Un botón es todo lo que necesitamos para disfrutar del frenesí que ofrece ONE BTN BOSSES, la peculiar propuesta que el estudio Midnight Munchies, afincado a medio camino entre España, Dinamarca y Eslovenia, presentaba a principios de año como nueva incorporación a su catálogo de propuestas arcade.
Unos días antes de la celebración del Summer Game Fest (donde tuvo su pequeño momento de gloria al ser presentado como parte de una iniciativa bautizada "Outersloth", una línea de juegos indies en la que los creadores de Among Us prestan recursos económicos a estudios menos conocidos para sacar adelante nuevos proyectos) aparecía en Steam la primera demo, con la que hemos podido echar un primer vistazo a su contenido.
Una propuesta directa y sin fisuras
Tal y como reza su descripción en la plataforma de Valve, el espíritu de ONE BTN BOSSES es el de cualquier arcade convencional: partidas rápidas e intensas divididas en dos modos de juego.
El que nos da la bienvenida es el modo Campaña, una modalidad que promete una duración de cuatro horas y en la que desbloqueamos nuevas habilidades y mejoras a medida que avanzamos.
El planteamiento es el siguiente: manejamos a una nave que orbita alrededor de un único enemigo. Pulsando un botón alteramos el tipo de movimiento que realizamos, pudiendo acelerarlo, cambiar la dirección, etcétera. Los disparos se realizan de forma automática. Cuanto más tiempo transcurra sin alterar el movimiento de la nave, más velocidad alcanzará esta y, por consiguiente, más daño causaremos al jefe final o enemigo que tengamos delante.
Juega como tu prefieras
El modo Campaña hace las veces de tutorial, además de servir como una sencilla introducción a la mecánica de juego. Avanzamos varios niveles hasta que damos con el primer jefe, y una vez derrotado, obtenemos acceso al modo RIFT, un roguelite de manual de duración infinita en el que las cosas se ponen un poco más difíciles. En esta demo contamos con dos métodos de desplazamiento: cambio de sentido y carrera.
Si elegimos el primero, bastará con apretar un botón justo en el momento en el que queramos evitar los ataques enemigos. El segundo nos permite desplazarnos durante unos segundos a toda velocidad. El hecho de no recibir daño mientras esprintamos otorga nuevas posibilidades a nuestra estrategia de combate, algo fundamental para salir indemnes de los enfrentamientos más complejos.
Un infierno roguelite
La demo solo ofrece dos tipos de movimiento y ataque. Aunque sobra decir que no es suficiente para saber hasta dónde llegarán las posibilidades de la mecánica, sí que podemos entrever que los pequeños cambios que introducen las nuevas habilidades alteran considerablemente nuestra forma de acercarnos a los combates. Cada enemigo cuenta con sus propios patrones de ataque, cuya dificultad aumenta paulatinamente a medida que avanzamos de nivel. Esto implica ataques más poderosos y, por supuesto, también un mayor número de disparos en pantalla, al más puro estilo bullet hell.
Algunos de estos ataques se representan por medio de un pequeño recuadro rojo en la zona de efecto, mientras que otros son más parecidos a los de cualquier juego arcade convencional, o dicho de otra manera: toca esquivar cientos de objetos a la mayor velocidad posible y preferiblemente sin recibir ningún daño en el proceso. Empezamos con un total de tres vidas por nivel, aunque es posible ir desbloqueando mejoras que nos permitan recargar nuestra energía. La exigencia que supone ir superando escenarios hace que la sensación al lograrlo sea placentera, algo que, acompañado de algunas opciones que permiten reducir ligeramente el nivel de dificultad, abre las puertas tanto a jugadores experimentados como a aquellos que tengan más problemas para disfrutar de títulos de esta índole.
Acción acompañada de mucho ritmo
Sobre su estética, poco se puede añadir a lo que podemos ver en las imágenes adjuntas en este texto. Midnight Munchies apuesta por un estilo visual sencillo, práctico, que encaja como anillo al dedo con la propuesta y con su peculiar sentido del humor (del que disfrutamos con los comentarios que los productos ofrecen aquí y allá). No es nada exigente con nuestros equipos y es compatible con Steam Deck, algo muy a tener en cuenta dado el estilo rápido y versátil que ofrece el juego.
El apartado sonoro, con James Evans a la batuta, emplea el ritmo de la música electro para elevar nuestras pulsaciones aún más si cabe durante las partidas. No obstante, es importante tener en cuenta que, pese a lo que aparenta en primera instancia, OBB no es un juego rítmico. Al menos, a juzgar por los niveles que hemos disfrutado en esta demostración.
Además de lo hasta aquí expuesto, Midnight Munchies ha confirmado otros aspectos de interés de cara a su futurible lanzamiento, por el momento sin fecha anunciada (se prevé no obstante que esto suceda a lo largo de 2024). El más interesante de todos es la ausencia de un multijugador, dado que el aspecto competitivo del juego estará marcado por el tiempo total en el que consigamos superar cada nivel. Pese a este detalle y a la corta duración de la demo, lo cierto es que OBB es una propuesta muy interesante que promete diversión a raudales en pequeñas píldoras. Tanto por su mecánica como por su aspecto estético, se merece figurar en nuestros juegos a tener en cuenta para los próximos seis meses.
Hemos realizado estas impresiones tras probar una demo de ONE BTN BOSSES gracias a un código proporcionado por ICO Partners.