El lanzamiento de Transformers: War for Cybertron en el 2010 fue toda una sorpresa que nos pilló a todos desprevenidos. Los robots transformables de Hasbro llegaron irrumpiendo fuerte con un título que desprendía calidad y buen hacer por los cuatro costados, algo inesperado teniendo en cuenta los discretos juegos que habían protagonizado anteriormente. Sin necesidad de una película que lo avalara, War for Cybertron nos transportaba muchos años antes de que los Transformers llegaran a la tierra y nos contaba la cruenta batalla que tuvo lugar entre los Autobots y los Decepticons en Cybertron, el planeta natal de estos seres mecánicos.
Se trataba de un juego de acción en tercera persona que puso el listón bastante alto dentro de la saga, gracias a una jugabilidad que conseguía enganchar fácilmente y a una dirección artística ejemplar.
Como era de esperar ante este éxito, High Moon Studios, los desarrolladores de War for Cybertron, anunciaron hace poco Transformers: Fall of Cybertron, una secuela directa en la que seremos testigos del final de esta larga guerra.
La semana pasada pudimos asistir a una primera presentación jugable en Londres donde sus creadores nos mostraron una demo guiada y en la que pudimos descubrir muchas de sus novedades. Por lo que hemos podido ver, nos encontramos ante un título que retoma la base jugable de War for Cybertron y la expande y mejora, solucionando sus puntos más negros.
¡Decepticons, desplegaos!
La demo comenzaba con una sección del juego protagonizada por Vortex, un Decepticon que puede transformarse en helicóptero y jet, además de ser uno de los Combaticons. En ella se tenía que enfrentar a un gran número de Autobots tanto por tierra como por aire. Aquí pudimos ver como el combate aéreo se ha mejorado, haciéndolo más versátil y aumentando la potencia de fuego de nuestras armas cuando estamos en forma de vehículo, por lo que se nos anima a luchar en este estado, a diferencia de la entrega original, donde acababa siendo más práctico transformarse en robot y destruir a nuestros objetivos desde tierra.
En cuanto al combate a pie, se parece bastante al de War for Cybertron, con algunos añadidos como nuevos poderes o la posibilidad de cambiar la mano del arma para apuntar mejor. El sistema de salud también ha sufrido cambios y ahora se basa en uno de blindaje y salud tradicional, simplificándolo para que todos los jugadores puedan entenderlo a la primera, ya que según nos cuentan, el de la primera parte (el cual estaba estructurado en porciones de vida) provocó algunas confusiones iniciales entre varios jugadores.
La segunda parte de la demo estaba destinada a mostrarnos una de las grandes novedades de esta entrega: Bruticus. Se trata de un gigantesco Decepticon formado por la combinación de cinco Combaticons, lo que da como resultado una enorme mole metálica con un poder destructivo totalmente descomunal. En esta secuencia jugable pudimos ver a Bruticus arrasando una base Autobot entera él solo, destrozando a todo lo que se le ponía por delante. Debido a su tamaño, era un blanco fácil y su movilidad era bastante lenta y torpe, aunque podía defenderse con un escudo que creaba haciendo girar las hélices de Vortex, que es el Combaticon que forma su brazo izquierdo.
¡Autobots, avanzad!
Tras esta escena de pura acción y destrucción sin límites, la tercera secuencia de la demo estaba protagonizada por Cliffjumper, un Autobot que puede transformarse en un coche. En ella no había disparos, simplemente se encontraba con un artefacto antiguo. Al activarlo se elevaban unas escaleras en espiral en torno a una columna y lo rodeaba una imagen virtual de la galaxia, donde se veían diversos planetas y constelaciones a medida que subía. Este tipo de momentos estarán destinados a mostrarnos la historia de una manera más interactiva, profundizar en su argumento y darnos un respiro entre tanta acción.
Continuando con Cliffjumper, podemos comprobar cómo su jugabilidad apuesta por la infiltración y el sigilo, en vez de por la acción directa. Cuenta con la habilidad única de volverse invisible, lo que le permite acometer estas tareas con mayor facilidad. Precisamente por este tipo de momentos, la Inteligencia Artificial del juego se ha mejorado (de hecho se ha rediseñado desde cero), y ahora podremos ver ciertos enemigos que con sus formas nos indicarán lo que están pensando, de manera que podamos anticiparnos a sus movimientos.
Por ejemplo, hay un tipo de robot que cuando está en modo exploración, lo veremos escaneando la zona mientras mantiene una forma alargada y ágil. Cuando está en este modo nos puede detectar aunque estemos invisibles, por lo que tendremos que tener cuidado de no ponernos frente a su escáner. En cambio, si nos descubre entrará en modo combate y adoptará una forma mucho más pesada y compacta con grandes cañones incorporados.
Aquí también pudimos comprobar que si conseguimos colocarnos en la espalda de un enemigo se nos permitirá ejecutarles silenciosamente pulsando un botón, aunque habrá que hacerlo con cuidado, ya que esto puede llamar la atención del resto de rivales de la zona y hacer que nos busquen con más ahínco.
