En marzo de 2004 salió al mercado el primer Far Cry, un juego que impactó tanto por sus gráficos, con el que Crytek demostró de lo que eran capaces de hacer con un potente PC, como por su jugabilidad abierta, que sorprendió por estar muy alejada de tantos shooters en primera persona pasilleros y lineales. Con el estudio alemán inmerso en su nueva saga Crysis, la licencia quedó en manos de Ubisoft, que confió en su estudio de Montreal pare realizar una secuela, Far Cry 2 que se lanzó en octubre de 2008.
La ambientación pasó de una exuberante isla tropical a un país del África Central, algo que de primeras ya no gustó a muchos, y pese a tratarse de un juego muy ambicioso y que mantenía las señas de identidad jugables al volver a plantear una acción abierta, diversos fallos y problemas de ritmo estropearon el conjunto final, y pese a no recibir malas críticas fue bastante decepcionante para muchos jugadores.
Previsto en un principio para este mes de septiembre, tras un importante retraso finalmente Far Cry 3 saldrá el 29 de noviembre, siendo el último gran juego de la campaña navideña y saliendo al mercado después de otros grandes pesos pesados del género como Halo 4, Medal Of Honor Warfighter y Call of Duty: Black Ops II, lo que veremos cómo repercute en sus ventas.
Ubisoft nos ha dado la oportunidad de jugar el arranque de la aventura, sus primeras horas, y podemos decir que estamos antes un gran shooter, y sobre todo y lo que es más importante, muy diferente al resto de competidores.
Al igual que las anteriores entregas de la saga, se desarrolla en un mundo abierto, en el que tenemos total libertad para movernos. Esto provoca que cuando tengamos que resolver un objetivo, podremos hacerlo de diferentes formas, elegir el flanco por el que queremos atacar, tomar una actitud más directa y suicida o bien ser más cuidadosos y atacar con sigilo. Además la ambientación vuelve a ser como la de la primera entrega, en una isla tropical, lo que permite ofrecer un mundo de enorme belleza, pero también extremadamente peligroso, tanto por amenazas humanas como de animales salvajes.
La aventura arranca con nuestro protagonista Jason Brody y un grupo de amigos, entre los que se encuentran su novia y su hermano, que se han ido a una isla paradisiaca en busca de diversión, montando una gran fiesta. Estas vacaciones se verán truncadas cuando una banda de psicópatas los secuestra, estando al mando Vaas, el más loco de todos y el que será nuestro némesis durante todo el juego, que nos hará la vida literalmente imposible. Desde este momento Jason, un tipo aparentemente normal, deseará vengarse y rescatar a su novia, para lo que contará con la ayuda de otros peculiares habitantes de una isla que esconde muchos secretos, en la que casi todo el mundo parece haber perdido la cabeza.
Tendremos que escapar de las garras de estos matones, de su campamento, junto al hermano de Jason, en una primera escena que sirve de tutorial, en la que nos van explicando poco a poco los controles y acciones básicas muy importantes como lanzar piedras para distraer a los enemigos. Tras estar casi a punto de escapar nos descubren y se inicia una frenética persecución, en la que el malvado Vaas hasta se permite hacer una macabra broma y decirnos "¡corre Forrest, corre!", mientras nos dispara por la espalda.
Nos despertamos en la aldea Amanaki, donde nos han curado y dado cobijo, el lugar que será nuestro centro de operaciones durante las primeras horas. Aquí podemos descansar, comprar armas y munición, y varios personajes nos encargan misiones, la primera de ellas activar una de las Torres de radio, un elemento fundamental en el desarrollo de Far Cry 3. Estos son unos lugares elevados que funcionan de manera similar a las atalayas de la saga Assassin's Creed, y que una vez activadas nos desvelan el mapa de la zona, desbloquean misiones por los alrededores y nuevas armas en las tiendas, disponibles de manera gratuita. Así que como podéis imaginar lo primero que debemos hacer al llegar a una nueva zona es encontrar y activar su Torre de radio.
Para movernos grandes distancias hay todo tipo de vehículos, con un control bastante realista, ya hemos conducido varios coches, jeeps, motos, quads, una ala delta, lanchas y hasta motos de agua. Pero esta no será la única manera de desplazarnos, ya que situadas estratégicamente hay tirolinas que nos permiten cubrir grandes distancias de manera muy rápida, y conviene aprenderse dónde están situadas para utilizarlas de manera práctica.
Desde un principio toda la isla de Far Cry 3 parece desbloqueada, no hemos descubierto ningún obstáculo que nos impidiera acceder hacia algún lugar, y será un juego en el que no solo prime la acción, también habrá un gran componente de exploración, con multitud de coleccionables, como reliquias, cartas y tarjetas de memoria con narraciones de otros visitantes de esta extraña isla.
Tras aprender un poco a movernos por la isla, descubrimos muchos de los peligros que contiene, para empezar su propia orografía. En Far Cry 3 no podremos hacer el loco y dar enormes saltos imposibles, ya que como comprobamos, al caer desde una altura no demasiado elevada nos rompimos un dedo, que el protagonista se colocó con una animación un tanto desagradable, pero muy realista.
Para curarnos disponemos de todo tipo hierbas que vamos recogiendo por los escenarios, y con las que tenemos que poner en práctica el crafting, una opción en el menú principal que nos permite mezclar todo aquello que hayamos recogido para crear medicinas, o por ejemplo usar las pieles de los animales que hayamos cazado para aumentar la capacidad de nuestro inventario. Aquí la regeneración de vida no es total, va por tramos y es muy lenta, así que siempre hay que contar con objetos para curarnos, en un juego bastante exigente en este sentido.
