Bohemia Interactive es un estudio de videojuegos bastante famoso sobre todo entre los jugadores de PC gracias a obras como Alpha Prime, Vigor, la famosísima saga Arma o el título de supervivencia DayZ.
Pero, más allá de estos títulos, Bohemia tiene otro pequeño estudio dedicado a proyectos más pequeños o que buscan darle un giro diferente a ciertos géneros y es, precisamente, este estudio, Bohemia Incubator, el protagonista de estas impresiones de la mano de Silica, un nuevo título con el que quieren mezclar los géneros de los juegos de disparos en primera persona y la estrategia en tiempo real para ofrecernos un cóctel muy particular.
Ciencia ficción bélica
Lo primero de todo vamos a poneros en contexto de la ambientación de Silica, un título que apuesta por una temática de ciencia ficción bélica llevándonos al año 2351, momento en el que la humanidad ha dado un salto de gigante a nivel tecnológico gracias a la tecnología del teletransporte y un mejor control del espacio/tiempo que le ha permitido colonizar la estrella Proxima Centauri, el primer paso hacia el descubrimiento de un nuevo planeta llamado Baltarus, que dara un inicio a una guerra entre humanos y alienígenas de la que nosotros formaremos parte.
Un shooter con potencial y cosas por mejorar
La mayor parte del tiempo probamos Silica como shooter ya que creemos que es por donde primero va a entrar por los ojos a los jugadores, siendo un género más popular a todas luces al de la estrategia en tiempo real, aunque al que os escribe le gustan ambos por igual.
Aquí hemos tenido sensaciones encontradas porque vemos el potencial del juego como tal pero creemos que para esta prueba éramos muy pocos jugadores y que también hace falta ajustar bastantes aspectos de Silica para hacerlo brillar y que pueda hacerse un hueco en un mercado en el que hay muchos juegos de disparos y en el que va a tener que competir de forma feroz por mucho que estemos ante un híbrido.
Las sensaciones a la hora de movernos o disparar eran bastante buenas, algo que era de esperar viniendo de donde viene el título, y teníamos un buen puñado de armas futuristas a nuestra disposición. Estamos ante un juego de disparos mucho más arcade que la saga Arma pero aun así muy satisfactorio a excepción de que aún falta por equilibrar el poder de las armas para ser más justo y que todas las clases disponibles tengan su rol y su importancia. Actualmente el soldado de infantería "básico" necesita disparar y acertar durante demasiado tiempo a un enemigo con respecto al resto de clases y armas, poniéndolo en una clara desventaja, por poner solo un ejemplo.
Luego han habido otras cosas que nos gustaron, como las explosiones, efectos, sonidos e inmersión que se consigue durante los asaltos y otras que no nos acabaron de convencer pero que se arreglan fácil como fallos en la interfaz del aparato que sirve para teletransportarnos a los puntos álgidos de la batalla que, en esta demo, eran pocos ya que hubiéramos necesitado muchos más jugadores para aprovechar al máximo el caos que se puede producir en Silica.
Por otro lado, durante nuestra partida también pudimos controlar algunos vehículos, con unas mecánicas de conducción sencillas y bastante poder en el campo de batalla. Como siempre, ponernos a los mandos de estas moles blindadas es todo un placer aunque aún deben corregir varios aspectos de sus físicas.
A sus órdenes mi comandante
Otro de los puntos clave de Silica es la posibilidad de ponernos en la piel del comandante de nuestro ejército y encargarnos de dirigir todas las tropas desde una posición macro estratégica, algo con lo que quieren fusionar los FPS y los RTS en un único juego. De entrada, esta variante nos ha recordado un poco a un veterano simulador de la Segunda Guerra Mundial, Battleground Europe, en el que varios jugadores pueden ejercer el rol de comandantes o generales desplazando materiales y gestionando recursos para que usen los jugadores en la parte de shooter.
Algo parecido ocurre en Silica, cambiando la vista en primera persona cambiará a la vista cenital clásica de los RTS cuando adoptamos el papel de comandantes pudiendo ver con mayor facilidad todo lo que ocurre en el campo de batalla. Desde aquí podemos seleccionar los objetivos que queremos que ataquen tanto los jugadores que están disfrutando de la experiencia de shooter como las unidades controladas por la IA, además de gestionar la construcción de edificios y todos los pormenores de la persona al cargo de dirigir el ataque y gestionar los recursos con éxito, dejándonos con una propuesta interesante que puede calar bastante bien entre aquellos jugones que quieran reivindicarse como líderes de un ejército.
Silica, potencial a falta de muchos arreglos
Tras probar Silica vemos su potencial, entendemos lo que Bohemia Incubator quiere hacer y creemos que puede ser una buena idea que aún necesita muchos arreglos para brillar, con ajustes de equilibrio, en la interfaz sobre todo de la vertiente de shooter que va a ser seguramente la más popular cuando llegue a la plataforma de acceso anticipado de Steam.
Hemos realizado estas impresiones tras probar una demo de Silica invitados por Best Vision PR.