Cuando Bioware, Lucas Arts y Electronic Arts se juntan en el cuño de un videojuego las posibilidades de que este aporte algo nuevo al panorama se multiplican exponencialmente. El último de los juegos del EA Showcase de Londres del que os hablaremos no es otro que Old Republic, un nuevo online masivo que intentará plantar cara al todopoderoso World of Warcraft, título obligatorio al hablar de este tipo de juegos.
La temática de este juego es otra de las grandes bazas de la desarrolladora ya que Star Wars ha tenido, tiene y tendrá rédito entre extraños y conocidos.
El hecho que se utilice el universo de los Luke y compañía para ambientar un juego para muchos usuarios a la vez, es prueba irrefutable de que este tiene aun mucho mercado por descubrir.
La dinámica del juego se centra, generalmente, en el combate y las misiones. Como venimos comentando desde hace un tiempo, el masivo online está empezando a pegar fuerte en el mercado. Aparte del "todopoderoso" otros juegos se han intentado abrir camino en este difícil campo del videojuego entre el los que se encuentran los últimos anuncios de EA: All Points Bulletin, donde podremos llevar a un policía o un criminal al más puro estilo GTA, o también Need for Speed World, donde trasladaremos el popular juego de velocidad al campo online masivo con todas las virtudes que este nos ofrece y la posibilidad de ampliar y tener novedades mucho más a menudo.
Los pros y los contras de este tipo de juegos son dos. La parte positiva es la constante actualización y creación de nuevos contenidos. El hecho de disponer de una comunidad amplia hace que la desarrolladora subsane problemas mucho más rápidamente por la presión de esta. Lo negativo de este tipo de juegos es la forma de pago y la necesidad de desembolsar cierto montante para acceder a nuevos materiales, armas o personajes. Muchos juegos de este tipo son gratuitos pero después se debe pagar para conseguir ciertas mejoras.
The Old Republic es uno de esos híbridos que suenan interesantes, sobre todo, para los aficionados a todo el mundo Star Wars. La batalla en la que EA quiere embarcarse será dura y, pese al sello galáctico, tiene delante al mandamás desde hace muchos años. WoW va a guerrear como ha hecho con todos los anteriores rivales saliendo airoso de cada contienda.
En una fase muy beta
La versión a la que Vandal tuvo acceso en el Showcase no era, ni de lejos – esperemos – la que llegará a nuestras estanterías. El encargado de las explicaciones del juego dejó muy claro este punto y aclaró que el objetivo de la presentación era más el mostrar la jugabilidad y posibilidades del juego que el apartado gráfico, que aun es un poco barroco.
Los entornos son amplios y las escuetas explicaciones sobre los controles hacen que la decena de medios que probábamos el juego a la vez deambulen por la pantalla observando la inmensidad de las diferentes salas. La visión de diez tipos mirando arriba y abajo y moviéndose por el escenario con ojo escrutador daba la impresión más de una inspección laboral que no de probar un videojuego.
Pasados estos minutos de "inspección del entorno" nos disponemos a salir de esta gigantesca construcción a través de unas rampas. Al acecho de otros jugadores empezamos a intentar el ataque sorpresa por la espalda pero el experimento no sale bien. "Se podrá interactuar y atacar al resto de personajes presentes aunque hoy solo tocaremos el combate contra la máquina". Los diferentes asistentes de EA que se encuentran en la sala acuden raudos a aclarar cualquier duda sobre el juego y la jugabilidad de este. Un amplio mapa en papel delante del teclado da más información sobre los movimientos que debemos hacer para actuar sobre nuestro personaje.
Una vez en el exterior empezamos a explorar el vasto mundo de Old Republic. Ahí es cuando descubrimos que habrá que ser veloz en el uso de los diferentes ítems y poderes para no ser aniquilados en breve por enemigos y animales que campan a sus anchas por las llanuras. Dominando a nuestro cazarrecompensas saldremos en busca de nuestra primera misión no sin antes provocar a una manada de bichos que acudirán a atacarnos y por los que tendremos que desenfundar nuestras armas.
El uso de poderes y diferente armamento es sencillo. Podremos arrastrar el poder que nos interese a nuestra barra rápida, situada en la parte inferior de la pantalla y después de seleccionarlos desde ahí, clicar directamente sobre el enemigo al que queramos atacar. Algunas de estas son finitas y otras las podremos recargar pasado cierto tiempo, como es el caso de los poderes, que recuperaremos al cabo de un momento de haberlos utilizado.
Después de cada ataque, un indicador visual nos marcará la posibilidad de saquear el cadáver enemigo para sacar algún objeto que posteriormente podremos utilizar.
Entre el bloq num y el ratón
La movilidad a lo largo y ancho del mapa la haremos de la forma más lógica. El ratón moverá la cámara y la rueda hará lo propio con el zoom. Para el resto, las flechas o A,S,D,W guiarán los pasos de nuestro héroe dejando a los números la habilidad de escoger el ataque para cada momento del juego.
La llegada al campamento, que se encuentra a cierta distancia, la hacemos entre ataques de otros personajes de los que será difícil escapar sin plantar batalla. Después de acabar con ellos llegamos al lugar de la misión donde un grupo más nutrido intentará acabar con nosotros. En un principio el mapa parece algo duro de seguir con algunas paredes que aparecen impidiéndonos el paso logramos llegar al punto de encuentro y acabar con unos tenientes que no nos causan mucha complicación.
Es a partir de aquí donde se ve uno de los puntos importantes del juego que ya llevamos comentando unos meses. El título a la carta se impone y a partir de aquí será el propio jugador el que configure, con sus acciones, al propio héroe.
La decisión hace al héroe
En este caso podremos ver como el perfil de nuestro personaje se va desarrollando según nuestras decisiones. El hecho de dejar en vida a una persona o decidir acabar con ella sin tan solo preguntarle forjará el carácter y el estatus del personaje al que llevamos.
Las diferentes misiones que iremos desarrollando a lo largo de nuestras horas de juego no solo determinarán nuestro carácter sino que también se ocuparán de darnos más experiencia en el campo que decidamos desarrollar y descubrir nuevos objetos, armas y poderes que podremos combinar.
Por último, cabe destacar la voluntad de Bioware al no mezlcar las tramas originales de las películas de George Lucas con el juego por lo que este se sitúa en el universo Star Wars pero sin tocar ninguna de las historias que todos conocemos de sobra.
Pese a lo atrasado de esta demostración podemos decir que The Old Republic va por buen camino. Las maniobras para sacar los masivos online de la épica y lo medieval para llevarlos por otros derroteros están a la orden del día y este título puede cuajar entre los fans de esta tipología de juego.
El cuño Star Wars puede ser también una arma de doble filo ya que al ser tan especializado – no solo es ciencia ficción sino también de una saga muy concreta – puede atraer a los amantes de la saga pero dejar a otros fuera que de ser menos concreto habrían accedido a jugar.
De todas formas, el mundo del videojuego recibe otro masivo online dispuesto a hacer tambalear los cimientos de lo hasta ahora existente. Mientras, WoW sigue con su hegemonía al frente de los juegos online.
