrum llegó al rescate. Mediante la emulación, pude volver a cargar muchos de mis juegos en su versión Spectrum, que en algunos casos era más rápida. El Spectrum me había devuelto el Amstrad, con cientos de juegos de propina.

En 2014, me compré un Amstrad por eBay. Irónicamente, la disquetera no funcionaba, por lo que tuve que usar un lector de tarjetas llamado HxCFloppyEmulator. Antes de eso, lo primero que hice para jugar a un juego fue teclear todo el código de un juego sencillo llamado Bombardero en la memoria RAM de la máquina y luego ejecutarlo con "RUN".

Pasado el tiempo, me doy cuenta de la importancia que tuvieron estos juegos en mi desarrollo cerebral: antes de haber visto una película de terror, mataba zombis en un cementerio en el Ghost N' Goblins. Antes de conocer la guerra, participaba en ella con el Commando. Y, antes de ver La guerra de las galaxias, un clon del Space Invaders llamado Space Hawks metió la sintonía de la película en mi cabeza para siempre.

Os recomiendo que apaguéis Internet y os sumerjáis en la emulación de una de estas máquinas, cargando juegos al azar, una experiencia especialmente mística en el caso del Spectrum. Podéis descubrir, como me pasó a mí, obras maestras de la aventura conversacional, como el Jabato, juegos de géneros totalmente únicos, como el How To Be a Complete Bastard, que consiste en hacer putadas, un strip poker esquemático pero extrañamente hipnótico o un juego de Alien con una mezcla inquietante entre aventura y estrategia que logra transmitir cierta angustia pese a que los gráficos se limitan al mapa y unas figuras esquemáticas.

La magia de estos juegos radica en que, en una época de innovación total en la que se estaban creando los géneros, estaban programados por dos personas o inculso una sola, en el caso de los Saboteur, el Manic Miner o las aventuras conversacionales, lo que les daba un toque mucho más personal. Echaos una partida al Saboteur o al Saboteur 2, juegazos que combinan plataformas, exploración, lucha y sigilo, aprovechando al máximo sus 4 colores en pantalla, y decidme que no se os cae la baba de pensar que lo ha programado un solo hombre escribiendo líneas de código, casi como Neo cuando veía Matrix.

Pese a que la historia sigue siendo reescrita día a día (no en vano, la escriben los vencedores), el catálogo de cualquiera de estos sistemas supera con creces en variedad y cantidad al de las consolas de la época, mucho más encorsetadas en juegos de plataformas 2D. Simplemente en Spectrum, existen cientos de juegos de aventura conversacional en español, una de las múltiples razones por las que la gente seguimos jugando a día de hoy.

Porque jugar en el presente a un buen juego no es nostálgico: es inteligente". - Obey

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● "Yo me inicié en 1988 con un Spectrum Sinclair ZX 128 K, tras probar en casa de un familiar en el 87 uno de 48K y alucinar...'

Estuve dando el coñazo durante un año entero, hasta que por fin me regalaron uno.

A diferencia del de 48K que probé, este funcionaba ya con diskettes, y mediante la ayuda de este familiar, también le pude acoplar un módulo de casette para poder jugar con los juegos que él tenía.

Ha sido sin duda una de las mejores experiencias y época "jugable" de mi vida...

Todo era nuevo para mí, no existían los circos mediáticos de hoy en día, y muchos juegos se compraban simplemente con mirar la carátula y si molaba el dibujo, se daba por hecho que el juego iba a ser la leche.

Recuerdo con cariño y aún hoy como grandes juegos cosas como:

- Saboteur II
- Thanatos
- Chicago's 30
- Barbarian II
- Goody
- Cauldron
- Lotus Turbo Esprit

Y muchos más, recuerdo flipar a lo bestia con el que fue mi primer juego port de arcade, Operation Wolf...

Por desgracia no conservo ya el ordenador Tristeza

Considero sin duda alguna, que gracias al Spectrum viví una de mis mejores épocas como jugador y que aprendí mucho como amante de este hobby gracias a él.

Ha sido grato recordar mis inicios en este hobby gracias a este post". - Scarr

Agradecemos a todos los usuarios –reflejados en este resumen o no- que han participado esta semana con sus opiniones, y os animamos a colaborar con los próximos temas.

Ramón Varela
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