El pasado mes de febrero pudimos ver por primera vez en directo la nueva entrega de Sniper Elite, que nos causó muy buenas sensaciones, y ahora hemos podido jugarlo por primera vez, superando dos de sus misiones. Sniper Elite fue un juego de 2005 que salió para Xbox, PlayStation 2, PC y Wii desarrollado por los británicos Rebellion Developments, que también se encargan de esta nueva entrega. Este juego consiguió crear una fiel legión de seguidores, a los que encantó su propuesta, y que seguro esperan con ganas esta segunda parte, que realmente no es una continuación, sino una reimaginación o reinicio del original, llevando la saga a la alta definición.
La historia nos pondrá en el papel Karl Fairburne, un agente secreto de la OSS -Oficina de Servicios Estratégicos-, el servicio de inteligencia de los Estados Unidos de América durante la Segunda Guerra Mundial. Tu misión será infiltrarte en Berlín en 1945, durante los días finales de la guerra, con la ciudad medio en ruinas y a punto de caer, con el objetivo de reclutar a unos científicos de la Alemania nazi que participan en el programa de cohetes V2. Desarrollado a principios de la guerra en Alemania, fue el primer misil balístico de combate de largo alcance del mundo y el primer artefacto humano conocido que hizo un vuelo suborbital, el progenitor de todos los cohetes modernos incluyendo los utilizados por los programas espaciales de Estados Unidos y la Unión Soviética.
Pudimos jugar dos misiones, en la primera de ellas teníamos que detener un convoy con un científico, para robarle unos planos importantes, y en la segunda subir alto lo alto del campanario de una iglesia, donde por desgracia había caído una importante información lanzada desde el aire. Para quienes no leyerais nuestras anteriores impresiones, o no probasteis el juego de 2005, deciros que estamos antes un título de acción en tercera persona donde tenemos que medir cada paso, cada disparo, y en el que cada enemigo puede ser un desafío en sí mismo. Olvidaros de la mayoría de títulos de acción en tercera persona aparecidos en esta generación, con tiroteos frenéticos de cobertura en cobertura, aquí somos un agente secreto y debemos pasar lo más desapercibidos posible, por la cuenta que nos trae.
Llevamos tres tipos de armas, que podemos elegir antes de empezar la misión: el imprescindible rifle francotirador, un fusil o metralleta para la media distancia, y una pistola. Como iremos descubriendo al poco de empezar a jugar, tenemos que evitar los enfrentamientos cara a cara, ya que estamos ante un juego muy realista en el que con un par de disparos podemos morir, y donde más cómodos nos encontraremos siempre es desde lejos, sorprendiendo a los soldados enemigos con un disparo a decenas de metros. Habrá ocasiones en las que no nos quede más remedio que hacer uso de la pistola o la metralleta, por ejemplo cuando estemos dentro de un edificio, o nos hayan descubierto.
Debemos movernos por las calles de Berlín intentando hacer el menor ruido posible, ya que nunca sabemos dónde se puede esconder un enemigo, ya que no hay ningún mapa ni radar que nos lo indique, y ese simple hecho hace que juguemos con una tensión tremenda, también gracias a la buena ambientación sonora, con una música que nos mantiene en vilo. Habrá que evitar correr, ya que en calles vacías hacemos mucho ruido, aunque en algunas misiones habrás que usar el ruido a nuestro favor. Por ejemplo si se está produciendo un bombardeo, o suenan las campanas de una iglesia, será un buen momento para disparar ya que no alertaremos a nadie –al menos sonoramente- con el disparo.
El simple hecho de disparar con el rifle francotirador en este juego es una gozada, gracias a la Kill Cam, una cámara que sigue toda la trayectoria del disparo hasta el cuerpo del enemigo, viendo después en una especie de visión de rayos X cómo el proyectil impacta o atraviesa alguno de los órganos vitales o los huesos. Hemos visto ya bastantes de estos disparos, y no nos cansamos de ver más. Hemos llegado a impactar en el corazón, en un pulmón, atravesado costillas, partido tobillos y brazos, y hasta despedazar el cráneo de diferentes maneras, entrando por la nariz o "rapándole el pelo", rompiendo toda la parte superior de la cabeza. Todo eso suena muy gore, pero hemos querido ser muy explícitos para que entendáis mejor cómo son estos disparos, lo mejor del juego, o al menos lo más espectacular. Pese a que puede sonar un poco gore y desagradable, se ha representado en pantalla de manera elegante y no demasiado sangrienta, y no creemos que hiera ningún tipo de sensibilidad.
