Cuando llegas a la misión principal Aprendiendo el oficio, el juego te da una serie de indicaciones sobre el barco: cómo manejarlo, entrar en combate, etc.
Sin embargo, tu barco no es algo que simplemente está ahí para navegar, luchar y ya está. No. Requiere de una cierta gestión.
Controles del barco
- Aceleras con equis (PS4).
- Te mueves con el stick izquierdo.
- Puedes acelerar y empujar en una dirección concreta para embestir otros barcos.
- Si consigues golpear el lateral de otro barco, es posible destruirlo al instante.
- Puedes saquear naufragios y conseguir recursos directamente al pasar sobre ellos, como si fueras a pie.
- Puedes desplegar las velas (cuadrado en PS4) para que los remeros descansen e impulsarte con el viento.
- Puedes lanzar jabalinas (R2 en PS4) o flechas de fuego (se apunta con L2, se disparan con R2 en PS4).
- Una vez haces suficiente daño al barco, sea embistiendo o con tus armas, puedes abordarlo (manteniendo triángulo pulsado en PS4, cuando veas la señal).
- Elimina a los tripulantes del barco para dar por exitoso el abordaje y vuelve al Adrastea.
Mejorar el barco
Tu barco tiene sus propias Mejoras que hacen que sea más resistente, ahga más daño o incluso desbloquees nuevas funciones. Todas las mejoras requieren una cantidad determinada de materiales y dracmas.
Arsenal
- Lluvia de flechas: las mejoras hacen que puedas hacer más ataques consecutivos y reducen el tiempo de recarga.
- Lanzamiento de jabalina: las mejoras hacen que puedas hacer más ataques consecutivos y reducen el tiempo de recarga.
- Braseros: el primer nivel desbloquea las flechas de fuego. Las mejoras añaden más disparos de fuego y hacen que las naves enemigas prendan antes.
Daño de armas
- Flechas: las mejoras aumentan el daño causado y la posibilidad de crear puntos débiles en los barcos enemigos.
- Espolón: las mejoras aumentan el daño causado y la posibilidad de crear puntos débiles en los barcos enemigos.
- Jabalinas: las mejoras aumentan el daño causado y la posibilidad de crear puntos débiles en los barcos enemigos.
Resistencia del barco y la tripulación
- Casco: las mejoras aumentan la salud del barco, sus defensas y los espacios para colocar lugartenientes.
- Resistencia de los remeros: las mejoras aumentan la resistencia de los remeros y la velocidad a la que ésta se recarga.
- Defensa de la tripulación: las mejoras reducen los daños al sujetarse y el daño por fuego cuando te defiendes.
Lugartenientes especiales
En estos espacios puedes colocar a los lugartenientes que se hayan unido a ti al capturarlos en combate. Cada uno añadirá al barco sus propios efectos y mejoras especiales, así que elige bien a quién pones.
El número de lugartenientes que puedes asignar aumenta con el nivel del casco: a mayor nivel del casco, más lugartenientes puedes tener.
Reclutar lugartenientes
Te interesa dejar para el final del abordaje a los capitanes del barco, esos que tienen nombre y no son simples soldados. Para reclutarlos, lo que debes hacer es acabar con ellos usando la Patada espartana, ¡ten cuidado de no tirarlos al agua! Si agotas su barra de vida con este ataque, quedarán inconscientes.
Evita atacar cerca de ellos porque, aunque estén KO, si les golpeas mueren. Ahora despeja la cubierta y cuando no queden más enemigos, acércate al capitán inconsciente y pulsa L3 (en PS4) para reclutarlo inmediatamente.
Puedes hacer exactamente lo mismo en tierra firme. Es decir, en vez de matar a un enemigo, lo dejas KO (tanto con la Patada espartana como con cualquier habilidad) y lo reclutas.
Conseguir tablillas antiguas
El único material que te costará conseguir para aplicar las mejoras al barco son las Tablillas antiguas. Las encontrarás en algunos de los fuertes de las regiones por donde pases.