Al poco de empezar, en la aldea Amanaki, nos hacen un tatuaje en el brazo, una representación visual muy particular y original de nuestro árbol de habilidades. Está dividido en tres, la garza, el tiburón y la araña, y en cada una de estas ramas hay varias habilidades. Desde las clásicas para ser más fuerte, más rápido o resistente, a otras muy interesantes que aportan nuevos movimientos, como una en la que si saltas sobre un enemigo lo ejecutas de manera espectacular en el aire. Según las habilidades que vayamos adquiriendo, el tatuaje en nuestro brazo así se irá dibujando, algo muy curioso y original.
Además de la importancia de activar las Torres de radio para revelar el mapa y que aparezcan ciertas misiones, lo siguiente casi tan importante son los Puestos avanzados, campamentos enemigos que si limpiamos recibimos ciertas ventajas. Como dejar la zona de los alrededores libre de rivales, y que nuestros paseos y exploración sean más agradables, y muy importante, estableciendo un punto de viaje rápido, lo que es primordial para no darnos largas caminatas por la isla, siempre y cuando no queramos claro. Pasear y explorar será muy interesante, la isla está llena de contenidos, pero cuando queremos ir al grano tendremos suficientes medios para hacerlo, así como puntos de control que se establecen en mitad de las misiones, para que no tengamos que volver al campamento base cada vez que nos maten.
Hay una gran variedad de misiones, las principales, las de la historia, son unas 30, un número que puede parecer un poco escaso para un sandbox, pero hay que decir que son bastante largas y elaboradas. Luego tenemos un sinfín de secundarias, de todo tipo, desde conducir un determinado vehículo y pasar por unos puntos de control antes de que se acabe el tiempo, misiones de asesinato con ciertas condiciones, como matar al jefe de un grupo con un cuchillo, y otro tipo de misiones arcade que se desarrollan en una zona concreta y tenemos que conseguir el mayor número de puntos matando enemigos, para conseguir una de las tres medallas y competir en los marcadores en línea.
Un tipo de misiones que nos han gustado mucho son las de cacerías de animales, nos indican una zona del mapa y tenemos que acabar con un número de jabalís, de perros salvajes, lagartos gigantes o cualquier de los muchos animales que pueblan el juego. Caminando por la selva nos pueden morder peligrosas serpientes, en el agua a veces hay tiburones, en una ocasión en un río nos atacó un cocodrilo, y andando por la noche en la jungla un jaguar acabó con nosotros en décimas de segundo. Los animales son muy protagonistas en Far Cry 3, y muy peligrosos, algo que nos encanta.
Ya siguiendo el desarrollo de la historia, hay que destacar su acción abierta que da al jugador mucha libertad, y es por esto como comentábamos al principio que se siente muy diferente de tantos shooters pasilleros, aquí podremos realizar tácticas, observar el escenario y planificar un ataque. Para este fin contamos con la cámara de fotos, un objeto muy útil que nos permite desde lejos marcar a los enemigos uno por uno. Esto consigue que nunca los perdamos de vista, ya que se pone sobre sus cabezas una marca que vemos en todo momento, incluso a través de los objetos. Si somos lo suficientemente pacientes y laboriosos, marcar a cada amenaza –perros y humanos- será una gran ayuda a la hora de internarnos en territorio enemigo.
Podremos ir acabando con cada uno de los enemigos por la espalda con sigilo, a base de ejecuciones, sin dar la voz de alarma. Aunque claro habrá quien quiera jugar a Far Cry 3 como un juego de acción directa, y así lo podrá hacer, disparando de frente sin más miramientos, aunque como hemos comprobado no será un juego fácil, y como te rodeen cuatro o cinco enemigos estás perdido, siendo un poco más realista que otros shooters.
Además de una campaña para un jugador de unas 20 horas, una duración no muy habitual dentro del género, habrá un modo cooperativo con una historia distinta y otros protagonistas de unas 6 horas de duración, y poniéndole la guinda al pastel el modo multijugador, muy completo. Como veis no son pocos los ingredientes de este atractivo cóctel llamado Far Cry 3, que promete una gran cantidad de contenidos, un título que no será precisamente corto.
Estas impresiones las hemos realizado jugando a la versión de PC, que luce genial, con unos paisajes de ensueño recreando con todo lujo de detalles la naturaleza, pudiendo desplazarnos enormes distancias sin ningún tiempo de carga. Es bastante impresionante coger un ala delta en un punto elevado y volar hasta la otra punta de la isla, sin defectos gráficos que empañen la experiencia. Esto nos hace dudar de la versión de consolas, unos hardwares ya con muchos años a sus espaldas a los que cada vez les cuesta más sorprendernos, y nos queda la duda de ver cómo se van a desenvolver PlayStation 3 y Xbox 360 con el impresionante despliegue gráfico de Far Cry 3.
Un gran juego de acción muy a tener en cuenta
Aunque su fecha de lanzamiento tan avanzada a finales de noviembre no le sitúa en la mejor posición frente a otros competidores de mucha talla, creemos que los amantes de la acción en primera persona no deberíais perder de vista el nuevo Far Cry 3. Una aventura llena misiones, coleccionables, con una gran historia, una enorme y bella isla por explorar, variado y también muy espectacular cuando toca. Su jugabilidad más abierta, con situaciones en las que el jugador puede elegir por dónde y cómo quiere actuar, le diferencian mucho de otros títulos de acción más lineales, y cuenta con la suficiente personalidad propia para convertirse en uno de los mejores juegos de estas Navidades. El 29 de noviembre en Xbox 360, PlayStation 3 y PC saldremos de dudas.