Además las balas podrán atravesar los cuerpos, con distintas consecuencias, como que la bala puede impactar en un segundo enemigo, o que incluso acabe reventando una granada del cinto del soldado, con lo que ello conlleva. Esto nos pasó una vez con un grupo de tres soldados, ocasión en la que tuvimos mucha suerte y la bala entre por un costado y salió por el otro dando en una granada, volando el grupo de nazis por los aires. Claro realizar estos disparos no es fácil, y tendremos que colocarnos bien, tener nervios de acero y muy buena puntería, algo que dependerá del nivel de dificultad elegido, que puede variar la experiencia jugable por completo.
Cuando vamos a disparar podemos usar una importante función que nos hace mantener la respiración, controlar el pulso, y que el disparo sea mucho más preciso, y claro solo durante unos pocos segundos. Cuando jugamos en la dificultad por defecto, al hacer esto un rombo rojo nos indica dónde va a impactar la bala realmente, que claro no es precisamente a donde estamos apuntando. Hay que tener en cuenta que con tanta distancia y el efecto del viento, se produce una desviación y caída de la bala, y esta ayuda nos salva la papeleta. Eso sí, si estamos muy nerviosos, porque nos han herido o hemos vivido un intenso tiroteo, las pulsaciones estarán muy altas y no podremos hacer uso de esta función. Y a quienes les gusten las emociones fuertes podrán elegir la dificultad Sniper Elite, donde no tendremos ningún tipo de ayuda y tendremos que calcular el disparo a ojo. Jugando de esta manera tampoco podrás marcar a los enemigos con los prismáticos, una función muy práctica que te permite tener controlados los soldados del entorno, y además si te matan empezarás la misión desde el principio, y no habrá puntos de control. Un modo que casi nos parece para masocas, a la vez que estimulante, pero que seguro encontrará sus adeptos.
Cuando demos con una situación en la que tengamos que acabar con un grupo más o menos numeroso de enemigos, más nos vale que nos preparemos una buena estrategia. Situarnos en un lugar elevado y cómodo, que sea poco accesible, y poder anticiparnos a sus movimientos en caso de que los alertemos, colocando minas a nuestro alrededor, por si descubren dónde estamos. Pero las cosas se pondrán muy difíciles si aparece algún vehículo en escena como un tanque. Podemos acabar con ellos si hemos colocado explosivos como dinamita, pero si no lo hemos hecho habrá que disparar en la tapa del combustible, un pequeñísimo tapón de color rojo que dependiendo del vehículo está en un lugar u otro. A veces es muy complicado disparar en ese punto, porque no lo vemos, y hay que ser pacientes, aunque una vez que nos han localizado, con un cañón de un tanque apuntando a la ventana en la que nos encontramos, cuesta no perder los nervios.
Estos enfrentamientos son tensos, emocionantes, como otras muchas situaciones en el juego. El ir por un lugar en guerra, en el que estamos completamente solos rodeados de soldados enemigos, sin conocer su posición, hace que nos volvamos casi paranoicos. Tenemos que ir con los sentidos en el alerta, estar pendientes de cualquier destello que nos puede indicar un francotirador, escuchar cualquier pequeño ruido por pequeño que pueda parecer, y estamos sin duda ante un título de acción único, aunque puede que no tenga unos valores de producción enormes, tiene un encanto tremendo.
También tendremos modos multijugador, competitivos y cooperativos, aunque todavía desconocemos sus detalles. No sabemos si podremos jugar la campaña acompañados o serán misiones aparte, y si se podrá jugar a pantalla partida desde la misma consola, pero puede ser muy emocionante pegar tiros desde decenas de metros junto a un amigo. Cuando acabamos las misiones tenemos unas completas estadísticas de lo que hemos hecho, como la muerte más lejana, el total de metros de estas, el mejor disparo, y puede que haya cierto factor rejugable por conseguir la mejor puntuación posible. También hay 100 lingotes de oro repartidos por todo el juego, a modo de coleccionable, y 37 botellas de vino que deberemos romper con un disparo, si las encontramos.
Los amantes de la Segunda Guerra Mundial y aquellos que siempre se hayan sentido atraídos por el papel que jugaron los francotiradores, aquí tienen un título que deberían tener muy en cuenta. Avanzar con cuidado y sigilo, observar el escenario para elegir la mejor ruta para avanzar, estudiar el comportamiento enemigo para elaborar estrategias de "caza", emocionantes enfrentamientos cuando nos topamos con un tanque, permanente sensación de tensión al estar solos ante el peligro, los espectaculares tiros con la Kill Cam, etcétera. Estamos ante un juego con muchas cosas positivas, y hasta el momento muy pocos defectos evidentes, que cuenta con mucha personalidad y es muy diferente al resto de propuestas de acción. Podemos estar ante una agradable sorpresa y ya queda muy poco para su lanzamiento, el próximo 4 de mayo en PlayStation 3, Xbox 360 y PC.