Uno de los juegos que estaban disponible en el X10 de Microsoft fue Splinter Cell: Conviction, el juego de Ubisoft, que nos trae de nuevo al agente Sam Fisher, pero esta vez mucho más oscuro que nunca. En el evento había una demo que nos permitía jugar lo que parecían los dos primeros capítulos del juego, ya que estaba integrado el tutorial. La nueva entrega del agente secreto de Tom Clancy ofrece interesantes novedades que os pasamos a contar.
La historia se sitúa tiempo después de la última entrega, con un Sam Fisher destrozado por la muerte de su hija a manos de un conductor que se dio a la fuga después de atropellarla. Vive amargado por los recuerdos, pero todo cambia cuando encuentra una pista que le lleva a aquel que la asesinó y decide ir en su busca para cobrarse su venganza. Aunque ya no pertenece a Third Echelon, Sam aun conserva sus habilidades, lo que unido a que ahora sólo le guía la venganza le hace más peligroso que nunca.
Y es que el San Fisher de Conviction es más salvaje que nunca, y no duda en golpear a un hombre hasta llevarlo al borde de la muerte para que confiese. Por lo que vimos en la demo, la forma de contar la historia será muy especial, ya que además de algún flashblack, nos encontramos con que en ciertos momentos se proyectaban escenas de cosas que habían sucedido en otro momento o recuerdos en una pared, como si saliesen de un proyector de cine. Sin duda es un recurso muy original que no sabemos si estará presente durante todo el juego o sólo al comienzo.
Más letal que nunca
El que Sam Fisher sea un personaje más oscuro no sólo repercutirá en el guión del juego, sino que tendrá efectos directos sobre la jugabilidad, haciendo que sus acciones sean más duras que antes o que en ciertos momentos se salte el sigilo (aunque siempre será importante de cara a descubrir a nuestros enemigos con la guardia bajada). En este apartado el juego trae interesantes novedades. La primera es la "última posición conocida", que hace que cuando nos descubren aparezca una silueta nuestra en el último lugar donde hemos sido vistos. A partir de ese momento, los enemigos de la zona se dirigirán hacia esa silueta e incluso dispararán sobre ella en ciertos momentos, suponiendo que todavía estamos cerca. Desde el punto de vista jugable esto tiene muchas posibilidades, pues podemos jugar con ese último rastro que hemos dejado para alejarnos y pillar por la retaguardia a los que nos persiguen.
La otra gran novedad del título es "marcar y ejecutar", una nueva habilidad que nos permitirá acabar con varios blancos de forma rápida. Para conseguirlo primero tenemos que matar a alguien usando nuestras manos, lo que nos permitirá activar la habilidad. Después de eso, deberemos localizar nuestros blancos, dos en principio (eso es lo que nos permitía la demo), aunque según avancemos por el juego parece que esta cifra se irá implementando. Cuando los blancos estén marcados aparecerá un símbolo sobre los enemigos, blanco significa que están muy lejos para ser ejecutados y rojo que podemos hacerlo, y una vez todos estén de ese color, pulsaremos ‘Y’ y Sam Fisher, de forma automática, acabará con ellos de dos disparos. Lo bueno de este sistema es que nos permite asesinar con gran rapidez, de forma que los guardias no se alertan con las muertes. Además, en los momentos en los que debamos enfrentarnos a varios enemigos al mismo tiempo, es tremendamente útil, ya que podremos quitarnos a varios de una sola vez. Además, el sistema está bien equilibrado, ya que no podremos usarlo siempre que queramos, sino solamente después de haber causado una muerte con nuestras manos.
Al margen de estas novedades, Splinter Cell: Conviction sigue fiel a la mayoría de sus señas de identidad. Sigue siendo vital escondernos en las sombras para pasar inadvertidos. Cuando lo hagamos, la pantalla se pondrá en blanco y negro para indicarnos que nadie puede vernos. Para conseguir estas sombras será importante jugar con el entorno, ya sea apagando luces o destruyéndolas directamente. También podremos interactuar con el escenario de otras formas, por ejemplo rompiendo una lámpara para que caiga sobre nuestros enemigos o haciendo ruido (algo que hará que seamos descubiertos) si lanzamos a nuestros enemigos sobre ciertas superficies, como un coche (su alarma se activará) o una mesa llena de botellas.
Mira antes de entrar, nunca sabes que te espera al otro lado
A lo largo del juego, Sam Fisher irá encontrando un buen arsenal de armas por el camino, las cuales podrá mejorar a cambio de puntos que ira ganando según vaya cumpliendo varios objetivos de la misión, los cuales suelen implicar matar e alguna forma concreta. Pero aunque el armamento disponible nos permita entrar a matar y, si somos buenos, sobrevivir, las cosas son mucho más fáciles si vamos con cuidado y nos aseguramos antes de entrar en cada habitación Una forma de hacerlos será usando un espejo por debajo de la puerta, lo que nos permitirá conocer la situación con exactitud y estar preparados. Una cosa curiosa del juego es que todos los mensajes del tutorial e indicaciones de la misión están integrados con el escenario, de forma que los textos aparecen en las paredes o en ciertos objetos. Sin duda un detalle muy curioso.
Gráficamente el juego luce estupendamente, con unos modelados, tanto de Fisher como de los enemigos, muy buenos. De estos últimos hemos de decir que nos encontramos con bastante variedad en sus caras y sus vestimentas, lo que ayudaba a darle más realismo a la situación. Por otra parte, Sam se ve mejor que nunca, con unas animaciones aún más cuidadas. Los escenarios, por su parte, cuentan con un gran nivel de detalle, y nos encontramos con bastantes objetos por doquier, como libros, copas, botellas, etc. Además, todos ellos serán destructibles, lo cual además afectará a la jugabilidad, pues su ruido puede alertar a los guardias.
Sam Fisher regresa y lo hace más oscuro que nunca, lo que repercute en el juego, tanto en su historia como en su jugabilidad. La toma de contacto que hemos tenido con el juego, superando las dos primeras misiones del juego, ha sido muy buena, y creemos que el retraso que ha sufrido el título finalmente valdrá la pena. En esencia sigue siendo el mismo Splinter Cell, pero sus dos grandes novedades ("última posición conocida" y "marcar y ejecutar") además de su considerable mejora técnica, hacen que nos encontremos con un juego que no es más de lo mismo. Sin duda los aficionados del género y del agente Fisher en general, están de enhorabuena.