La plataforma de Acceso anticipado de Steam está a punto de recibir un nuevo proyecto independiente llamado Curse of the Dead Gods, un roguelike desarrollado por Passtech Games (Masters of Anima, Space Run) y editado por Focus Home Interactive que nos ha dejado con muy buenas sensaciones tras jugarlo durante un puñado de horas en los que hemos disfrutado jugablemente con sus mecánicas y sufrido la dificultad del templo maldito que hemos podido explorar en busca de tesoros… y peligros.
Un templo maldito infinito
El argumento de Curse of the Dead Gods es bastante sencillo ya que el título se centra casi por completo en la apuesta jugable. Como "excusa" para empezar a jugar se nos presenta un buscador de tesoros al más puro estilo Nathan Drake o Lara Croft que ha emprendido un viaje para encontrar riquezas, poder divino e incluso la vida eterna, algo que le ha arrastrado hasta el templo maldito que exploraremos una y otra vez en el transcurso de la partida, lleno de trampas, monstruos y también preciadas recompensas para los aventureros más osados.
Al comenzar cada partida podremos escoger entre cuatro niveles diferentes a cada cual más largo y difícil. Una vez lo elegimos se nos abre un mapa de la zona que nos ofrece rutas diferentes generadas de forma aleatoria cada vez que empezamos la partida. Cada camino, cada sala, tiene una peculiaridad y elegir la ruta correcta significa, en muchos casos, poder completar, o no, la partida. Tenéis un ejemplo de una ruta en la imagen que vais a encontrar un poco más abajo para ver cómo podemos escoger entre diferentes caminos para encontrarnos armas, reliquias, oro, mejorar nuestras estadísticas e incluso lugares en los que curar nuestras heridas a cambio de corrupción (esto lo explicaremos más adelante). Cuando acabamos de explorar esa parte del camino en cuestión llegamos a una puerta que nos conduce a la siguiente sala, teniendo que escoger de nuevo el siguiente "peldaño" de la escalera hasta llegar al jefe final de este templo casi infinito.
Más negro que la oscuridad
Una mecánica bastante particular de la que nos damos cuenta durante nuestra primera partida es la de la luz y la oscuridad y su importancia en el juego. La luz de nuestra particular antorcha nos servirá para aumentar nuestra percepción y detectar trampas escondidas que no se verán en la oscuridad, en la que tampoco seremos capaces de discernir a los enemigos a no ser que nos ataquen o los tengamos muy cerca. El juego utiliza la luces y las sombras de una forma muy inteligente a nivel jugable tanto en este como en otros aspectos como, por ejemplo, un poder especial para un arma que nos permite hacer más daño en la oscuridad, lo que hace que tengamos que decidir si optar por ese daño extra o mantener las salas iluminadas para no toparnos con ninguna trampa.
Otro punto interesante en las mecánicas propias de Curse of the Dead Gods es la corrupción. A medida que vamos avanzando por las salas vamos ganando puntos de corrupción (que también ganaremos al sufrir ciertos ataques enemigos o incluso haciendo ofrendas de sangre para conseguir objetos). Cada vez que superamos cierto límite de estos puntos se activa una maldición diferente que añade una nueva mecánica jugable como, por ejemplo, que los enemigos que mueran mientras se están quemando exploten o que un cierto tipo de estatua lance siempre una bola de fuego.
Un combate sencillo y funcional aderezado con armas, reliquias…
Además de explorar, sortear trampas y lidiar con la corrupción en Curse of the Dead Gods también tendremos que enfrentarnos a distintos tipos de enemigos que nos iremos encontrando por el templo. Para ello contaremos con un sistema de combate bastante sencillo, pero a la vez muy funcional haciendo clic sobre los enemigos para realizar ataques básicos, ataques "cargados" más poderosos o esquivar los golpes enemigos, teniendo una especie de barra de resistencia basada en puntos que, al terminarse, solo nos permitirá realizar ataques básicos hasta que le demos tiempo para recargarse.
