Análisis Observer: System Redux, terror ciberpunk de nueva generación (Xbox Series X/S, PS4, Xbox One, PC, PS5)

Gracias a su estrecha relación con Xbox y al esperado The Medium, una aventura de terror con muy buena pinta que llegará en enero para Xbox Series X/S y PC, los polacos Bloober Team gozan ahora de cierta fama, aunque su trabajo les ha costado tras más de una década en la industria del videojuego. Su primer título que nos llamó poderosamente la atención fue Layers of Fear (2016), una aventura narrativa de terror con una ambientación fabulosa, y a partir de ese momento se centraron en este estilo de juegos, con Observer (2017), Layers of Fear 2 (2019) y Blair Witch (2019).

Ahora, mientras esperamos a su nuevo y prometedor trabajo, debutan en la nueva generación de consolas con Observer: System Redux, una especie de versión mejorada o remasterizada del título que lanzaron hace tres años, con un renovadísimo apartado gráfico, nuevas misiones y ajustes jugables, que hacen de esta aventura de terror ciberpunk un título muy apetecible si lo dejaste pasar en su día.

Cyberpunk 2084

El juego nos pone en la piel de Daniel Lazarski, un detective de élite en un futuro muy oscuro al que pone su voz el fallecido actor Rutger Hauer, conocido por su papel en la mítica Blade Runner.

Este detalle, junto al arranque de la aventura en un coche cuyo interior es muy parecido al del personaje de Harrison Ford en aquella cinta, dan la sensación de que vamos a estar ante una adaptación no oficial del film de Ridley Scott, pero finalmente esto se queda en un homenaje, y los derroteros acaban yendo por otros lados.

Somos un Observer, y tenemos la habilidad de meternos en la mente de los sospechosos -vivos o muertos...- para extraer pistas y pruebas, por lo que la aventura arranca con un aviso de asesinato en un edificio de apartamentos que tenemos que ir a investigar, y cuya víctima resulta ser nuestro hijo, para complicarlo todo un poco. Toda la aventura transcurre en este edificio, con varias plantas, sótanos y viviendas, en una estructura bastante laberíntica y con una ambientación muy opresiva, que es sin duda lo mejor del juego.

Alternando principalmente entre dos modos de visión, uno para buscar y analizar pistas biológicas y otro digitales, tenemos que barrer bien los escenarios buscando información, entrevistando a sospechosos y metiéndonos en la mente de algunos personajes, en una escenas pesadillescas que son espectaculares, y que se le dan la mar que bien a este estudio, como ya vimos en Layers of Fear o en algunos momentos de Blair Witch. Estas secuencias fusionan a la perfección el terror y el ciberpunk, algo que la verdad pocas veces hemos visto tan logrado, y ofrecen momentos audiovisualmente muy impactantes.

Estamos ante lo que podríamos considerar una aventura gráfica como las de antes, y aunque no os vais a encontrar puzles demasiado complejos sí tiene su miga dar con algunas pistas o contraseñas y saber dónde utilizarlas, porque el escenario donde se desarrolla es bastante grande y es fácil perderse. También hay ciertos momentos de acción, o más bien podríamos decir de sigilo, que en nuestra opinión desentonan un poquillo y nos parecen innecesarios pero que en esta versión Redux se han pulido y resultan bastante sencillos, por lo que no molestan demasiado.

La historia, repleta de todos los tópicos habidos y por haber del ciberpunk y de este tipo de aventuras futuristas con temas como el transhumanismo, está bien sin ser ninguna maravilla, aunque estamos seguros que este material en manos de un estudio con más experiencia o personalidad podría haber dado más juego, sin ir más lejos en las manos del propio Bloober Team actual. Y decimos esto porque en esta versión se han añadido tres nuevas misiones secundarias, y se nota que ahora tienen nuevas ideas, y que algunas de ellas son más complejas e interesantes. No es lo habitual que una aventura narrativa de este estilo tenga secundarias, pero a la estructura del juego le sientan genial, y es un placer explorar concienzudamente cada rincón de este bloque de apartamentos, con unos inquilinos la mar de desconcertantes y excéntricos, que retratan muy bien ese año 2084 en el que la humanidad ha perdido definitivamente la cabeza. Así en conjunto, superando la historia principal y picoteando un poco en lo secundario, tenemos una aventura que dura unas 8 o 10 horas.