La demo continúa con Optimus Prime, el carismático líder de los Autobots que se puede transformar en un camión y que es probablemente el más famoso de todos los Transformers. En esta parte podemos presenciar un épico asedio a la ciudad de Iacon, la capital de los Autobots y que ahora está tomada por los Decepticon. Para llevar a cabo tamaña tarea, Optimus despierta el poder de Metroplex, un antiguo titán de Cybertron de dimensiones descomunales al que podremos ordenarle que derribe algunos puntos estratégicos.
Otra de las novedades que nos presentan a los mandos de Optimus Prime es la de la personalización de las armas. Desde ciertas terminales podremos acceder a nuestro menú de armas, las cuales podremos ir mejorando para hacerlas más efectivas en combate. Estas mejoras se alejan de las clásicas estadísticas de puntería, potencia o velocidad de recarga, por lo que a cambio nos ofrecen nuevos efectos con los que personalizar nuestra experiencia de juego. Por ejemplo, una de las armas que nos mostraron disparaba un rayo de energía en línea recta, pero con una mejora vimos como al impactar se expandía y atacaba también a los enemigos cercanos, ganando propiedades de daño en área y convirtiéndola en una herramienta mucho más útil para afrontar combates multitudinarios.
Finalmente, la última sección jugable de la demo estaba destinada a mostrarnos a los Dinobots, posiblemente la novedad que más expectación ha despertado entre los fans, y con razón. El protagonista aquí es Grimlock, un Autobot capaz de adoptar la forma de Dinobot y convertirse en un gigantesco T-Rex. Lo primero que nos llama la atención es su estilo de combate cuando está en forma de robot. En vez de apostar por las armas a distancia, Grimlock se enfrenta a sus enemigos con una espada y un escudo, lo que le permite realizar combos y que la jugabilidad se asemeje a la de un hack'n slash.
En la esquina inferior derecha de la pantalla podemos ver un medidor que se va rellenando conforme va matando enemigos. Una vez está completa, Grimlock consigue convertirse en Dinobot, ganando un poder destructivo altísimo y nuevas habilidades, como la posibilidad de lanzar fuego por la boca y chamuscar a todo ser viviente. Solo vimos unos pocos segundos de esta forma, aunque fueron suficientes para hacernos una idea de lo devastadora que resulta, ya que acababa con los enemigos como si fueran mantequilla. En total habrá cinco Dinobots distintos, como Snarl, cuya transformación es un estegosaurio, aunque no nos han querido decir mucho más para no arruinar sorpresas.
Para terminar esta presentación, nos enseñaron el sistema de personalización de personajes para el modo multijugador. Podremos escoger entre cuatro tipos distintos de robots: Infiltrator, Destroyer, Titan y Scientist. Cada uno de ellos podremos equiparles con un gran número de piezas distintas para cambiar su apariencia, algo que luego veremos reflejado también en su transformación en vehículo. De momento se desconocen sus modos multijugador, aunque sus desarrolladores nos han asegurado que están trabajando en un sistema que permita ganar al que juegue mejor y no al que se fabrique el mejor robot, ya que quieren hacer algo que suponga diversión rápida y directa y no nos obligue a estudiar todas las combinaciones posibles, como ocurre en juegos como Armored Core.
Una Cybertron destrozada
En cuanto a los gráficos, estos siguen estando a un buen nivel, algo que se ve engrandecido por la soberbia dirección artística que posee. Podremos apreciar el impacto que está teniendo la guerra sobre el planeta con un simple vistazo a los escenarios, los cuales se muestran mucho más derruidos y devastados que en la primera parte, aunque siguen siendo igual de imponentes. Realmente nos harán sentir que estamos en Cybertron gracias a la fiel recreación de su particular estilo visual.
Otro detalle gráfico a destacar son las transformaciones, totalmente fluidas y espectaculares. Ver a Grimlock convirtiéndose en T-Rex o a los Combaticons combinándose para crear a Bruticus llega a ser un regalo para la vista y un espectáculo digno de las películas. Eso sí, se nota que el título está todavía en una fase algo temprana de su desarrollo, ya que hemos encontrado algo de clipping, algunas texturas mejorables y unos efectos de luz que necesitan todavía mucho trabajo, algo que esperamos que cambie cuando salga a la venta este otoño.
Respecto a la banda sonora, hemos podido escuchar bastante poco, aunque mantiene un estilo similar a la que pudimos escuchar en War for Cybertron, aunque en esta ocasión se apuesta algo más por temas con un corte más épico.
Como habéis podido comprobar por lo escrito en estas impresiones, Transformers: Fall of Cybertron ofrece una gran cantidad de situaciones que prometen aportar mucha variedad a su desarrollo, solucionando así uno de los mayores errores de la primera entrega: su repetitividad. Tendremos acción, combates aéreos más dinámicos, Dinobots, combinaciones de Combaticons, momentos de relax para disfrutar de la historia, sigilo y mecánicas jugables y habilidades únicas para cada Transformer. Además, nos han asegurado que su duración será mayor. En definitiva, este primer vistazo nos ha dejado muy satisfechos y no podemos esperar al momento de hincarle el diente para comprobar si finalmente cumple con todo lo que promete.