Muchas veces, voluntariamente o no, los estudios se encasillan en una serie de proyectos que hacen que, posteriormente, sea difícil sacarlos de ahí. Pero, ¿qué pasa cuando salen? Recientemente tenemos el caso de Reflections, conocido por crear la saga Driver, que de manera totalmente inesperada nos ofrecieron Grow Home, un juego de plataformas de corte independiente que nos gustó mucho, y fue bastante bien acogido entre los jugadores. Un caso parecido es el de Haemimont Games, conocidos principalmente por sus juegos de estrategia y tiempo real, así como por haber creado Tropico 3 y Tropico 4.
Ahora, este estudio búlgaro retoma un género con el que ya probó suerte en 2011 con The First Templar, el juego de acción y rol cooperativo a lo Diablo que no funcionó muy bien, pero que parece haberles servido para aprender de sus errores de cara al título que nos ocupa: Victor Vran.
Victor Vran-Helsing
Victor Vran es un juego de acción y rol de perspectiva aérea y con un minúsculo toque de plataformas que nos pone en la piel de un protagonista homónimo, el cual se encuentra en la ficticia ciudad de Zagoravia para luchar contra una invasión demoníaca de origen desconocido y, obviamente, sobrenatural. Tanto su propuesta como su ambientación nos ha recordado bastante al personaje y a los juegos de Van Helsing, pero esto no es necesariamente algo malo.
Con teclado y ratón, o con mando, recorreremos calles de un mundo fantástico de corte medieval, combatiendo todo tipo de enemigos con un sistema de combate muy sencillo, basado prácticamente en atacar y esquivar, pero que tiene bastante profundidad y muchas posibilidades. Tras un sencillo y completo tutorial, descubriremos que nuestro protagonista es capaz de realizar ataques básicos y otros especiales, que se diferencian en la fuerza de cada uno y el "tiempo de recarga", introduciendo así un elemento que nos obliga a dosificarlos con acierto.
Una sorpresa bastante agradable ha sido que Victor Vran no tiene clases para elegir, algo habitual en este tipo de juegos, pero lo compensa con un equipo que modifica profundamente las posibilidades de juego. Quizás no tanto como tener clases, pero lo hace. El mero hecho de cambiar de arma nos permitirá jugar de una manera totalmente diferente, teniendo que marcar el ritmo del combate manera diferente, dosificando los ataques especiales a otro ritmo, y, entre muchas comillas, haciendo que parezca incluso un juego diferente. Aparte, podemos asignar dos "cartas" al personaje que le otorgarán habilidades pasivas. Como veis, es un sistema bastante sencillo y directo, pero funciona bastante bien.
En Victor Vran también podemos saltar, algo que si bien puede perfilarse como algo trivial, le da un componente adicional al combate y a la exploración, añadiendo una opción más para esquivar y para descubrir los escenarios. En lugar de simplemente limitarnos a encontrar caminos ocultos a ras del suelo, ahora es posible llegar a algún tesoro oculto en niveles superiores. Es un pequeño detalle que, al menos en estas primeras partidas, se agradece bastante.
En esta versión, todavía en desarrollo y accesible a través del programa de acceso anticipado de Steam, tenemos una serie de zonas abiertas para explorar y combatir, con misiones repartidas por ellas. Por el momento no se ha integrado la historia –los propios desarrolladores explican que prefieren que la juguemos a su debido tiempo y quieren evitarse spoilers–, pero aun así es una experiencia muy disfrutable y hasta rejugable. Cada mazmorra tiene una serie de objetivos secundarios, los cuales son ideales para conseguir experiencia adicional u oro (la moneda del juego), y consiguen animarnos para volver a ellas.
Antes de pasar a otros aspectos, nos podemos dejar de comentar su modo multijugador cooperativo para hasta cuatro jugadores simultáneos. Siendo honestos, hemos tenido muchos problemas para encontrar jugadores online y no hemos podido formar un equipo de cuatro, pero una vez que se lance o si lo compramos con amigos, la cosa debería ir mejor. Eso sí, nuestro escaso contacto con el multijugador ha sido muy positivo, y nos quedamos con las ganas de probarlo más en profundidad.
Trabajo por hacer
La base de Victor Vran ya está hecha, y la verdad es que es muy sólida y prometedora, incluso en lo audiovisual, con un aspecto muy "terminado". Esto no quita que todavía quede trabajo por hacer. Creemos que el sistema de personalización que tanto nos gusta tiene que ampliarse con nuevas armas y objetos para de verdad conseguir sustituir a las clases. También nos gustaría que se le diese algo más de profundidad a estas armas y objetos, ya sean nuevas o existentes, que nos permitan mejorarlos para que no sea simplemente "consigo uno nuevo mejor y lo cambio".
De igual modo, hay mucho equilibrio que ajustar, ya que algunas batallas son demasiado sencillas o demasiado complicadas en relación al momento en el que aparecen. Por el momento queremos confiar en una buena historia y una buena cantidad de contenidos que consigan mantener el ritmo de la aventura y engancharnos tal y como lo ha hecho durante los primeros compases.
Victor Vran se hace un hueco en el género
Hemos podido probar un porción muy pequeña de Victor Vran, pero estamos deseando que siga adelante y nos muestre todas sus bondades. Ahora mismo, nos ofrece una aventura muy accesible, pero con la profundidad y la complejidad necesaria para atraparnos y dejarnos con ganas de más. Su propuesta directa, su acción cooperativa y una jugabilidad que sencillamente funciona puede ser la clave para convertirse en un más que interesante exponente del género que normalmente se asocia con la saga Diablo.
Con proyecto todavía en el programa de acceso anticipado de Steam, todavía no nos atreveríamos a recomendarlo, ya que tenemos una especie de demostración muy extensa, sin historia y limitada a una serie de contenidos, pero, como habréis leído, las sensaciones que nos deja son muy positivas. Si os atrae los juegos de rol con si toque de acción, no dejéis de seguirle la pista a éste.