Hay tantos cambios y novedades en esta versión Redux que casi se podría considerar un remake, por eso nos ha sorprendido tanto que no hayan arreglado algunos detalles que empeñan la jugabilidad. Por ejemplo el innecesariamente confuso menú de seguimiento de misiones, un poco caótico para saber qué estás haciendo o qué objetivos estás cumpliendo. Y luego lo más grave, la interacción con los elementos del entorno, que te exigen estar a una distancia con muy poco margen de error, ni demasiado cerca ni demasiado lejos, justo donde quiere el juego, lo que no tiene demasiado sentido. Esto se convierte en un problema, porque hasta que no estás a esa distancia exacta no te sale el icono de interactuar, y es muy fácil estar explorando habitaciones, que están repletas de detalles, y dejar pasar algo por algo importante porque no te pusiste a la distancia adecuada, una demasiado concreta. Es un fallo de bulto muy tonto que no entendemos que no hayan detectado, y que en nuestra partida nos ha hecho darnos más de un paseo innecesario y volvernos un poco locos explorando, dejando pasar un elemento clave que sí habíamos visto pero que simplemente no nos habíamos puesto en el lugar exacto para interactuar con él.

Como novedad exclusiva de PS5, se utilizan algunas de las funciones de su mando, el DualSense, como la respuesta háptica en diferentes situaciones o el uso de los gatillos adaptativos para interactuar con los diferentes elementos del escenario, como las puertas u otros objetos que vamos tocando o moviendo, algo que se hace constantemente. Es destacable lo en serio que se han tomado Bloober Team el intentar aprovechar las nuevas consolas, mucho más que títulos de más renombre en su lanzamiento.

Visualmente es una pasada

Dejando claro que es una aventura muy interesante, algo que ya era en 2017 aunque ahora se han añadido algunos contenidos nuevos, lo que más sorprende de System Redux es el espectacular lavado de cara gráfico que ha recibido el título original, en todos los sentidos. Nuevas texturas, iluminación, ray tracing, efectos de lluvia, humo y niebla, nuevos modelados y animaciones para los personajes, escenarios con más detalles... No hay apartado visual del juego que no hayan retocado y mucho, y con ello han conseguido que luzca como un auténtico título de nueva generación: sin exagerar es de lo más llamativo que hemos visto en las nuevas consolas.

Es una pena que en la ejecución técnica y los modos gráficos que han incluido en las nuevas consolas se han hecho un poco de lío. En PS5 y Xbox Series X se puede jugar a 1080p y 60fps, totalmente estables, y luego tenemos un modo gráfico extra en cada una de las consolas. En PS5 podemos jugar con ray tracing, a 1080p y con una tasa de imágenes muy variable, excesivamente, que oscila entre los 30fps y los 50fps, pero que llega a caer incluso hasta los 20. En Xbox Series X no hay ray tracing y tenemos un modo 4K, cuya tasa de imágenes por segundo oscila entre los 40fps y los 60fps.

Al ser un juego tan pausado estas caídas no son excesivamente graves, aunque falta trabajo de optimización, y en cualquier caso siempre podemos jugar a 1080p y 60fps, que se sigue viendo estupendo. Ya han dicho también que incorporarán ray tracing en la versión de Series X/S.

Tanto por el aspecto técnico como por la trabajada dirección de arte, en algunas localizaciones concretas es tal la cantidad de detalles y la sofisticada iluminación que llega a ser fotorrealista. Observer: System Redux nos ha hecho ver que podemos esperar grandes cosas de las aventuras narrativas o de terror de los próximos años, porque toda la potencia de las nuevas consolas y PC dedicadas a escenarios cerrados y estrechos, en los que se puede poner muchísimo detalle en pantalla, se pueden conseguir cosas alucinantes, como nos demuestra este juego.

Una aventura muy atractiva

El Observer original ya era una buen juego pero ahora, con ciertos retoques jugables, nuevos contenidos y la enorme mejora gráfica que ha recibido, lo convierten en una aventura gráfica o narrativa realmente atractiva, que además de momento no tiene rival en las nuevas consolas. Sabiendo que su historia no es ninguna maravilla y abusa de los tópicos del género, si te gusta la ambientación futurista o ciberpunk así como los toques de terror es una aventura con mucha personalidad que seguro no te va a decepcionar, muy recomendable.

Hemos realizado este análisis en su versión de Xbox Series X con un código que nos ha proporcionado Evolve PR.