Aunque no tan extendidos como los juegos de lucha más típicos, los títulos de lucha libre han estado siempre en el mercado. Normalmente buscaban un realismo mayor que el visto en sagas como Street Fighter o Fatal Fury, lo que se traducía en juegos más lentos y técnicos, y esta tendencia se ha ido cumpliendo incluso hoy en día, con trabajados juegos que cuentan con plantillas reales, licencias de campeonatos y una más que buena recreación de los movimientos de los luchadores reales. Ahora llega un juego que sin querer abandonar del todo la fidelidad, busca un toque más arcade y más accesible a este tipo de juegos, Supremacy MMA. Si hace unas semanas os contábamos que habíamos podido ver el juego, ahora os traemos nuestras primeras impresiones tras haberlo podido jugar, y hemos de decir que la cosa ha mejorado mucho.
Una historia de superación
Supremacy MMA apuesta por combinar el realismo de la lucha libre con algunas licencias para hacerlo más accesible y espectacular. Esto se ve también en la historia de los luchadores, algunas reales (ya que cuentan con luchadores famosos) y otras ficticias. En todas ellas el denominador común es comprender las motivaciones que han llevado a cada uno de los combatientes a luchar, haciendo que nos metamos más en su piel.
Estas historias estarán contadas mediante secuencias estéticas con estilo cómic y con voces que nos llegarán con subtítulos en castellano. Además, por primera vez en un juego de lucha, contaremos con la presencia de luchadoras reales, aunque estás competirán en su propia categoría y no podrán enfrentarse a los hombres, ya que por muy arcade que se haya querido hacer el juego, se sigue buscando cierta coherencia.
A la hora de jugar podremos escoger entre un buen plantel de luchadores, cada uno con su propio estilo de lucha. En total tendremos diez estilos que no se diferenciarán solamente en la parte gráfica, sino que repercutirán drásticamente en los combates. Así, cada técnica tendrá sus puntos fuertes y flojos y será más o menos poderosa frente a otro estilo, por lo que tendremos que tenerlo muy en cuenta. Será vital la distancia que mantengamos con nuestro adversario en función de nuestros estilos o el hecho de que algunos lo tendrán mucho más fácil que otros para realizar agarres, por ejemplo. En las partidas que jugamos pudimos darnos cuenta de que llevar a un luchador o a otro cambia drásticamente la experiencia de juego, por lo que llegar a manejarlos bien a todos será una tarea larga. Afortunadamente el juego es bastante intuitivo y enseguida estaremos encadenando golpes, aunque si queremos dominar a nuestro personaje la cosa será un poco más difícil.
A la hora de luchar tendremos que tener cuidado con la integridad de las partes de nuestro cuerpo. Así, según vayamos recibiendo golpes, los paremos, o incluso al hacer ataques potentes nuestro cuerpo irá sufriendo daño por zonas, pudiendo ser irreparable. Es por eso que no deberemos abusar siempre de los mismos golpes o cubrirnos todo el rato, pues acabaremos muy mermados. Para poder controlar como vamos bastará con echar un vistazo a nuestro jugador, quien irá mostrando en su cuerpo los daños de forma bastante realista. Además de eso, junto a la barra de vida tendremos una silueta dividida en zonas, cada una de las cuales irá cambiando de color según vaya sufriendo daños. Junto a la silueta y la barra de vida tendremos otra barra que nos permitirá, durante un periodo de tiempo, dar golpes más fuertes, algo que deberemos reservar para los momentos más críticos.
Tira a tu adversario a la lona
Durante los combates no deberemos conformarnos con dar patadas y puñetazos, sino que un factor importantísimo serán los agarres, ya que gracias a ellos tendremos la oportunidad de conseguir una victoria por dominación. Pero llegar a dominar los agarres no será algo fácil. De entrada, al coger a nuestro adversario, ambos luchadores comenzarán a forcejar, pudiendo incluso darse golpes. El objetivo es llevar al otro al suelo para, una vez estando allí, poder castigarlo a base de bien. Afortunadamente, si somos nosotros el que estamos en una mala posición siempre podremos zafarnos y conseguir situarnos mejor para así ser los quedemos los golpes (aunque siempre podremos bloquearlos si somos el indefenso). Una vez estamos enzarzados, el movernos y cambiar de posición es muy intuitivo, aunque no nos lo resultó tanto el conseguir tirar a nuestro rival al suelo o realizar un ataque de dominación. Respecto a este último, cuando se produce, deberemos mover la palanca de control derecha lo más rápido que podamos para llenar nuestra barra y liberarnos si somos el agredido, o completar el ataque de dominación si somos el atacante.
Gráficamente el juego ha mejorado bastante, ganando no solamente en estabilidad, sino consiguiendo un aspecto general mucho mejor. Lo que más ha ganado han sido sin duda las texturas, mucho más realistas ahora, además de las animaciones, más suaves y continuadas que en la última versión que probamos. Es cierto que aún nos encontramos con algún fallo, sobre todo en los agarres, en los que las animaciones hacen cosas raras, pero son fallos puntuales que seguro que serán corregidos para el lanzamiento del juego. También pudimos ver más escenarios y nos encontramos que hay una gran variedad de ellos y que están muy bien recreados con mucho público. No queremos terminar este punto sin comentar lo bien recreados que están los luchadores reales y lo realista de los daños, que en muchas cosas nos harán hasta estremecernos de dolor solo con verlo.
Lo cierto es que aunque sabíamos que la última vez que lo probamos el juego estaba muy verde aún, teníamos nuestras dudas de si iba a dar tiempo a los desarrolladores a pulirlo todo. Tras haber podido probar el juego en detalle la respuesta es afirmativa, pues el juego ha mejorado muchísimo en todos sus aspectos, siendo totalmente estable y solucionando prácticamente todos sus fallos. Por supuesto siguen habiendo cosas que pulir, pero la cosa va muy encaminada. Además de poder comprobar el esfuerzo realizado por sus creadores, nos hemos encontrado con un juego accesible y divertido, en el que cada luchador es un mundo y en el que su estilo brutal y extremo lo hacen destacar frente a otros juegos del género. Sin duda la impresión que teníamos del juego, que ya era buena, ha mejorado aún más y estamos deseando tenerlo en nuestras manos para poder echarnos unos cuantos combates.