Riot Games ha experimentado un crecimiento asombroso desde que hace 11 años lanzase League of Legends, un MOBA que se ha convertido en un referente del mundo de los videojuegos y de los deportes electrónicos en España y el resto del planeta, aunando buenas ideas, campeones carismáticos y una jugabilidad sencilla de entender pero difícil de dominar que hace que estemos ante un título atractivo tanto para novatos como para los más experimentados.
Después de 10 años en los que League of Legends (LOL) creció una barbaridad en número de jugadores y en el ámbito de los esports, Riot Games anunció a finales del 2019 League of Legends: Wild Rift, una versión del MOBA para dispositivos móviles (y en el futuro para consolas) que hace unos días comenzó su fase de beta abierta en Android y que, durante el 2021, se lanzará también para iOS convirtiéndose en el complemento ideal para los aficionados de este popular juego que ahora pueden disfrutarlo en la palma de sus manos.
Puro League of Legends
Cuando el 2020 está a punto de llegar a su fin no vamos a explicaros en lo que consiste un MOBA ya que la mayoría de vosotros ya sabéis de lo que va esto: dos equipos de cinco jugadores, un montón de campeones, tres líneas y una jungla, torres, dragones, barones y un nexo enemigo que hay que luchar por destruir para ganar la partida.
Todas las mecánicas las encontraremos en Wild Rift que desde la primera partida nos deja el mismo sabor de boca que League of Legends con sus campeones, habilidades y una jugabilidad casi calcada a la del juego original para ordenador, aunque con algunos retoques aquí y allá para adaptarlo a dispositivos móviles y, por ejemplo, ofrecernos partidas más rápidas quitando, sin ir más lejos, los inhibidores, lo que nos permite llegar con más facilidad al Nexo, el "centro" de la base enemiga que tenemos que destruir para ganar la partida.
Esto y ajustes en la vida de las torres o en los campeones ayudan a que nos encontremos con partidas mucho más rápidas y dinámicas que en la mayoría de las ocasiones no durarán más allá de unos 15/20 minutos (a veces incluso bastante menos), perfectas para un viaje corto o mientras esperamos en algún lugar, además estas partidas más cortas, al menos para nosotros, promueven que nos apetezca echar "una partidita más" ya que las solventamos en un breve periodo de tiempo y no resultan tan largas e incluso pesadas como pueden ser, en ocasiones, en el original.
Por supuesto, para enfrentarnos a nuestros rivales en la Grieta del Invocador tendremos los campeones más emblemáticos de League of Legends a nuestra disposición con todas sus habilidades reflejadas de la misma forma que el juego original, pudiendo escoger entre más de 40 campeones entre los que se encuentran Lux o Yasuo por poner dos ejemplos de "héroes" emblemáticos del MOBA original.
Una buena interfaz y controles muy bien implementados
El siguiente punto a destacar de Wild Rift es lo bien integrados que están los controles para ofrecer una buena experiencia en dispositivos móviles sin necesidad de utilizar ningún mando utilizando los controles táctiles que se muestran en pantalla y que dejan hueco suficiente para que podamos ver todo lo que ocurre con naturalidad, además de estar bien colocados y diseñados para dar facilidades también a los streamers, dejando algo de "aire" (un hueco, vamos) entre los botones y los bordes de la pantalla pensando en carátulas u overlays para los mil y un directos que vamos a ver del juego durante las próximas semanas.
Nosotros, sin ir más lejos, hemos jugado utilizando los controles táctiles en un Samsung Galaxy A 51 con una pantalla de 6,5 pulgadas y hemos disfrutado del juego con total naturalidad, con una distribución de los controles que, para nosotros, es muy acertada, y además con opciones muy intuitivas a la hora de apuntar o de realizar diferentes compras mediante atajos del sistema, disfrutando de LOL de forma rápida olvidándonos incluso que estamos jugando desde el móvil, lo cual es una señal muy buena para el juego.
Fiel al original a nivel visual y sonoro
Otro de los aspectos que nos ha llamado la atención es lo bien que se ve League of Legends: Wild Rift a nivel visual que poco o nada tiene que envidiar a su hermano mayor para PC, con unos campeones bien definidos, buenas texturas en los minions o en diferentes elementos de la Grieta del Invocador así como con efectos visuales bastante llamativos y similares en los poderes o habilidades de los diferentes personajes.
Con nuestro teléfono la experiencia ha sido bastante buena, sin ninguna caída de fps y funcionando a 30 imágenes por segundo (sí, lo ideal serían 60 pero los móviles son lo que son) la única "pega" han sido quizás algunos tiempos de carga, aunque nuestro terminal es de gama media y es de esperar que en teléfonos más modernos el juego se ejecute mucho más rápido.
Un modelo de negocio free to play
Actualmente Wild Rift está en fase beta pero ya nos deja ver su modelo de negocio que, tal y como ocurre con el "original" se basa en un título free to play con micropagos para obtener monedas del juego gracias a las cuales podremos comprar diferentes trajes y aspectos estéticos para nuestros Campeones, algo que no afecta a la jugabilidad. De hecho los campeones se pueden ir desbloqueando subiendo niveles de nuestro rango en el juego (que subimos jugando partidas) o a través de las motas azules, una "moneda" que obtenemos a medida que vamos jugando partidas.
Además para fomentar el "pique" y que sigamos jugando partidas Riot también nos invita a participar en diferentes eventos estando activo actualmente "Hermandad noxiana". Gracias a este evento podemos ir cumpliendo misiones y obtener diferentes recompensas para el MOBA.
Con mucho que decir en dispositivos móviles
League of Legends: Wild Rift es una versión de League of Legends para dispositivos móviles que va a encantar tanto a los amantes del MOBA de Riot más veteranos como a nuevos jugadores que se vean atraídos por esta alternativa que nos permite disfrutar de toda la esencia de LOL en cualquier lugar, con partidas más rápidas pero igual de divertidas y con un aspecto visual muy similar al que tenemos en la versión que lleva años atrayendo a millones de jugadores en PC.
Hemos realizado estas impresiones tras jugar a la beta a la que fuimos invitados por Riot Games.