Para afrontar el combate el juego nos ofrece diferentes tipos de armas comenzando por la propia antorcha que portaremos durante toda la partida, siguiendo por una categoría de armas a una mano que nos permitirá portar, al mismo tiempo, una espada y un escudo, una garra y una pistola, una maza y una daga… y todo tipo de combinaciones. Por último, tendremos una tercera categoría de poderosas armas a dos manos como espadones o arcos compuestos centradas en hacer más daño a costa de perder movilidad.
Otro objeto fundamental en el combate son algunas reliquias que nos podremos ir encontrando por el camino y que nos darán diferentes bonificaciones durante el combate o a nuestras características para añadir un poco más de salsa a la mezcla de Curse of the Dead Gods.
En líneas generales, todas las mecánicas de este particular roguelike casan muy bien y hemos disfrutado bastante de cada una de las partidas y las exploraciones a las que nos hemos enfrentado, disfrutando de un combate sencillo pero eficaz que pese a no ser demasiado complicado nos ofrece algunos enfrentamiento realmente intensos, sobre todo cuando el combate se empieza a mezclar con bonificaciones o penalizaciones como nuevas armas, las maldiciones y un largo etcétera, haciendo que el juego sea particularmente entretenido y desafiante en sus niveles más complicados.
Un plan de actualización muy bien detallado
Como ya hemos comentado, Passtech Games ha lanzado esta nueva obra en el acceso anticipado de Steam y, en este inicio, solo tenemos un templo con 4 niveles de exploración diferentes, un contenido que puede parecer escaso pero que se disimula bastante bien gracias a la dificultad del título, a que las rutas de exploración se generan de forma aleatoria tal y como dijimos antes y a que las distintas salas cuentan con unas cuantas variaciones que hacen que el templo no se haga repetitivo.
Además, antes de lanzar el juego Passtech Games ya ha dejado bien claro su hoja de ruta tras el lanzamiento del juego (podéis consultarla aquí), en la que encontramos nuevo contenido que llegará este mismo mes de marzo y otras actualizaciones durante los próximos meses como nuevos templos para explorar, enemigos e incluso más modos de juego para Curse of the Dead Gods. Tener un calendario tan bien planteado desde el inicio nos parece todo un acierto para un juego de Acceso Anticipado, aunque evidentemente falta por saber si lo acabarán cumpliendo.
Bien optimizado a nivel técnico
Por último, en el aspecto técnico de Curse of the Dead Gods apuesta por una estética bastante sencilla que casa muy bien con el juego que utiliza cámara isométrica y una paleta de colores bastante viva a pesar de tratarse de un juego en el que la oscuridad está muy presente. Los requisitos del mismo no son muy altos y con nuestro equipo, con gráfica NVIDIA GeForce RTX 2070 Super, procesador Intel i7 7700K, 16 GB de RAM y almacenamiento SSD, no hemos tenido problema para moverlo a más de 100 fpssen la mayoría de situaciones sin encontrar errores graves de rendimiento.
Curse of the Dead Gods, un roguelike desafiante con mucho potencial
Hemos pasado unas horas muy agradables probando Curse of the Dead Gods, un roguelike bastante ameno y desafiante, con mecánicas que, si las vemos una por una, son bastante sencillas, pero que cuando las combinamos todas casan bastante bien y nos ofrecen una grata experiencia de juego que creemos que va a gustar a los amantes del género.
Además, Passtech Games ha preparado una hoja de ruta bastante clara y detallada de cara a las próximas actualizaciones del juego, algo que siempre es de agradecer en un título de Acceso Anticipado. Si lo cumplen, van a desatar todo el potencial de Curse of the Dead Gods que puede acabar convirtiéndose en una de las primeras sorpresas del año.
Hemos realizado estas impresiones con un código para Steam proporcionado por Focus Home Interactive.