La historia de este juego comenzó en el E3 del año pasado, cuando High Voltage, creadores de, entre otros, The Conduit para Wii, anunciaron Gladiator A.D., un juego de lucha uno contra uno en el que encarnábamos a un gladiador y luchábamos de forma salvaje en una arena. Tras las primeras imágenes e informaciones, no se volvió a saber nada del título, hasta que hace no demasiado High Voltage anunció Tournament of Legends, un lavado de cara del título mostrado en el E3 (aunque manteniendo su esencia). Durante nuestra visita a la Games Developer Conference hemos podido quedar con los chicos de High Voltage, quienes nos han enseñado su juego y nos han permitido echarnos unas partidas contra ellos.
Hablando con sus desarrolladores, nos han contado que la primera intención era ofrecer un juego con estilo realista, de forma que pudieran sacarle provecho a las capacidades técnicas de la Wii. Pero llegado un momento decidieron optar por algo más fantástico, y así fue como nació Tournament of Legends.
El argumento del juego es bastante simple: un grupo de seres mitológicos lucha entre sí para convertirse en el rey de los dioses, título que ahora ostenta Thanatos, el dios de la muerte, al que tendrán que derrotar para hacerse con él. Según nos contaron cada personaje tendrá su propia personalidad e historia, que se irá contando por medios de escenas con estilo comic.
Conviértete en el rey de los dioses
En la versión que jugamos teníamos diez personajes, dos de ellos bloqueados por el momento. El plantel es sin duda muy peculiar, ya que nos encontraremos con un soldado romano, a Júpiter el dios griego, una valkiria, un guerrero japonés acompañado d un demonio, un autómata manejado por un científico, Bast, la diosa gata egipcia, un minotauro pacifista y a Medusa. Sin duda un grupito muy variado que le da un toque de originalidad al juego. Cada uno de estos personajes tiene sus propias armas, aunque cada una será de un tipo y algunos personajes comparten este tipo. Así, una vez venzamos a uno de los enemigos que tengan un arma de nuestro tipo, podremos elegirla desde el menú de selección de personajes.
Tournament of Legends es un juego de lucha uno contra uno, pero bastante diferente a otros juegos del género. De entrada el repertorio de movimientos es algo limitado, centrándose un poco más en la estrategia de los combates más que en la realización de movimientos. Así, tenemos los golpes normales agitando el mando, uno horizontal y otro vertical, ambos con dos posibilidades, golpe normal y golpe fuerte (este pulsando B mientras agitamos el mando). También podremos arrojar nuestro arma con el botón C, cubrirnos con Z y realizar magias si pulsamos A y la palanca de dirección al mismo tiempo (hay tres posibles magias para cada personaje). Aunque tengamos magias, no podremos usarlas indiscriminadamente, ya que tendremos una barra de magia que se gastará cuando las usemos (y se irá rellenando poco a poco según pasa el tiempo), por lo que habrá cierta estrategia en su uso. Hemos de decir que aunque nosotros lo probamos con el mando de Wii y el nunchuck, también se podrá jugar con el mando clásico de la consola.
Un detalle que nos llamó la atención es que alrededor de los personajes hay un círculo que nos indica el rango de nuestros ataques, de forma que es más fácil saber si nuestros ataques alcanzarán a nuestro enemigo o no. Aunque no hay demasiado problema con esto, si es cierto que debido a la perspectiva del juego (no es lateral como en un juego de lucha normal, sino más elevada) a veces se pierden un poco las distancias, con lo que esta referencia viene muy bien. En general Tournament of Legends es un juego más pausado, más estratégico, donde no hay combos ni combinaciones complicadas, y se basa más en dar el ataque adecuado en el momento apropiada.
Cuidado con el guardián de la arena
Las batallas se celebran en distintas arenas, cada una con una ambientación diferente que suponemos que pertenecerá a cada uno de los personajes del juego. En cada una de estas arenas habrá un guardián que de forma aleatoria hará acto de presencia en la arena, debiendo hacer el movimiento que nos indique el juego para evitar el ataque del guardián, pues de lo contrario sufriremos daño. Los combates se dividirán en rondas, como un combate de boxeo. Ganaremos si tumbamos a nuestro rival tres veces al suelo y, si se acaba el tiempo sin que esto haya ocurrido, pasaremos a la segunda ronda. Entre ambas rondas tendremos la posibilidad de recuperar vida o arreglar nuestra armadura (según nos golpeen iremos perdiendo golpes de la misma), algo que haremos agitando el mando y moviendo la palanca de control.
Gráficamente el juego luce bien, aunque no hay grandes alardes técnicos. Los personajes se ven bien y cuentan con un diseño interesante, aunque sus animaciones no son tan suaves como nos gustaría, aunque en general cumplen. Los escenarios, por otra pate, son bastante detallados y tienen su propia personalidad, y el guardián que sale de vez en cuando acaba llenando toda la pantalla. El punto negativo es que la resolución del juego no parece muy elevada, algo que afea un poco el apartado gráfico.
Nuestra primera toma de contacto con Tournament of Legends ha sido buena, aunque pensábamos que íbamos a encontrar otra cosa. Creíamos que tendríamos un juego de lucha más, pero nos hemos encontrado con un juego más estratégico y pausado, donde lo importante no es hacer combos, sino elegir bien nuestro movimiento, aunque también podemos dar golpes sin más, claro. Aún tendremos que esperar a poder jugar a fondo al juego para comprobar bien la estrategia del título, pero de momento creemos que es una propuesta interesante que puede resultar muy divertida.
